Las ruinas del tramo elevado que cayó el 3 de mayo en Tláhuac continúan obstruyendo el paso de los vehículos en la transitada vialidad, mientras las miradas curiosas no dejan de voltear a mirar el trabajo de los equipos encargados del peritaje del Metro, del que ya se sabe, costará alrededor de 20 millones de pesos.

Sobre el concreto de la estructura caída y con maquinaria y herramientas, el personal de la Fiscalía General de Justicia (FGJ) de la Ciudad de México, así como de la empresa noruega Det Norske Veritas (DNV), trabajan en conjunto con servidores del Sistema de Transporte Colectivo (STC) Metro, para obtener muestras que les permitan analizar las condiciones del tramo afectado por el que perdieron la vida 26 personas.

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Personal de la Coordinación de Investigación Forense y Servicios Periciales de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJCDMX) inició la toma de muestras de concreto, con el propósito enviarlas a laboratorio y realizar estudios especializados, como Rayos X y Ultrasonido, a fin de realizar los dictámenes correspondientes.

En materia documental, se lleva a cabo la revisión de expedientes relacionados con la Línea 12 del Metro, tanto en su parte administrativa y de proyectos, como la constructiva.

Casi en su totalidad, ya fue removido el balastro en los alrededores de la zona cero, lo que permitirá, mediante un proceso de secado en horno, conocer el peso de la gravilla, que se encontraba sobre las vías que colapsaron, y con ello, complementar poco a poco el peritaje que dé a conocer las causas del accidente, además, de las fallas y reportes denunciados por los ciudadanos y usuarios.

Los expertos, por ahora se concentran en el bloque de concreto entre el que, aún, se encuentra un vehículo comprimido desde el día del incidente, que dejó cerca de 80 heridos, algunos de ellos, todavía hospitalizados y con diagnósticos desalentadores.

A la pesada trabe, que permitía el paso del gigante de acero, le extraen material del interior para conocer el estado del mismo, textura, grosor y peso, elementos que forman parte de la evaluación del accidente que, hasta el momento, no ha determinado la responsable en ningún funcionario y por el que, se ha pedido la destitución de la directora del Metro, Florencia Serranía.

Sobre avenida Tláhuac, en las cercanías de la zona del desastre, ya se observa el balizamiento que indica el paso del Metrobús, incluso, ya se ven con pasaje algunas unidades circulando por la vía, lo que genera incógnitas entre los habitantes del perímetro, así como de los usuarios de la Línea 12, quienes han utilizado en días anteriores, camiones de RTP para llegar a sus destinos.

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Los diversos equipos, laboran en distintos frentes para avanzar en la recolección de nuestras y despeje del área afectada, mientras policías y personal de Protección Civil, también contribuyen en el lugar para evitar accidentes y controlar la vialidad.

Los grupos de ayuda no se han hecho esperar, a medio día, integrantes de Volunteer Gapinc se acercaron a repartir alimentos a los trabajadores, donde entregaron sandwiches, agua y jugos, en solidaridad a qué varios de sus compañeros, trabajan cerca de la Zona Cero y en apoyo a la gente que cumple jornadas largas, mientras concluyen los trabajos de la valoración del Metro.

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