Se tiene un registro de 591 sitios de fracturamiento o hundimiento del subsuelo, en la ciudad de México, y hay expertos que aseguran que han detectado 12 sitios de la capital con deformación crítica, ubicados en diversas colonias de las alcaldías de Iztapalapa, Iztacalco, Tláhuac, Cuauhtémoc, Benito Juárez y Xochimilco.
La formación de fallas, hundimientos o grietas representan un peligro para quienes habitan la ciudad, pues éstas afloran hasta llegar a la superficie, devastando con ellas infraestructura hidráulica, calles e inmuebles.
De ahí, la diputada Esperanza Villalobos Pérez, integrante del grupo parlamentario de MORENA, impulsa la iniciativa para adicionar el inciso I) al numeral 1, Apartado I del artículo 16 de la Constitución Política de la Ciudad de México, en materia de atención por defectos en el subsuelo.
Analizarán en comisión del Congreso capitalino reformar la Carta Magna local en materia de atención por defectos en el subsuelo
La Carta Magna local establece que el Gobierno de la Ciudad garantizará la seguridad de las personas, estableciendo medidas de prevención, mitigación y gestión integral de riesgos que reduzcan la vulnerabilidad ante eventos originados por fenómenos naturales y por la actividad humana.
La propuesta, turnada a la Comisión de Puntos Constitucionales e Iniciativas Ciudadanas, plantea que el gobierno capitalino pueda realizar los estudios técnicos del subsuelo necesarios para la atención y mitigación de grietas.
De lo anterior podría realizar los programas participativos para brindar atención de las personas y familias de escasos recursos que habiten en zonas y edificaciones de riesgo por grietas en el subsuelo en condiciones que compensen sus pérdidas patrimoniales, mantengan sus redes de apoyo y mejoren su calidad de vida.
En la iniciativa se destaca la necesidad de atender el problema en la zona oriente, específicamente en la alcaldía de Iztapalapa, ya que sus características de alta concentración demográfica hacen que sus requerimientos de servicios como el consumo de agua potable repercutan directamente en la dinámica del suelo, generando altos riesgos para la vida de la población que habita la demarcación.
“Desde este gobierno debemos establecer acciones orientadas al derecho que tienen nuestros ciudadanos a tener una vivienda digna y a su seguridad patrimonial. No podemos dejar desamparado a nuestro pueblo por defectos del subsuelo, que vienen desde la fundación de nuestra ciudad”, indica la congresista en su iniciativa.