Al menos el 30% de los cerca de 5 millones de vehículos que se han comercializado en el país en los últimos cinco años son de baja seguridad y representan un riesgo no solo para sus ocupantes, sino también para los usuarios más vulnerables de la vía, como son los peatones.
En las últimas dos décadas el parque vehicular de la Zona Metropolitana del Valle de México (ZMVM) se ha multiplicado por siete, pasando de 850,000 vehículos en 1997 a 5.7 millones en 2016, de los cuales 3, 369,384 vehículos (58.7%) están registrados en la CDMX y 2, 232,423 (40.4%) en el Estado de México, en tanto que 50,345 (0.9%) pertenecen al municipio de Tizayuca, Hidalgo, según datos abiertos de la Secretaría de Movilidad del gobierno de la Ciudad de México.
Activistas y representantes de organizaciones civiles que trabajan en favor de la movilidad segura advierten que a nivel nacional, cada año se pierden 16 mil vidas a causa de los accidentes y de las 134 mil personas que resultan lesionadas, al menos, 40 mil quedan con alguna discapacidad permanente.
En el caso de la Ciudad de México, datos de la Secretaría de Movilidad señalan que en 2019 ocurrieron 10, 668 hechos de tránsito, con un saldo de 372 fallecimientos, por lo que los accidentes (en todas sus modalidades) constituyen la novena causa de muerte en la población capitalina.
Stephan Brodziak, coordinador de la campaña de Seguridad Vehicular de El Poder del Consumidor; Sajidh de la Cruz, director de proyecto de Seguridad Vehicular de Refleacciona con Responsabilidad y Alejandra Leal, co-directora de Céntrico e integrante de la coordinación de la Coalición Movilidad Segura, señalaron que apenas el 25 o 30% del parque vehicular cumple con los estándares de seguridad recomendados por la OMS.
Stephan Brodziak señaló que en México cerca de 1.7 millones de vehículos no cumplen con los estándares de seguridad mínimos.
“Si tomamos en cuenta que cada año se adquieren en promedio un millón de vehículos, estamos hablando que de los poco más de 5 millones de autos que se han comercializado en el país en los últimos cinco años, al menos el 30% son de baja seguridad y representan un riesgo para los ocupantes y ya no se diga para los usuarios más vulnerables de la vía, como son los peatones”, indicó Stephan Brodziak.
Los activistas señalaron que incorporar las medidas mínimas de seguridad, recomendadas por la Organización Mundial de la Salud (OMS), podría evitar cada año, entre 5,600 y 5,800 muertes; es decir, uno de cada 3 fallecimientos que ocurren por esta causa.
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Al presentar el documento “Salvando vidas con autos más seguros: Justificación técnico económica para la implementación de los sistemas de seguridad vehicular en México”, los activistas destacaron que la incorporación de medidas de seguridad por unidad tiene un costo promedio de 15 mil pesos; lo que resulta un costo-beneficio muy importante.
“Estamos solicitando a la industria automotriz algo que está probado en otros países que funcionan, que salva vidas y evita lesiones, y estamos solicitando esa obligatoriedad también en México, porque no tenemos porqué vivir estas tragedias en las calles por capricho de la industria”, señaló Stephan.
Al demandar mejores estándares en la actualización del Proyecto de Norma Oficial Mexicana PROY-NOM-194-SCFI-2021 que regula los sistemas de seguridad en los autos nuevos y que actualmente se encuentra en proceso de consulta pública, los especialistas en movilidad segura informaron que los siniestros viales tienen un costo anual estimado de entre 174 mil millones y 204 mil millones de pesos, según datos del Instituto Mexicano de la Competitividad (IMCO).
Las organizaciones señalaron que la propuesta de actualización de la NOM-194 de incluir como obligatorio: Control de Estabilidad Electrónico (ESC). Después del cinturón de seguridad de 3 puntos, es la segunda tecnología que más salva vidas en el mundo, y en México podría salvar la de 3,632 personas anualmente.
Así como el Anclajes ISOFIX/Latch que ayuda a instalar correctamente las sillas infantiles, esto se traduce en reducir la mortalidad de niñas y niños en aproximadamente el 75% en edades de hasta dos años y en torno al 60% de tres o cuatro años.
Cumplimiento con la prueba lateral de poste. Al incluir una estructura reforzada del habitáculo junto con diversos tipos de bolsas de aire, aspectos necesarios para cumplir con esta prueba, se obtienen reducciones de mortalidad estadísticamente significativas.
Aunado a estos sistemas las organizaciones señalaron que es fundamental que se incluyan como obligatorias las siguientes tecnologías que están enfocadas en proteger a los usuarios vulnerables de la vía: Protección a peatones. Su inclusión es fundamental, y su cumplimento debe ser obligatorio, ya que, ayudaría a salvar vidas y evitar lesiones graves a peatones y a otros usuarios vulnerables de la vía: ciclistas y motociclistas, quienes en total conforman el 65% de las víctimas mortales de hechos viales en México. Con dicho estándar, se podrían salvar anualmente en México entre 1,296 y 1,782 vidas.
Frenado Autónomo de Emergencia. Su implementación en la NOM, de forma conjunta con el Estándar de Protección a Peatones permitiría salvar en México en 10 años, la vida de 3 mil 187 peatones y 222 ciclistas.
Sistema de información a los consumidores. La propuesta en este sentido, es informar a los consumidores sobre los resultados de estrellas de la calificación de una prueba de desempeño de seguridad para los modelos probados por Latin NCAP y que aplique a los modelos de venta en México, ya que con ello se reduciría el riesgo de lesiones serias y fatales a través de informar adecuadamente a los consumidores.
Además es importante señalar que el cumplimiento de todos estos sistemas se sugiere que se lleve a cabo en un plazo de implementación que cubra a partir de los vehículos año modelo 2023.
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