Rodeado de un paisaje boscoso y entre calles empedradas se ubica el pueblo mágico de Malinalco, comunidad mexiquense ubicada al sur de la entidad donde se encuentran vestigios que ayudan a comprenderme la vida antes y después de la conquista.
A 140 metros sobre el nivel del mar se levanta el "Cuauhacalli", un centro ceremonial al que acudían los guerreros aztecas para realizar sus ritos de iniciación. Desde la altura de esta pirámide se tiene una perspectiva única, donde los caminos llevan hacia el Convento de los Agustinos cuya construcción data del Siglo XVI, y en sus muros plasma pinturas que se usaron para la adopción de la nueva religión. A tan solo unos pasos se encuentra el Museo Universitario Dr. Luis Mario Schneider, que en sus salas se da explicación a los encuentros culturales que se han gestado en la localidad.