/ martes 8 de febrero de 2022

ONG´S piden que GCDMX entregue protocolos avalados por Cofepris para uso de Ivermectina

Alertaron sobre las implicaciones legales al haber utilizado este tipo de medicamentos sin la aprobación de las autoridades sanitarias, ni el consentimiento de pacientes mediante la firma de una carta de consentimiento

Las autoridades del gobierno de la Ciudad de México involucradas con el estudio de ivermectina y azitromicina para el tratamiento de pacientes con SARS-CoV-2, deben presentar de inmediato todos los protocolos de investigación avalados por los Comités de Ética de las instituciones de salud que participaron en el desarrollo de dicha investigación.

Así lo declararon, Luis Adrián Quiroz, presidente de la organización Salud, Derechos y Justicia y Andrés Castañeda, de la organización Cero Desabasto, al destacar que ningún estudio o investigación en materia de medicamentos se puede llevar a cabo en el país, sin el aval de los Comités de Ética de las instituciones de salud, con la aprobación de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) y la autorización de las personas que participan en dicho estudio, a través de la firma de una carta de consentimiento informado.

En entrevista exclusiva para LA PRENSA, el activista y coordinador general de Derechohabientes Viviendo con VIH del IMSS (DVVIHIMSS) enfatizó que la sociedad quiere saber: ¿cuántas personas que recibieron ivermectina sabían que estaban participando en un estudio y cuántas de ellas firmaron una carta de consentimiento informado?

El protocolo debe estar inscrito y avalado por diversas instancias, “si alguien no hizo bien todos estos procesos, entonces se faltó a la ley y hay un tema de responsabilidad de los servidores públicos y un acto que pudo poner en riesgo la salud de miles de personas”.

Toda investigación científica o estudio con medicamentos, debe contar con un protocolo avalado por los Comités de Ética de las instituciones de salud involucradas, con la aprobación de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios y las personas que participan deben firmar una carta de consentimiento informado

Luis Adrián Quiroz, Presidente de Salud, Derechos y Justicia

Advirtió que la investigación también tuvo que ser avalada y autorizada por los Comités de Ética y Comités Científicos de cada una de las instituciones de salud que participaron, en este caso, todos los hospitales de la Secretaría de Salud del gobierno capitalino y del IMSS, donde fueron entregados los kits de medicamentos.

Asimismo, destacó que un tercer requisito indispensable y muy importante es la firma de cartas de consentimiento informado por parte de todas las personas que recibieron los medicamentos, qué seguimiento tuvieron y cuál fue su evolución.

“Todo esto lo debe informar claramente el gobierno de la Ciudad de México, porque aquí no es un tema de buenos y malos”, apuntó al considerar que estamos frente a un tema sumamente delicado, que puede constituir graves faltas a la ley, responsabilidades de servidores públicos y violación a derechos humanos, como es el acceso y protección a la salud y el derecho de acceso a la información.

Foto: Cuartoscuro

Por otra parte, Andrés Castañeda, coordinador de la Agenda de Salud y Bienestar de la organización Cero Desabasto alertó que este caso es sumamente controversial, no solo por haber dado a los pacientes con Covid-19 ivermectina, sino también azitromicina, que necesita supervisión médica para su uso y, al ser un antibiótico no tiene ninguna efectividad para el tratamiento de virus, además de poder generar resistencia antimicrobiana.

El activista, también cuestionó la entrega de “kit’s” para regalar medicamentos. “No existe ninguna evidencia de la efectividad de este tipo de políticas, parece más una estrategia publicitaria que se trata de vender como si fuera una buena política pública”.

Castañeda indicó que es preocupante desde la óptica científica, porque no había evidencia de que estos medicamentos fueran efectivos para el tratamiento de Covid-19. “Al revés, hay evidencia de que esto puede ser perjudicial al tomar un medicamento de manera innecesaria, que no sirve para lo que se busca y a nivel comunitario, también debemos ver la posibilidad de provocar un problema de resistencia antimicrobiana importante”, apuntó.


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En el ámbito legal, también tenemos que analizar que la entrega de estos medicamentos haya estado validada y respaldada por una receta médica; de no ser así, aquí estamos frente a un problema legal

Andrés Castañeda, coordinador de la Agenda de Salud y Bienestar de la organización Cero Desabasto

En el caso de ivermectina, donde no se estaba probando un medicamento nuevo, pero sí para una utilización distinta a la conocida, debió contar con la autorización de Cofepris, pero en el caso de la azitromicina, se violó la normativa de farmacovigilancia, porque todo antibiótico debe ser prescrito con receta médica, además de ser un medicamento antibacteriano que nada tiene que hacer contra un virus, como es el caso del SARS-CoV-2.

