/ domingo 10 de mayo de 2020

Festejos virtuales para las mamás… en su día

El festejo en esta ocasión fue inédito y el uso de la tecnología abrió oportunidades para no dejar compartir algún detalle a las madres mexicanas

Para las madres mexicanas este 10 de mayo será muy diferente y muchas no lo olvidarán, porque sólo recibieron rosas, regalos, música, tarjetas y felicitaciones virtuales o bien paquetes de algunas tiendas de ropa, pastel o comida a domicilio, por la jornada nacional de sana distancia para prevenir el contagio del Covid-19.

Si bien las madres están conscientes de este festejo es distinto e inusual, pero lo que nunca cambiará es el amor por ellas.

En muchas casas, las mamás que poco saben de tecnología, tuvieron que aprender a utilizar un teléfono inteligente, la computadora o una tableta, para conectarse con sus hijos, en otros casos las llamadas telefónicas estuvieron presentes para celebrar este gran día para el pueblo de México.

Y claro, las mamás modernas y más jóvenes, no les costó ningún trabajo hacer video llamadas o video conferencia, instalarse en alguna plataforma como zoom, webex meet, Jitsi Meet.

Mis hijos ya me llamaron por teléfono, platica Dora Zárate, madre de tres hijos, dos viven en la ciudad de México y el otro en Denver, Colorado. “Uno de ellos vive conmigo, y gracias a él, me pude conectar con mi hijo que radica en Estados Unidos, mediante el Zoom, platique con él buen rato. Nos tomamos un café y pastel virtual, de la misma manera me cantó las mañanitas, me envió flores”.

Perla Monte, madre soltera y trabajadora en una oficina de gobierno narró que ella organizó una videollamada con toda la familia. “Vivo en la casa de mi mamá, -hoy estoy haciendo home Office por el confinamiento- . Encendí la computadora muy temprano para que mis hermanos se conectarán y de esta manera todos juntos festejáramos a las que madres”. A mi mamita, le dio gusto ver a todos sus hijos reunidos a través de una pantalla.

Mi madre, mis hermanas y yo, nos apapachamos mutuamente, y nuestro mayor deseo es que ya termine esta pandemia para poder reunirnos otra vez, y claro también pedimos a Dios que no, nos vayamos a contagiar, comentó Perla.

Pero también hay mamás que no pudieron celebrar el día en su casa, sino más bien trabajando. Verónica es una enfermera del IMSS, madre soltera con una hija. Ella narró que por tanto trabajo que tiene por la pandemia, no puedo festejarse ni a ella ni a su madre.

En otros años, no los daban el día. “Lo que hacía era llevar a mi mamá a desayunar y a comer y ahora con este virus, ni me acercó a ella, porque es diabética, hipertensa y tiene 78 años, es decir, está en el grupo más vulnerable y no quiero ponerla en riesgo, pese a que nosotros en el Hospital llevamos estrictas medidas de sanidad.

Es importante recordar que desde 1922, cada 10 de mayo los mexicanos rinden homenaje a sus madres. Es un día que se acostumbra a regalan flores, globos, tarjetas de felicitación que algunas veces son acompañados por serenatas de de mariachi, banda o tríos, mientras otros acuden a restaurantes o plazas y otras personas visitan en los cementerios a las que ya no están a su lado.

Pero ahora, el mejor regalo para las madres es que todos conserven la salud, y dejar para después el festejo en familia

JLP

Para las madres mexicanas este 10 de mayo será muy diferente y muchas no lo olvidarán, porque sólo recibieron rosas, regalos, música, tarjetas y felicitaciones virtuales o bien paquetes de algunas tiendas de ropa, pastel o comida a domicilio, por la jornada nacional de sana distancia para prevenir el contagio del Covid-19.

Si bien las madres están conscientes de este festejo es distinto e inusual, pero lo que nunca cambiará es el amor por ellas.

En muchas casas, las mamás que poco saben de tecnología, tuvieron que aprender a utilizar un teléfono inteligente, la computadora o una tableta, para conectarse con sus hijos, en otros casos las llamadas telefónicas estuvieron presentes para celebrar este gran día para el pueblo de México.

Y claro, las mamás modernas y más jóvenes, no les costó ningún trabajo hacer video llamadas o video conferencia, instalarse en alguna plataforma como zoom, webex meet, Jitsi Meet.

Mis hijos ya me llamaron por teléfono, platica Dora Zárate, madre de tres hijos, dos viven en la ciudad de México y el otro en Denver, Colorado. “Uno de ellos vive conmigo, y gracias a él, me pude conectar con mi hijo que radica en Estados Unidos, mediante el Zoom, platique con él buen rato. Nos tomamos un café y pastel virtual, de la misma manera me cantó las mañanitas, me envió flores”.

Perla Monte, madre soltera y trabajadora en una oficina de gobierno narró que ella organizó una videollamada con toda la familia. “Vivo en la casa de mi mamá, -hoy estoy haciendo home Office por el confinamiento- . Encendí la computadora muy temprano para que mis hermanos se conectarán y de esta manera todos juntos festejáramos a las que madres”. A mi mamita, le dio gusto ver a todos sus hijos reunidos a través de una pantalla.

Mi madre, mis hermanas y yo, nos apapachamos mutuamente, y nuestro mayor deseo es que ya termine esta pandemia para poder reunirnos otra vez, y claro también pedimos a Dios que no, nos vayamos a contagiar, comentó Perla.

Pero también hay mamás que no pudieron celebrar el día en su casa, sino más bien trabajando. Verónica es una enfermera del IMSS, madre soltera con una hija. Ella narró que por tanto trabajo que tiene por la pandemia, no puedo festejarse ni a ella ni a su madre.

En otros años, no los daban el día. “Lo que hacía era llevar a mi mamá a desayunar y a comer y ahora con este virus, ni me acercó a ella, porque es diabética, hipertensa y tiene 78 años, es decir, está en el grupo más vulnerable y no quiero ponerla en riesgo, pese a que nosotros en el Hospital llevamos estrictas medidas de sanidad.

Es importante recordar que desde 1922, cada 10 de mayo los mexicanos rinden homenaje a sus madres. Es un día que se acostumbra a regalan flores, globos, tarjetas de felicitación que algunas veces son acompañados por serenatas de de mariachi, banda o tríos, mientras otros acuden a restaurantes o plazas y otras personas visitan en los cementerios a las que ya no están a su lado.

Pero ahora, el mejor regalo para las madres es que todos conserven la salud, y dejar para después el festejo en familia

JLP