Por primera vez, los motociclistas se ubican como los usuarios más vulnerables de la vía pública en la Ciudad de México al registrar el porcentaje más alto de personas fallecidas con 41%, incluso, por arriba de los peatones, que representan el 30% de las defunciones.
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Durante el diálogo “Calles para la vida, repensar la movilidad”, convocado por la Alianza Nacional por la Seguridad Vial (Ansevi), Constanza Delón Córdova, directora de Seguridad Vial y Seguimiento de la Información de la Secretaría de Movilidad de la Ciudad de México (Semovi) señaló que la motocicleta es un vehículo inseguro, no solo porque carece de una carrocería que proteja al conductor, sino también por las altas velocidades que pueden alcanzar.
Lesionados y fallecidos
De acuerdo con el último Reporte Trimestral de Hechos de Tránsito, emitido por la Semovi, en el cuarto trimestre de 2022 se registraron 152 personas fallecidas y 9,265 personas lesionadas en hechos de tránsito en la Ciudad de México. De ellos, el 41% de los fallecidos y el 44% de los lesionados fueron motociclistas.
Los peatones representaron el 30% de las personas fallecidas; 16% pasajeros, 10% conductores y 3% ciclistas. Respecto a las personas lesionadas, el 22% fueron pasajeros, 15% conductores, 14% peatones y 6% ciclistas.
Para salvar vidas, en la Ciudad de México se implementó la licencia A1 y A2, que son específicamente para motociclistas, así la Moto Escuela, cuyo objetivo es capacitar a la población sobre la conducción segura de la motocicleta y se crea conciencia de que una motocicleta es peligrosa por sí misma.
“Hemos visto que en los últimos años, los motociclistas se ubican como los usuarios más vulnerables de la vía. En tema de muertes superaron incluso a los peatones”, alertó Constanza Delón al admitir que no es posible prohibir el uso de la motocicleta, pero sí regular.
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Costo de transición a un sistema de transporte moderno y sustentable
Por su parte, Nicolás Rosales, presidente de la Asociación Mexicana de Transporte y Movilidad destacó que el costo de la transición hacia un sistema de transporte moderno y sustentable no debe recaer en los bolsillos de los usuarios.
De ahí que se pronunció por la importancia de impulsar políticas públicas en materia de inversión y financiamiento para impulsar la operación de los nuevos sistemas de transporte público.
“Es muy cara la conversión, sí, pero es muy necesaria; debemos entender que el modelo actual de transporte público debe cambiar y no se puede seguir apostando a la infraestructura gris, asfaltando más calles o construyendo segundos pisos, porque así no vamos a avanzar”, indicó Nicolás Rosales.
Señaló que la crisis sanitaria del Covid-19 ocasionó un boquete enorme en las finanzas de las empresas ya sean establecidas o las llamadas “hombre-camión”, el cual tardará en recuperarse tres o cuatro años más.
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Falta de recursos
Indicó que la falta de recursos dificulta la transición a un sistema sustentable de transporte público, por lo que planteó la necesidad de diseñar una política de subsidios, a través de una tarifa técnica, porque “los usuarios no tienen por qué pagar el costo de la modernización del transporte público”.
“Necesitamos políticas públicas que vayan con temas de inversión y financiamiento para esos nuevos modelos de transporte, que es caro, sí, pero es necesario”, apuntó Rosales al destacar que el gremio de operadores de transporte, tanto en la Ciudad de México, como en todo el país, está dispuesto a cambiar, pero enfrentan el problema de la falta de recursos.
“La tarifa no alcanza para tener sistemas sostenibles de transporte público, por lo que hay que establecer un esquema de subsidio dirigido a los usuarios, no a los operadores, que permitan tener puntos de equilibrio en la operación, pero no a costa del usuario… el usuario no tiene por qué pagar el costo de la modernización”, apuntó.
Resaltó la necesidad de buscar esquemas de financiamiento que permitan esta transición, pero al mismo tiempo permitan que más personas tengan acceso al transporte público, toda vez que este servicio constituye un factor de desarrollo para las personas y la sociedad en su conjunto.
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