En lo que va del presente año la Ciudad de México se ubica como la entidad con más registros de presuntos delitos de violencia familiar con 27 mil 851, lo que obliga a actuar para revertir esa situación, confirmó el coordinador de la bancada del PRI en el Congreso capitalino, Ernesto Jiménez Alarcón, quien se pronunció a favor de reformar el Código Penal local para incrementar la pena contra quienes los cometan.
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Aclaró que, por cada 100 mil habitantes, 309 mil 900 han sufrido una situación de violencia familiar en la metrópoli, ello sin contar los que no se denuncian, cifra negra que también debe contrarrestarse con medidas legislativas.
El diputado priísta consideró necesario aumentar la pena en contra de quien cometa un delito de violencia familiar, para que llegue a ser de entre cinco y nueve años de prisión.
Asimismo, el congresista del Revolucionario Institucional difundió que, de acuerdo con el Secretariado Ejecutivo del Sistema de Seguridad Nacional, el número de llamadas de emergencia relacionadas con incidentes de violencia familiar en los hogares hasta septiembre pasado en la capital del país, fue de 54 mil 605 mil.
“Las cifras nos posicionan nuevamente como la entidad con mayor número de llamadas registradas de enero a septiembre de este año y es algo que atender; los delitos de violencia familiar van en aumento y es algo que no se puede negar”, declaró en entrevista.
Jiménez Alarcón, al explicar su iniciativa, dijo que va dirigida a reformar el artículo 200 del Código Penal para el Distrito Federal, toda vez que, hasta ahora, los delitos de violencia familiar se castigan con una pena que va de uno a seis años de prisión y lo que se busca es que sean de cinco a nueve años de cárcel.
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El diputado por la alcaldía La Magdalena Contreras, expuso que este tipo de delitos se ha incrementado durante los últimos años. Así, a nivel nacional se registraron 210 mil 190 en 2019, 220 mil 032 en 2020 y 253 mil 737 en 2021.
Delineó que la situación que se vive en torno a esa situación, no debe pasar desapercibida, porque la incidencia del delito de violencia familiar atañe directamente al núcleo central de nuestra sociedad, que es la familia, como principal círculo social de formación de nuestros niños, niñas y adolescentes.
La iniciativa de Jiménez Alarcón se turna para su análisis y dictamen a la Comisión de Administración y Procuración de Justicia del Congreso y en la misma, se establece que se está ante un problema que se generaliza cada vez más y requiere ser atendido de manera adecuada, por lo que se considera que el incrementar los años de cárcel por agresiones en los hogares es una forma de desincentivar.
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