Para evitar en el ciclo escolar 2023-2024 que inicia el próximo lunes 28 de agosto nuevos casos de violencia y discriminación, hasta por color de piel y condición física, la presidenta de la Comisión de Juventud del Congreso de la Ciudad de México, Andrea Vicenteño Barrientos, respaldó la demanda de padres de familia en el sentido de exhortar a las autoridades educativas a revisar los programas, así como los contenidos sobre el tema.
La diputada sin partido que llegó al recinto de Donceles y Allende por el PAN partido al que renunció desde el principio de la II Legislatura, pugnó por detectar fallas y frenar casos que vulneran a la niñez y juventud, de ahí la importancia de revisar los errores y omisiones en ciclos pasados para actualizar las estrategias y detener el abuso entre alumnos.
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Vicenteño Barrientos quien emprende un trabajo conjunto con los de la bancada de Morena, dio cuenta que la Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares (ENDIREH/2021), reveló que 32.3 por ciento de las mujeres de 15 años y más, experimentó algún tipo de violencia a lo largo de su vida como estudiante, en tanto que la violencia física, con un 18.3 por ciento, fue la de mayor prevalencia a lo largo de la vida escolar, lo que muestra que aún hay fallas en esa materia y falta preparación en el magisterio, que tolera el acoso a fin de evitar quejas, principalmente provenientes de los padres de familia.
Para la representante popular se requieren eficientes medidas preventivas y resolutivas, para que las escuelas sean entornos seguros para jóvenes y niños, al tiempo que acotó que durante las Jornadas de Salud que ofreció en las vacaciones a los habitantes de seis colonias de Iztapalapa como Rodeo, Mirasoles, Paraje San Juan Cerro, el Manto, Calle 11 y San Andrés Tomatlán, escuchó los testimonios de padres de familia sobre lo que vivieron alumnos en el pasado ciclo escolar.
Difundió que le revelaron que hay temor del magisterio a denuncias y a algunos maestros les falta capacitación para detener la violencia o dar solución a los casos, a la vez que expuso que el periodo vacacional en escuelas debió servir para que las autoridades educativas, revisaran sus estrategias y contrarresten la violencia y la discriminación.
La congresista sin partido precisó que con el regreso a clases no se deben repetir los casos violentos que se denunciaron en el ciclo escolar pasado y, estimó necesarios llevar a cabo talleres obligatorios para maestros, alumnos y padres de familia sobre cómo actuar al interior de una escuela en caso de discriminación y acciones agresivas.
Sostuvo que lo mismo sucede en el Estado de México, donde también fue invitada por vecinos de Ixtapaluca a compartir experiencias y además, acordar una alianza entre regiones para enfrentar de manera conjunta la problemática.
Expuso que una madre reveló el caso de un estudiante de secundaria golpeado por su color de piel. En ese sentido la representante popular manifestó que dichos casos, demuestran la urgente necesidad de trabajar de cerca con la Secretaría de Educación Pública (SEP) para replantear sus políticas educativas contra la violencia física y psicoemocional entre estudiantes.
Aclaró que “las medidas que aplican maestros de correr al agresor de la escuela o los padres de familia de cambiar de colegio a su hijo violentado, no es la correcta; son acciones, que no resuelven ni frenan el aumento de los casos”.
También Andrea Vicenteño sostuvo: “lo que hacen es pasar de una escuela a otra la violencia para que otros niños o jóvenes, sean vulnerados y el agresor incremente su odio”.
Frente a vecinos, encabezados por Karmina Villalobos Sánchez, quien la invitó a escuchar testimonios sobre violencia en hombres y mujeres, pugnó por tratar a fondo y multidisciplinariamente ese problema con políticas públicas.
La congresista, también integrante de la Comisión de Derechos Humanos del Poder Legislativo local, dijo que la propuesta de una línea telefónica de alerta y alianza entre padres de familia, maestros y autoridades ya es urgente para enfrentar juntos esa problemática.
Frente a vecinos de Iztapalapa e Ixtapaluca, aceptó que, tanto en la alcaldía como en la presidencia municipal, se deben impulsar escuelas donde los padres sientan que sus hijos están seguros.
Tras conocer el testimonio de una madre de que su hijo fue severamente golpeado por su color de piel, entre otros casos de violencia, pidió no guardar silencio por temor, porque con la denuncia las autoridades educativas se darán cuenta de la gravedad de la situación que se vive y la urgencia de modificar sus estrategias.
Aseguró que respalda la alianza entre regiones y la línea telefónica de alertar sobre la violencia en los planteles educativos. “No se sientan solos, trabajar juntos por la justicia de las víctimas, es mejor”, agregó.
Expuso que los exhortos o propuestas de ley, como la que presentó en el Congreso capitalino en noviembre pasado, para diseñar un programa especial y urgente contra consumo de drogas y violencia, se deben homologar en la entidad mexiquense.
Aceptó que Ixtapaluca comparte con Iztapalapa casos de violencia en escuelas y fallas en su atención, sin embargo, hay avances en la protección de las víctimas, aunque no lo suficiente y menos contra ese abuso que se da después que cierran la puerta de la escuela.
“Unamos nuestras voces y esfuerzos en esta alianza que a todos beneficia, y empujemos para que se instale una línea de alerta contra la violencia de cualquier tipo en los colegios”, remató.
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