La alcaldía Xochimilco recibió la instrucción del Instituto de Transparencia, Acceso a la Información Pública, Protección de Datos Personales y Rendición de Cuentas de la Ciudad de México (INFO) de transparentar información sobre la cantidad de topes en la demarcación.
En relación con ello y en sesión del pleno de ese órgano garante, la comisionada ciudadana María del Carmen Nava Polina, destacó que en la capital del país que cuenta con un parque vehicular de más de seis millones de vehículos según el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), es crucial la necesidad de contar con medidas que controlen la velocidad.
Más de 2 mil 500 atropellados
Los datos a nivel nacional indican que la mayoría de las víctimas mortales de accidentes de tráfico son las que transitan de manera peatonal, en tanto que las últimas cifras de 2021 señalan que murieron 2 mil 536 personas por atropellamiento, un 18 por ciento del total de víctimas.
Y detalló: “los reductores de velocidad mejoran la seguridad vial, y son relevantes en áreas residenciales y zonas con alta actividad peatonal, porque facilitan el cruce de calles y reducen la probabilidad de atropellamientos; esto es importante para las infancias, personas mayores y personas con discapacidad”.
Por lo que hace a la accesibilidad, Nava Polina señaló que los reductores de velocidad, implementados de manera correcta, contribuyen a crear una infraestructura vial que considere las necesidades de todas las personas usuarias, incluso aquellas con movilidad reducida, porque la normativa establece que los reductores deben ser de dos metros de ancho en vías primarias y de un metro en vías secundarias, con una altura de ocho centímetros.
Sostuvo que, sin embargo, muchos topes son colocados de manera improvisada, sin respetar estas medidas o sin contar con la autorización correspondiente. Aunque no hay registro exacto, en 2016 la Secretaría de Seguridad Pública de la Ciudad de México calculó que en la capital había, al menos, 30 mil topes, de los cuales encontró más de dos mil que no estaban regulados.
Piden información sobre topes
En suma, dijo, garantizar el acceso a la información sobre la ubicación y cantidad de reductores de velocidad permite a la sociedad conocer y evaluar la distribución de estos, facilita una mejor planificación y mejora en la seguridad vial. Esta información también permitiría diseñar políticas efectivas para canalizar los recursos de manera más eficaz y eficiente, y mejorar la calidad de vida de las personas.
La comisionada ciudadana posicionó el recurso de revisión INFOCDMX/R|R.IP.2768/2024, interpuesto en contra de la alcaldía Xochimilco y en la sesión, expuso la importancia de este caso porque se trata de una solicitud de información relacionada con infraestructura vial, en la que se pidió el número de topes existentes en las calles y avenidas secundarias de la demarcación territorial.
La alcaldía, en su respuesta, argumentó que no cuenta con un registro o base de datos sobre la información requerida. Sin embargo, la persona presentó un recurso de revisión ante el órgano garante, en la que se inconformó por la falta de fundamentación y motivación de la respuesta que recibió.
Nava Polina destacó que, al examinar el caso, su ponencia determinó que la alcaldía Xochimilco es competente para responder la solicitud toda vez que, de acuerdo con su manual de administración, la unidad responsable de la construcción y mantenimiento de los topes es la Jefatura de Unidad Departamental de Pavimentación por Administración.
Dijo que la respuesta inicial de la alcaldía no fue suficiente, debido a que no realizó una búsqueda exhaustiva en todas sus áreas competentes y no remitió la solicitud a la Secretaría de Movilidad de la Ciudad de México, que también podría tener la información requerida.
En su argumentación, explicó que la principal función de los topes es controlar la velocidad de circulación de los vehículos en zonas donde el tránsito rápido puede resultar peligroso, como en cruces peatonales sin semáforos, o en zonas de escuelas, hospitales y parques. Las alcaldías cuentan con atribuciones para su instalación y mantenimiento, mientras que la Secretaría de Movilidad es quien brinda la autorización respectiva.
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