Personal del gobierno de la CDMX bloqueó los carriles centrales de Periférico Sur para darles mantenimiento a pesar de ser horas pico y generó dos embotellamientos, el más grande, de al menos 12 kilómetros, inició, en el caso de los carriles confinados, en el cruce con Insurgentes y continuó hasta el entronque con Río Mixcoac y en el caso de la Autopista Urbana Sur desde Luis Cabrera hasta la desviación a Insurgentes.
Los retrasos en las dos vías iniciaron a partir de las 7:00 horas de este martes y hasta pasado el medio día comenzó a fluir de manera constante el tránsito vehicular.
El segundo piso en el tramo San Jerónimo-San Antonio pasó de ser un recorrido de ocho minutos a uno de hasta 70 minutos sin que se dieran señalamientos. El congestionamiento fue causado por el corte a la circulación que se hizo en la salida hacia Viaducto Río Becerra lo que obligó a los conductores a tomar la salida de Eje 6 hacia Insurgentes Sur.
Los trabajos de mantenimiento de las vías principales son responsabilidad de la Secretaría de Obras de la CDMX, a cargo de Jesús Esteva, y de acuerdo con los trabajadores la instrucción para este día era entregar los frentes de obra que fueron iniciados durante la noche del lunes 25 de abril y la madrugada del martes 26.
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Los reportes de los usuarios de los carriles centrales del Periférico Sur señalan que por el embotellamiento el tiempo utilizado fue superior a los 80 minutos.
El reporte de los trabajadores es que se están realizando labores de mantenimiento en la vía principal que se van a mantener en lo que resta del mes en diferentes frentes de trabajo.
Ambas vías comenzaron a regularizar su movimiento a partir de las 13 horas cuando disminuyó el tránsito en la zona y liberaron los carriles centrales de las dos vías principales.
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