/ miércoles 2 de septiembre de 2020

Dueños de salones de fiestas de la CDMX, lanza a jefa de gobierno SOS para que puedan abrir sus negocios

De administrar, organizar y amenizar salón de fiestas está en el dilema de migrar a amenizar celebraciones virtuales

Ciudad de México.- Dueños de salones de fiestas en la ciudad de México piden a la jefa de gobierno Claudia Sheinbaum “voltear sus ojos a estos negocios que generan empleo a decenas de familias. Y sus propietarios también tienen que comer.

Son más de 5 meses de permanecer cerrados, muchos están en quiebra y con enormes deudas en los servicios de luz, agua, predio, rentas, salarios y con deudas a los clientes que adelantaron pagos para sus eventos sociales.

Como son catalogados como no esenciales, no les dan luz verde para reabrir. Pero están en estado de inanición por ello lanzan un SOS de emergencia. “Nos urge regresar al trabajar”.

¡Por Dios!, Seguimos a la espera de las indicaciones de la jefa de gobierno Claudia Sheinbaum para que les permitan trabajar. Así lo exclamó Claudia Sánchez, una microempresaria dueña de un sitio de eventos sociales.

Ahora, espera con ansia el cambio de semáforo a verde para que las autoridades de la ciudad de México le permitan abrir su negocio: los salones de fiestas Algarabía, ubicado en la calle Miguel Jacintes 68 en la colonia Moctezuma 1 Sección, alcaldía Venustiano Carranza, donde hay varios negocios de ese tipo.

En una entrevista con LA PRENSA dijo estar desesperada. El salón ya se comió todos los anticipos en las rentas, pero el casero se ha visto muy considerado y les está cobrado menos de la mitad pero se debe pagar los servicios.

Desde el pasado 28 de marzo cerró sus puertas Salones de Fiestas Algarabías. De esa fecha, 50 eventos sociales están pendientes, así como 37 graduaciones. Además, de la de ella, 7 familias más comen y viven del negocio.

Sánchez tiene una fila de fiestas pendientes y clientes que varios casos ya habían adelantado 10, 20 50 por ciento del costo; ella aplica un sistema de apartado, que consiste en dejar una parte del costo total. Otros ya habían liquidado su evento social, ya sea bautizo, tres años, XV años, cumpleaños, bodas, despedidas de soltera (o), graduaciones.

Triste, platica que su salón cuenta con mucho cariño de parte de los anfitriones. “Ellos han decidió cancelar las fechas, pero se corre el riesgo de que muchos ya no regresen, el sistema de apartado de fiestas es dejar una parte del costo, algunos ya habían liquidado sus eventos, esperan la luz verde.

Una de las políticas que aplicó el salón es mover las fechas hacia otros meses. “No fueron los clientes ni nosotros quienes cerraron el salón, sino la pandemia por el Covid-19”. Dos clientes le han cancelado fiestas, comenta.

Sergio Vázquez | La Prensa

Al cerrar su negocio tuvo que vender productos sanitizantes

Describió que al ver que se cerraban su salón, por las medidas sanitarias ante la pandemia del Covid-19, no tener ingresos, ver como seguían los gastos diarios y las colegiaturas de sus hijos, buscó otra alternativa para sobrevivir. Cambio de giro a una comercializadora de artículos sanitizantes.

El pretexto fue que su hija que estudia medicina le pidió que le consiguiera tapabocas, “porque en el hospital no nos van a dar ese material… “necesito me consigas el cubre bocas N95… no lo encontraba y comencé a meterme de lleno a ese negocio.

En Infra consiguió una caja, lo presentó en Facebook, al anunciar la venta de los cubrebocas en un menos de 6 minutos ya había vendido la caja… luego e comenzaron a pedir, 300, 500 y más.

“De pronto pasé de organizar, amenizar y administrar un salón de fiestas a vender productos sanitizantes: cubrebocas, gel antibacterial, pistolas sanitizantes, aerosoles”, señaló esta microempresaria capitalina.

Ha sido una etapa de mucho aprendizaje y conocer gente que nunca imaginé. Ahora me ve convertido en una especie de comercializadora, donde me hablan y les piden toallas y pistolas sanitizantes, overoles, cubrebocas, tapetes.

Si bien no han sido ganancias extraordinarias, pero gracias a este negocio no ha faltado nada en casa, sin pagar servicios. “Creo que voy a seguir con el negocio, ya va a ser difícil soltarlo. Esto de la pandemia llegó para quedarse.

Relató que el negocio lo hace por las redes sociales. Es una actividad de muchas mujeres, que se dan trabajo unas a otras y forman parte de grupos de emprendedores y se comunican a través del WhatsApp.

