Los alumnos o niños que presentan necesidades específicas asociadas a discapacidad, condición y/o aptitudes sobresalientes en la escuela de educación básica forman un sector que requiere apoyos de personal capacitado para asesorar, orientar, acompañar o sugerir a docentes de grupo regular o padres de familia.
En la Ciudad de México, actualmente los servicios que atienden a estos alumnos son los de la Unidad de Educación Especial y Educación Inclusiva (UDEEI) y en el Estado de México siguen siendo las Unidades de Servicio de Apoyo a la Educación Regular (USAER).
En los meses de pandemia desde el 23 de marzo sucede que la Dirección de la USAER tomó acuerdos con sus equipos de trabajo para el seguimiento de la orientación impartida a distancia, tanto a docentes como a padres de familia para dar continuidad a su plan de intervención y a las estrategias específicas para que sus alumnos pudieran concluir el último trimestre del ciclo escolar 2019-2020.
Para ello se requirió a contactarlos vía WhatsApp (mensajes y videollamadas) y llamadas telefónicas con duración promedio de entre cinco minutos y diez minutos. Se compartió material de apoyo y actividades a realizar en casa. La retroalimentación fue mediante evidencias en fotografías digitales de los productos y recomendaciones llevadas a cabo por los menores y sus familias.
Después de concluir el ciclo escolar se elaboró una encuesta (formulario) para obtener mejores resultados; se involucró más a los equipos de apoyo, formados por los siguientes especialistas: maestras y maestros de apoyo (metodología de aprendizaje y estrategias para los ajustes razonables en la currícula), trabajo social (enlace con padres y habilidades adaptativas), psicología (habilidades socioemocionales) y comunicación (lenguaje fonológico, semántico, sintáctico y pragmático). Y las aplicaciones más utilizadas actualmente fueron el Zoom y Meat de Google.
A partir de los logros y avances, al considerar los productos y listas de cotejo elaboradas y diseñadas por la USAER y requisitadas en colaboración con los padres de familia en consenso con los docentes, se realiza un análisis y conclusiones cualitativas para obtener una valoración en el trimestre septiembre-noviembre de 2020.
Y asimismo continuar el ajuste de estrategias para apoyar la educación de los menores con necesidades específicas. Y con ello se espera que se sigan potencializando sus habilidades, procesos y aptitudes que permitan a cada estudiante no solamente la inclusión educativa sino la inclusión social que garantice el derecho a la formación con equidad.