Los Scouts siempre se han caracterizado por buscar hacer una buena acción a alguien cada día, y este invierno no fue la excepción, más de 500 prendas de frío fueron recolectadas y entregadas a personas en situación vulnerable.
El proyecto Dona un Abrigo para Un Amigo, impulsado por una lobato femenino del Grupo Scout 52 Yolo Kuíkatl, de la Provincia Coyoacán, logró a lo largo de tres meses conseguir donación de ropa para frío, cobijas, bufandas y gorros de muchas partes de la ciudad.
Desde octubre, Aimeé tuvo la idea de iniciar con este proyecto con la intención de poder ayudar a varias personas en situación de calle que deambulan cerca de su domicilio, no obstante, la ayuda que recibió sobrepasó sus expectativas.
“Yo quería ayudar un poco a las dos señoras que viven afuera de mi casa, porque el frío de esta temporada estaba muy fuerte y yo veía que apenas tenían con qué taparse, lo que no pensé es que mucha gente e uniera a la causa”.
Mao, como le llaman en su grupo Scout, presentó en su entorno el proyecto y pidió apoyo de otros scouts y sus papás, luego, con apoyo de sus dirigentes, se difundió la campaña en redes sociales, lo que le permitió llegar a más gente.
El invierno llegó y Mao juntó más de medio millar de prendas de frio; ya era momento de llevar a cabo la segunda parte de el proyecto, hacer que la donación de todas esas personas llegara a su destino final.
Fue justo la noche que el invierno llegó cuando comenzó a repartir; con la ayuda de sus padres, recorrió diversas colonias de la alcaldía Benito Juárez, entre ellas Portales, Alamos, Del Valle, Letran Valle, en busca de personas en situación de calle; no fueron pocas personas las que encontró.
Una segunda entrega la llevó a cabo en la víspera de Noche Buena, al menos 200 prendas fueron llevadas a la zona centro de la Ciudad, en la alcaldía Cuauhtémoc, donde se concentra una gran parte de personas en situación de calle.
El Corredor de Paseo de la Reforma, entre la Glorieta de Colón y el Eje 1 Norte, así como el extinto Teatro Blanquita, concentran una gran cantidad de personas en situación vulnerable, con esfuerzo, llevó al menos una prenda de frío a cada una de estas.
Año nuevo estaba por llegar, esta sería la tercera vez que Mao saldría a la calle para completar su misión, esta vez, sería acompañada de otros Scouts de la Provincia Coyoacán, quienes además de la ropa que ella llevaba, se sumaron para entregar algún refrigerio y juguetes a los pequeños que viven en la calle.
JLP