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Las autoridades del gobierno de la Ciudad de México involucradas con el estudio de ivermectina y azitromicina para el tratamiento de pacientes con SARS-CoV-2, deben presentar de inmediato todos los protocolos de investigación avalados por los Comités de Ética de las instituciones de salud que participaron en el desarrollo de dicha investigación.

Así lo declararon, Luis Adrián Quiroz, presidente de la organización Salud, Derechos y Justicia y Andrés Castañeda, de la organización Cero Desabasto, al destacar que ningún estudio o investigación en materia de medicamentos se puede llevar a cabo en el país, sin el aval de los Comités de Ética de las instituciones de salud, con la aprobación de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) y la autorización de las personas que participan en dicho estudio, a través de la firma de una carta de consentimiento informado.

En entrevista exclusiva para LA PRENSA, el activista y coordinador general de Derechohabientes Viviendo con VIH del IMSS (DVVIHIMSS) enfatizó que la sociedad quiere saber: ¿cuántas personas que recibieron ivermectina sabían que estaban participando en un estudio y cuántas de ellas firmaron una carta de consentimiento informado?

El protocolo debe estar inscrito y avalado por diversas instancias, “si alguien no hizo bien todos estos procesos, entonces se faltó a la ley y hay un tema de responsabilidad de los servidores públicos y un acto que pudo poner en riesgo la salud de miles de personas”.

Toda investigación científica o estudio con medicamentos, debe contar con un protocolo avalado por los Comités de Ética de las instituciones de salud involucradas, con la aprobación de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios y las personas que participan deben firmar una carta de consentimiento informado

Luis Adrián Quiroz, Presidente de Salud, Derechos y Justicia

Advirtió que la investigación también tuvo que ser avalada y autorizada por los Comités de Ética y Comités Científicos de cada una de las instituciones de salud que participaron, en este caso, todos los hospitales de la Secretaría de Salud del gobierno capitalino y del IMSS, donde fueron entregados los kits de medicamentos.

Asimismo, destacó que un tercer requisito indispensable y muy importante es la firma de cartas de consentimiento informado por parte de todas las personas que recibieron los medicamentos, qué seguimiento tuvieron y cuál fue su evolución.

“Todo esto lo debe informar claramente el gobierno de la Ciudad de México, porque aquí no es un tema de buenos y malos”, apuntó al considerar que estamos frente a un tema sumamente delicado, que puede constituir graves faltas a la ley, responsabilidades de servidores públicos y violación a derechos humanos, como es el acceso y protección a la salud y el derecho de acceso a la información.

Foto: Cuartoscuro

Por otra parte, Andrés Castañeda, coordinador de la Agenda de Salud y Bienestar de la organización Cero Desabasto alertó que este caso es sumamente controversial, no solo por haber dado a los pacientes con Covid-19 ivermectina, sino también azitromicina, que necesita supervisión médica para su uso y, al ser un antibiótico no tiene ninguna efectividad para el tratamiento de virus, además de poder generar resistencia antimicrobiana.

El activista, también cuestionó la entrega de “kit’s” para regalar medicamentos. “No existe ninguna evidencia de la efectividad de este tipo de políticas, parece más una estrategia publicitaria que se trata de vender como si fuera una buena política pública”.

Castañeda indicó que es preocupante desde la óptica científica, porque no había evidencia de que estos medicamentos fueran efectivos para el tratamiento de Covid-19. “Al revés, hay evidencia de que esto puede ser perjudicial al tomar un medicamento de manera innecesaria, que no sirve para lo que se busca y a nivel comunitario, también debemos ver la posibilidad de provocar un problema de resistencia antimicrobiana importante”, apuntó.


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En el ámbito legal, también tenemos que analizar que la entrega de estos medicamentos haya estado validada y respaldada por una receta médica; de no ser así, aquí estamos frente a un problema legal

Andrés Castañeda, coordinador de la Agenda de Salud y Bienestar de la organización Cero Desabasto

En el caso de ivermectina, donde no se estaba probando un medicamento nuevo, pero sí para una utilización distinta a la conocida, debió contar con la autorización de Cofepris, pero en el caso de la azitromicina, se violó la normativa de farmacovigilancia, porque todo antibiótico debe ser prescrito con receta médica, además de ser un medicamento antibacteriano que nada tiene que hacer contra un virus, como es el caso del SARS-CoV-2.

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