La escasez de materias primas como papel, celulosa, cartón, aluminio y plástico en el mercado internacional ha provocado el encarecimiento de prácticamente todos los artículos escolares, con aumentos de precios que van desde 100 hasta un 300%.
Empresarios del sector papelerías manifestaron su preocupación por esta situación, que amenaza con frustrar la tan esperada recuperación económica para este sector tan golpeado por la pandemia y el cierre de escuelas.
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Se trata de aumentos nunca antes vistos, advirtieron distribuidores mayoristas de artículos escolares entrevistados por LA PRENSA, quienes explicaron que enfrentan serias dificultades no sólo para pagar los nuevos precios a los fabricantes, sino también para conseguir los productos y lograr cubrir la demanda desbordada que se registra con el inicio del ciclo escolar 2022-2023.
La tormenta perfecto
Francisco Marín, empresario mayorista del sector de papelerías recordó cuando las autoridades anunciaron el 24 de marzo de 2020 la suspensión de clases y el cierre de escuelas: “Pensamos que serían solo dos semanas, pero lo cierto es que nadie sabía exactamente qué iba a pasar y cuánto tiempo sería, y lo que ocurrió después es que se implementó una estrategia ‘con los dedos en la puerta’”.
Añadió que el programa Aprende en Casa se anunció dos semanas tarde, luego se hicieron convenios con grandes empresas digitales –“lo cual estuvo muy bien”- pero nuevamente hubo un retraso de, al menos, un mes más en la capacitación de los docentes en el manejo de esas herramientas tecnológicas.
“Ahora nos encontramos en una temporada de inicio del ciclo escolar 2022 - 2023 totalmente desbordada y con una aguda escasez de producto que, prácticamente ha triplicado los precios de todos los productos de papelería”, alertó Francisco Marín, al ejemplificar que si un paquete de papel cascarón con diez piezas el año pasado costaba 80 pesos, hoy vale 180 pesos.
“Se trata de un problema que tiene varios factores, uno de ellos, es la reducción de la producción en China, el tema de los contenedores, el calentamiento global y la reducción de materias primas, así como la falta de estímulos para productores mexicanos, lo cual ha repercutido de forma directa en los precios para distribuidores y comerciantes”, explicó.
Renata Canudas, empresaria distribuidora de artículos de papelería, indicó que un paquete de cartulina blanca con 100 piezas costaba en enero 125 pesos, pero ahora cuesta 240, es decir, casi el doble.
“Durante la pandemia no veíamos esto ni teníamos tan claros los efectos de la escasez y la inflación, porque la mayoría de los negocios estuvieron cerrados y tenían inventario de lo que no habían vendido durante dos años”, explicó.
Sin embargo, los primeros signos de escasez de productos se empezaron a registrar desde principios de este año, cuando las escuelas abrieron y los niños regresaron a clases presenciales, señaló.
“Los distribuidores empezamos a reactivar los pedidos a los proveedores y, ellos a su vez, solicitaron los productos a los fabricantes que no tenían las suficientes materias primas e insumos para trabajar, lo que provocó escasez y, por ende, la fuerte alza de precios que estamos viendo”, indicó.
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Inventario agotado
El regreso presencial a las escuelas que ocurrió a mediados del primer bimestre de 2022 no reactivó las ventas en el sector de papelerías, debido a que el ciclo escolar ya había iniciado y los padres de familia prefirieron utilizar los artículos escolares que ya tenían en casa.
“El gasto de materiales escolares no fue el mismo durante la pandemia, porque los niños utilizaron más la computadora, enviaron sus tareas en línea y sólo imprimían en hojas blancas los trabajos que eran muy necesarios”, explicó Renata Canudas.
Al respecto, Francisco Marín señaló que durante la pandemia y las clases a distancia, la demanda de materiales escolares fue diferente.
“Se usaron mucho las hojas blancas, los pizarrones, plumones para pizarrón y se incrementó el consumo de Internet, debido a que las familias tuvieron que acondicionar un salón de clases dentro de su hogar. Sin embargo, ahora, con el regreso a las escuelas, lo que estamos observando es una demanda desbordada”, indicó y explicó que la mayoría de los artículos escolares que se venden en México son de importación, debido a que la oferta nacional es muy pequeña y no hay producción doméstica de papel.
La mayoría de las familias ya agotaron el inventario de artículos escolares que tenían en casa y, además, deben cubrir la lista de útiles que les están pidiendo en las escuelas para el nuevo ciclo escolar, pero en el mercado no hay suficientes productos y lo poco que hay es a precios muy altos, añadió Marín.
Los empresarios del sector papelerías mencionaron que la escasez de productos no solo se registra en el caso del papel, sino también, en otros artículos, como: lápices, plumas, gomas, plumones, crayolas, juegos de geometría, sacapuntas, cuadernos de dibujo, e, incluso, formatos de recibos, solicitudes de empleo y otros que se utilizan en la práctica contable.
También mencionaron la escasez de plásticos cristal y contact, que se utiliza para forrar los libros y cuadernos, así como de papel china, ilustración, cascarón y todo tipo de cartón, que no solo se utiliza como materia prima para la fabricación de cuadernos, sino también para cajas de almacenamiento y embalaje de los mismos productos.
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Poco y caro
Empresarios del sector mayorista de papelería informaron que el paquete con 77 piezas de lápices que antes del inicio de la pandemia costaba 160 pesos, ahora se vende en 230, es decir, casi 100 pesos más.
“No habíamos hecho pedidos de lápices y otros productos, porque la pandemia inició en marzo de 2020 y en esas fechas ya teníamos mucho inventario para la temporada escolar 2020-2021, que pensábamos iba a ser tan normal como la de años anteriores.
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