Migrar a fiestas virtuales

Claudia trabaja desde hace 9 años en el salón de fiestas. Tiene una carrera trunca en el área de administración. Pero ahora se encuentra en el dilema de migrar a amenizar fiestas infantiles a través de la computadora, lo cual ya le pidieron por el confinamiento. Pero, se resiste, pues considera que empezar hacer fiestas virtuales, cavaría la tumba de los salones de fiestas.

Narró que en días pasados le pidieron una fiesta hibrida… a lo que ella preguntó ¿qué es eso? …Pues le dijeron una fiesta por medio de la computadora… una fiesta virtual. Animas como lo haces en tu salón, pero ahora frente a una computadora.

Nosotros te llevamos, dijo la solicitante, un pastel, piñata, juegos. Ya lo están haciendo en redes. A lo que Claudia agregó: “me están invitando a hacer algo que va a matar mi negocio. “Me estás pidiendo que yo ofrezca algo diferente a lo que yo vivo… no puedo, pero todos nos debemos actualizar.

Sergio Vázquez | La Prensa

Con lágrimas en los ojos, esta empresaria de 48 años, manifestó que ya dejó de pagar la luz y el agua. Por cierto, dice sorprendida: ¡“me llegó un recibo de mil pesos, pese a que el salón está cerrado desde marzo…no es posible”!

En la circular 001, la Dirección General de Gobierno y Asuntos Jurídicos, de la Jefatura de Unidad Departamental de Licencias de giros mercantiles y espectáculos públicos de la alcaldía Venustiano Carranza se le informa sobre lo letal del Coronavirus y las medidas sanitarias que debe aplicar. Ese fue el único documento.

Se le informó que si no la acataban se podían hacer acreedores a una especie de multa. Se le invitó a ya no abrir para evitar contagios. “Cuando trajeron la circular... ¿me puse a llorar, me dijeron ya cierre…?

Gremio poco unido y sin registro nacional

Como salones de fiesta los busca personal de la Cámara Nacional de la Industria de Transformación - Sede Nacional (Canacintra). Les dicen que están registrados con ellos. Les venden una calcomanía en 400 pesos y dicen que están en un censo, pero nunca reciben información. “Pegan una etiqueta y no los vuelven a ver hasta el otro año”.

No conoce si existe alguna asociación de salones de fiestas. Una vez le llegó una carta para firmar a través de google. Y en eso se ha quedado.

Este diario solicitó informes a la Canacintra, pero el área de Comunión Social dijo que no llevan el registro de ese tipo de negocios. Por lo que me mandaron al área de licencias y giros mercantiles de la alcaldía Venustiano Carranza, ahí se pidió información y seguimos en espera.

La microempresaria no tiene idea de cuantos salones hay en la ciudad de México. Es negocio muy celoso de no compartir. Pero en la calle de Miguel Jacintes y otras cercanas hay como 6.

“En esta calle hay dos salones enfrente otro pasando Zaragoza, entre Balbuena y Moctezuma debe haber más 60 salones de fiestas infantiles, muchos esta calle son 4, y pasando el eje, son 5. En esa calle son 6 salones.

La Romero Rubio también se está llenando de salones, pero no están organizados. La gente hace muchas fiestas.

Futuro incierto… qué sigue

Con lágrimas en los ojos afirma: “creo que va a ser muy complicado pensar que sigue… no se va a mejorar la situación económica en mucho tiempo y si no avanza, la gente va a dejar de hacer fiestas, no es prioritario…

Sergio Vázquez | La Prensa

“No es un artículo de primera necesidad y en tiempos de crisis una fiesta es un lujo”.

El drama en su hogar no es sólo de ella. Su esposo ha estado igual en "stand by" laboral, ya que tiene dos barberías, una que está Mixcoac y otra en Circuito Interior, que están cerradas. A él no le fue muy mal no le condonaron las rentas.

En la reapertura, va a tener que mover sus políticas de precios, de atención y todo lo que sea necesario para que se adapten a lo nueva normalidad.

Por lo pronto, cinco de sus clientes que laboran en el sector salud ya cambiaron fechas para el 2021, marzo, junio, ya que la pandemia va para largo.

Inclusive, otros clientes han pedido fiestas a puerta cerrada. A lo cual no ha accedido, pues si surge un brote y si hicieran una ruta y lo relacionan con el salón sería un cargo de conciencia que no se quiere tener.

PARA CUADRO

Entre las colonias Moctezuma y Balbuena hay cerca de 60 salones de fiestas y se están expendiendo a la Romero Rubio.

