A pesar de las medidas de austeridad que anunció hace una semana el presidente de la Junta de Coordinación Política del Congreso del Estado de México, Maurilio Hernández González, en las que dio a conocer restricciones hasta en los dispensadores de café, diputados locales se subieron el sueldo en un 37 por ciento.
De acuerdo con el portal de transparencia, los legisladores mexiquenses, quienes se han pronunciado contra el derroche de recursos públicos, ahora tendrán mejores remuneraciones en medio de la crisis que golpea al grueso de la población, entre otros factores, por la pandemia.
Las remuneraciones de los 75 representantes populares pasaron de 108 mil 937 pesos a 149 mil 684 pesos brutos; en tanto que su sueldo neto pasó de 73 mil 159 a 99 mil 965 pesos al mes, montos que fueron confirmados por el propio presidente de la Junta de Coordinación Política en la Cámara de Diputados, quien una semana antes implementó medidas para lograr ahorros en el recinto legislativo.
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Abordado por medios de información luego de la sesión legislativa, el dirigente cameral manifestó que el incremento salarial fue un acuerdo entre los coordinadores parlamentarios, a pesar de que algunos legisladores, entre ellos los del PRI, negaron que se hayan autorizado mejores remuneraciones.
Maurilio Hernández González dijo que este incremento de percepciones será el único en los tres años que durará la actual Legislatura. Indicó que ciertamente el año pasado había habido un pronunciamiento para no subir los sueldos de los diputados, pero que de última hora se determinó que siempre sí.
“Fue una decisión correcta, estamos dentro del parámetro justo de un servidor público del nivel de la responsabilidad que tienen los diputados”, declaró el también coordinador de la bancada de Morena, la que más se ha opuesto en el discurso al despilfarro de dineros públicos.
Apenas el 22 de febrero pasado, el propio presidente de la Junta de Coordinación Política anunció medidas de austeridad, con el fin de optimizar gastos y generar ahorros, a pesar de que la Cámara de Diputados cuenta con un presupuesto de mil 611 millones de pesos para este año.
La determinación del dirigente cameral incluyó, entre otras restricciones, prohibir la entrega de café en eventos encaminados a profesionalizar a los servidores públicos del Poder Legislativo.
A través de una circular, aseveró que el programa de austeridad pretendía evitar el derroche mediante la cancelación de fiestas, festejos y eventos, salvo aquellas con fines educativos.
Aseveró que se disminuiría el consumo de materiales, útiles y enseres de oficina, se aprovecharía al máximo el papel y bajarían las impresiones y reproducciones.
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Maurilio Hernández González también determinó congelar las plazas vacantes que existen en el Congreso estatal. Ese día se dio a conocer que tampoco se suplirían las licencias, ni contratar personal, excepto en las áreas de seguridad, servicio médico o de jardín de niños, no habrá gastos de representación y se daría prioridad a los medios electrónicos para la transferencia de archivos y documentos.
Pidió que todo el personal que labore en el Poder Legislativo, al término de sus actividades apagaran las luces de las oficinas y el personal de seguridad verificará que nadie deje encendidas lámparas y focos.
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