Ganan bajos salarios, porque su empleo es de paso, la mayoría son estudiantes universitarios, ellos son los empleados de los cines. Tras más de 4 meses de permanecer cerrados esos centros de proyección de películas, regresaron con un aforo del 30 por ciento, ahora ese personal se entera que su salario está recortado.
Jóvenes “colaboradores” de Cinemex y Cinépolis se comunicaron a este diario para denunciar que les redujeron su salario, a menos horas de trabajo, les cargan adeudos de salarios caídos y varios de ellos los están presionando para que renuncien a su empleo.
Si bien ellos saben que cuenta con un supuesto sindicato al cual nunca ven ni conocen a sus representantes, les gustaría que les ayudaran y orienten para que por los menos los liquiden conforme a la ley.
Dijeron que a los gerentes les redujeron el salario 30%; en junio 50% y para julio se les dejó de pagar con la promesa de que al regresar esta actividad se les pagarían las catorcenas faltantes.
A otros colaboradores, para fines de julio les anunciaron que no les iban a pagar y “a varios de nosotros nos recortaron los horas y nos dijeron que nos van a pagar menos, porque apenas se abrieron las salas y ha venido menos gente de la que esperaban”, narró un joven que laboran en un Complejo cinematográfico en Plaza Satélite.
Otro colaborador de cines en Plaza Insurgentes comentó que este problema del recorte salarial lo quieren ver con el supuesto sindicato que los representa, “para ver si los puede orientar, pues en la contingencia realizaron cursos en la plataforma de universidad grupo Cinemex, lo cual cuenta como una prestación de servicios”.
Otra joven narró que al regresar al complejo donde trabaja por un salario mínimo, ya no se lo pagaron completo ni el bono por asistencia y puntualidad.
De ahí que demandaron a la titular de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, Luisa María Alcalde tome cartas en el asunto, para que reciban las demandas de los trabajadores de los cines que “si de por si ganan una miseria, ahora con los recortes, no les alcanza ni para los pasajes.
De acuerdo a la Cámara Nacional de la Industria Cinematográfica por la contingencia sanitaria se perdieron alrededor de 600 empleos a nivel nacional y 12 complejos cerraron de forma definitiva sus puertas.
Canacine estimó que, debido al cierre de salas por la pandemia del coronavirus se dejaron de vender 6 mil 500 millones de pesos sólo en venta de boletos, lo que representa a cerca de 130 millones de personas que no asistieron a las salas. “Solamente de boletos de taquillas se han dejado de vender cerca de 6 mil 500 millones de pesos en venta de boletos, son unos 130 millones de personas que han dejado de asistir a las salas de cine en esta pandemia y sólo en México.
La escasa venta de boletos en la Ciudad de México se ha vivido en las taquillas de varios estados del país donde los cines retomaron operaciones.
La Canacine recordó en días pasados que la apertura de salas en la Ciudad de México permitirá “reactivar la economía de esta importante industria y salvaguardar los 50 mil empleos directos y 150 mil indirectos que dependen de las salas de exhibición en lo largo y ancho del país”.
JLP
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