En junio y julio normalmente realiza 37 graduaciones.

En 4 meses dejó de hacer 50 eventos sociales.

Ciudad de México.- Dueños de salones de fiestas en la ciudad de México piden a la jefa de gobierno Claudia Sheinbaum “voltear sus ojos a estos negocios que generan empleo a decenas de familias. Y sus propietarios también tienen que comer.

Son más de 5 meses de permanecer cerrados, muchos están en quiebra y con enormes deudas en los servicios de luz, agua, predio, rentas, salarios y con deudas a los clientes que adelantaron pagos para sus eventos sociales.

Como son catalogados como no esenciales, no les dan luz verde para reabrir. Pero están en estado de inanición por ello lanzan un SOS de emergencia. “Nos urge regresar al trabajar”.

¡Por Dios!, Seguimos a la espera de las indicaciones de la jefa de gobierno Claudia Sheinbaum para que les permitan trabajar. Así lo exclamó Claudia Sánchez, una microempresaria dueña de un sitio de eventos sociales.

Ahora, espera con ansia el cambio de semáforo a verde para que las autoridades de la ciudad de México le permitan abrir su negocio: los salones de fiestas Algarabía, ubicado en la calle Miguel Jacintes 68 en la colonia Moctezuma 1 Sección, alcaldía Venustiano Carranza, donde hay varios negocios de ese tipo.

En una entrevista con LA PRENSA dijo estar desesperada. El salón ya se comió todos los anticipos en las rentas, pero el casero se ha visto muy considerado y les está cobrado menos de la mitad pero se debe pagar los servicios.

Desde el pasado 28 de marzo cerró sus puertas Salones de Fiestas Algarabías. De esa fecha, 50 eventos sociales están pendientes, así como 37 graduaciones. Además, de la de ella, 7 familias más comen y viven del negocio.

Sánchez tiene una fila de fiestas pendientes y clientes que varios casos ya habían adelantado 10, 20 50 por ciento del costo; ella aplica un sistema de apartado, que consiste en dejar una parte del costo total. Otros ya habían liquidado su evento social, ya sea bautizo, tres años, XV años, cumpleaños, bodas, despedidas de soltera (o), graduaciones.

Triste, platica que su salón cuenta con mucho cariño de parte de los anfitriones. “Ellos han decidió cancelar las fechas, pero se corre el riesgo de que muchos ya no regresen, el sistema de apartado de fiestas es dejar una parte del costo, algunos ya habían liquidado sus eventos, esperan la luz verde.

Una de las políticas que aplicó el salón es mover las fechas hacia otros meses. “No fueron los clientes ni nosotros quienes cerraron el salón, sino la pandemia por el Covid-19”. Dos clientes le han cancelado fiestas, comenta.

Sergio Vázquez | La Prensa

Al cerrar su negocio tuvo que vender productos sanitizantes

Describió que al ver que se cerraban su salón, por las medidas sanitarias ante la pandemia del Covid-19, no tener ingresos, ver como seguían los gastos diarios y las colegiaturas de sus hijos, buscó otra alternativa para sobrevivir. Cambio de giro a una comercializadora de artículos sanitizantes.

El pretexto fue que su hija que estudia medicina le pidió que le consiguiera tapabocas, “porque en el hospital no nos van a dar ese material… “necesito me consigas el cubre bocas N95… no lo encontraba y comencé a meterme de lleno a ese negocio.

En Infra consiguió una caja, lo presentó en Facebook, al anunciar la venta de los cubrebocas en un menos de 6 minutos ya había vendido la caja… luego e comenzaron a pedir, 300, 500 y más.

“De pronto pasé de organizar, amenizar y administrar un salón de fiestas a vender productos sanitizantes: cubrebocas, gel antibacterial, pistolas sanitizantes, aerosoles”, señaló esta microempresaria capitalina.

Ha sido una etapa de mucho aprendizaje y conocer gente que nunca imaginé. Ahora me ve convertido en una especie de comercializadora, donde me hablan y les piden toallas y pistolas sanitizantes, overoles, cubrebocas, tapetes.

Si bien no han sido ganancias extraordinarias, pero gracias a este negocio no ha faltado nada en casa, sin pagar servicios. “Creo que voy a seguir con el negocio, ya va a ser difícil soltarlo. Esto de la pandemia llegó para quedarse.

Relató que el negocio lo hace por las redes sociales. Es una actividad de muchas mujeres, que se dan trabajo unas a otras y forman parte de grupos de emprendedores y se comunican a través del WhatsApp.

