Para terminar con los aserraderos clandestinos que están devastando bosques y acabando con los pulmones que existen en el municipio de Isidro Favela y localidades circunvecinas, en el Estado de México, elementos de la Guardia Nacional, de la Secretaría de Seguridad y de la Policía Municipal han desarrollado una serie de operativos en esta zona para ubicar y detener a todos los sujetos que se dedican a esta ilícita actividad.
Tal es el caso registrado recientemente, cuando un convoy de elementos policíacos de dichas corporaciones, bajaba sobre la carretera Naucalpan-Ixtlahuaca, luego de que haber realizado un operativo contra la tala clandestina, cuando se encontraron con varios sujetos que viajaban en una camioneta pick up, una blazer y un auto compacto, mismos que sorpresivamente atacaron a tiros a los elementos policíacos.
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En respuesta a la agresión, los uniformados respondieron, por lo que en ese momento se inició un enfrentamiento a balazos con dichos sujetos que evidentemente con esa acción trataron de intimidar a los policías para que se retiraran del lugar y se abstuvieran de realizar dichos operativos, que por lo que se pudo ver, “afectaban su fuente de ingresos”.
Durante el enfrentamiento, tres jóvenes, todos ellos primos, de entre 20 y 14 años, que viajaban en una camioneta resultaron lesionados, por lo que fueron trasladados a un hospital, a fin de que recibieran la atención médica necesaria.
En el momento, dichos sujetos aseguraron que eran inocentes, que no formaban parte de ningún grupo delictivo dedicado a la tala clandestina y que resultaron lesionados, al ser alcanzados por las balas perdidas que dispararon elementos de la Guardia Nacional durante el tiroteo, acusándolos de abuso de autoridad.
Incluso, familiares de los tres jóvenes, de inmediato se pronunciaron y exigieron justicia para que los elementos de la Guardia Nacional fueran castigados, ya que reiteraron que actuaron con abuso de autoridad y sin medir las consecuencias.
Sin embargo, después de que los tres jóvenes fueron ingresados a un hospital y tras de que se iniciaron las primeras investigaciones, se descubrió por medio de fotografías y videos que si eran tala-montes y que formaban parte de un grupo de aserraderos clandestinos que operan en los municipios de Santa Ana Jilotzingo, Isidro Favela, Mazatla y otras zonas, donde con sus actividades ilícitas han devastado infinidad de bosques en perjuicio de la población del Estado de México, que cada vez cuenta con menos pulmones de aire puro.
Autoridades policíacas dieron a conocer que en dichos videos y fotografías se observa a estos jóvenes posando cínicamente en medio de varios de los troncos que se encontraban almacenados y que fueron cortados de manera ilegal de los bosques.
Las mismas autoridades policiacas informaron que de acuerdo a las mismas investigaciones que se realizaron, en el municipio de Santa Ana Jilotzingo, en el paraje conocido como la Capilla, existen cuatro aserraderos clandestinos, considerados de los más grandes en el Estado de México, donde son almacenados cientos de troncos que fueron cortados de manera ilegal de los bosques de la zona y que están listos para ser comercializados por integrantes de estos grupos delictivos que han hecho de esta ilícita actividad un negocio redondo que les ha dado a ganar millones de pesos.
Señalaron que para actuar libremente sin ser molestados y evadir la acción de la justicia, estos grupos delincuenciales utilizan camionetas y autos particulares que van por delante y como muro de los camiones que transportan los troncos para detectar y alertar sobre los filtros carreteros que se realizan en la zona, a fin de desviarse del camino y evitar que sean detenidos y la mercancía decomisada.
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