Migrar a fiestas virtuales

Claudia trabaja desde hace 9 años en el salón de fiestas. Tiene una carrera trunca en el área de administración. Pero ahora se encuentra en el dilema de migrar a amenizar fiestas infantiles a través de la computadora, lo cual ya le pidieron por el confinamiento. Pero, se resiste, pues considera que empezar hacer fiestas virtuales, cavaría la tumba de los salones de fiestas.

Narró que en días pasados le pidieron una fiesta hibrida… a lo que ella preguntó ¿qué es eso? …Pues le dijeron una fiesta por medio de la computadora… una fiesta virtual. Animas como lo haces en tu salón, pero ahora frente a una computadora.

Nosotros te llevamos, dijo la solicitante, un pastel, piñata, juegos. Ya lo están haciendo en redes. A lo que Claudia agregó: “me están invitando a hacer algo que va a matar mi negocio. “Me estás pidiendo que yo ofrezca algo diferente a lo que yo vivo… no puedo, pero todos nos debemos actualizar.

Sergio Vázquez | La Prensa

Con lágrimas en los ojos, esta empresaria de 48 años, manifestó que ya dejó de pagar la luz y el agua. Por cierto, dice sorprendida: ¡“me llegó un recibo de mil pesos, pese a que el salón está cerrado desde marzo…no es posible”!

En la circular 001, la Dirección General de Gobierno y Asuntos Jurídicos, de la Jefatura de Unidad Departamental de Licencias de giros mercantiles y espectáculos públicos de la alcaldía Venustiano Carranza se le informa sobre lo letal del Coronavirus y las medidas sanitarias que debe aplicar. Ese fue el único documento.

Se le informó que si no la acataban se podían hacer acreedores a una especie de multa. Se le invitó a ya no abrir para evitar contagios. “Cuando trajeron la circular... ¿me puse a llorar, me dijeron ya cierre…?

Gremio poco unido y sin registro nacional

Como salones de fiesta los busca personal de la Cámara Nacional de la Industria de Transformación - Sede Nacional (Canacintra). Les dicen que están registrados con ellos. Les venden una calcomanía en 400 pesos y dicen que están en un censo, pero nunca reciben información. “Pegan una etiqueta y no los vuelven a ver hasta el otro año”.

No conoce si existe alguna asociación de salones de fiestas. Una vez le llegó una carta para firmar a través de google. Y en eso se ha quedado.

Este diario solicitó informes a la Canacintra, pero el área de Comunión Social dijo que no llevan el registro de ese tipo de negocios. Por lo que me mandaron al área de licencias y giros mercantiles de la alcaldía Venustiano Carranza, ahí se pidió información y seguimos en espera.

La microempresaria no tiene idea de cuantos salones hay en la ciudad de México. Es negocio muy celoso de no compartir. Pero en la calle de Miguel Jacintes y otras cercanas hay como 6.

“En esta calle hay dos salones enfrente otro pasando Zaragoza, entre Balbuena y Moctezuma debe haber más 60 salones de fiestas infantiles, muchos esta calle son 4, y pasando el eje, son 5. En esa calle son 6 salones.

La Romero Rubio también se está llenando de salones, pero no están organizados. La gente hace muchas fiestas.

Futuro incierto… qué sigue

Con lágrimas en los ojos afirma: “creo que va a ser muy complicado pensar que sigue… no se va a mejorar la situación económica en mucho tiempo y si no avanza, la gente va a dejar de hacer fiestas, no es prioritario…

Sergio Vázquez | La Prensa

“No es un artículo de primera necesidad y en tiempos de crisis una fiesta es un lujo”.

El drama en su hogar no es sólo de ella. Su esposo ha estado igual en "stand by" laboral, ya que tiene dos barberías, una que está Mixcoac y otra en Circuito Interior, que están cerradas. A él no le fue muy mal no le condonaron las rentas.

En la reapertura, va a tener que mover sus políticas de precios, de atención y todo lo que sea necesario para que se adapten a lo nueva normalidad.

Por lo pronto, cinco de sus clientes que laboran en el sector salud ya cambiaron fechas para el 2021, marzo, junio, ya que la pandemia va para largo.

Inclusive, otros clientes han pedido fiestas a puerta cerrada. A lo cual no ha accedido, pues si surge un brote y si hicieran una ruta y lo relacionan con el salón sería un cargo de conciencia que no se quiere tener.

PARA CUADRO

Entre las colonias Moctezuma y Balbuena hay cerca de 60 salones de fiestas y se están expendiendo a la Romero Rubio.

En junio y julio normalmente realiza 37 graduaciones.

En 4 meses dejó de hacer 50 eventos sociales.

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