Hoy, 13 de enero se conmemora el Día de la Lucha Contra la Depresión, y una de las secuelas que dejó la pandemia de Covid-19 fue daños emocionales en miles de mexicanos, quienes muchos de ellos sufrieron pérdidas de seres queridos en distintos contextos, lo que elevó a más del doble los casos de depresión en el país.
Antes de la pandemia 1.6 millones de personas padecían depresión y tras ella, al finalizar el año 2023 de acuerdo con un estudio de la Secretaría de Salud, hoy son más de 3.6 millones de adultos los que la padecen, y muchos de ellos ni lo saben y varios más no reciben un tratamiento.
Otros padecimientos mentales
No obstante, hay otros padecimientos que también aumentaron como la ansiedad, la angustia, el estrés, los trastornos del sueño y los alimenticios. El encierro, el miedo a contagiarse, la violencia doméstica y la pérdida de seres queridos fueron en general los aspectos que detonaron el crecimiento de padecimientos en los adultos, sin embargo, esto no excluye a los niños y menos a los adolescentes.
- También puedes leer: Requiere CDMX agenda de salud para identificar jóvenes suicidas
La situación de los niños
Las niñas y los niños por ejemplo, se vieron sometidos a estrés, angustia y depresión ante el encierro por la pandemia, ya que estuvieron expuestos a violencia doméstica por parte de sus padres, a la pérdida de seres queridos como abuelos, hermanos y papás, lo que los llevó a no solo padecer aislamiento, a pesar de estar “conviviendo” con su familia en casa, sino a refugiarse en las redes sociales y el internet, donde también fueron expuestos a distintas formas de violencia.
Los adolescentes y las redes sociales
En el caso de los y las adolescentes, al pasar la pandemia no solo viven los problemas de la vida real, sino que muchos de ellos se han vuelto esclavos de las redes sociales y la internet, un poco orillados por la emergencia sanitaria, y hoy en día, miles de ellos padecen una grave adicción a las redes, donde están expuestos a un sinfín de situaciones y violencia.
“Además de que en ellas, se crea una competencia muy desleal, porque para obtener los dichosos ‘Likes’, los chicos son capaces de hacer cualquier cosa, aunque pongan en riesgo su vida”, señala la especialista.
En el caso de las jovencitas, indica Cruz Díaz, “ellas son más susceptibles, porque con tal de conseguir ‘Likes’, las chicas sufren en relación con la aceptación de otras adolescentes, porque a ellas no les interesa verse bien para los chicos, sino para las chicas, por ello utilizan filtros y se sacan un millón de fotos, porque no se agradan y comienzan a padecer ansiedad, estrés, angustia y hasta depresión en los casos más extremos”.
“Es decir, los adolescentes están pasando entre 8 y 10 horas en las redes sociales, lo cual nos habla de una clara adicción, la cual, al estar expuestos a un sinfín de situaciones en ellas, comienzan a ser afectados por la ansiedad, angustia, estrés y depresión, y se han dado casos hasta de suicidio”.
Lo peor de todo, afirma la psicóloga, “es que muchos de los jóvenes no están recibiendo un tratamiento y ni siquiera saben que lo tienen. Por otra parte, los papás tampoco están poniendo mucha atención en el tema, resultado de la poca atención que les ofrecen a sus hijos”.
El caso de los adultos mayores
En lo que respecta a los adultos mayores, la especialista indica que muchos de ellos han caído en depresión por el abandono de sus familiares, el maltrato que muchos de ellos sufren a diario en sus hogares, además de lo que merma su salud si es que padecen alguna enfermedad crónica.
“Muchos de ellos también perdieron seres queridos en la pandemia, ya sea nietos, pareja, hijos, amigos, varios de ellos también enfermaron de Covid y eso mermó su salud física y mental”, precisa Cruz Díaz.
Así que todas los sectores de la sociedad se vieron afectados tras la pandemia y muchos de ellos, viven en depresión y no lo saben, otros no lo aceptan y la mayoría de ellos, no reciben un tratamiento para atenderse, lo que ha incrementado en los casos de suicidio en el país.
Síntomas de la depresión
Para identificar si una persona padece depresión, los especialistas recalcan en poner mucha atención y saberlos identificar, porque indican que: “no es lo mismo estar triste a estar en un cuadro de depresión”. Muchas personas piensan que el estar triste ya indica que se está deprimido, sin embargo no es así, por ello, estos serían los síntomas principales para saber si una persona se encuentra en depresión y lo más recomendable, es que acuda con un experto para recibir un tratamiento.
Síntomas:
- Tristeza constante.
- Pérdida de interés en cosas que se solían disfrutar o que le gustaban a la persona.
- Sentimientos de culpa.
- Autoestima nula
- Trastornos del sueño (ganas de solo dormir).
- Falta de apetito.
- Dificultad para concentrarse.
- Cansancio constante.
De acuerdo con un estudio del Inegi, durante el segundo semestre del 2023, las mujeres registran mayores casos de depresión, con el 12.6 por ciento, en comparación con el de hombres, que indica el 10.4 por ciento.
¿Quiénes atentan más contra su vida?
A pesar de que las mujeres registran mayor número de ideas suicidas en México, los hombres son los que más se quitan la vida, esto es, por cada cuatro hombres que se suicidan, una mujer lo hace.
Esto sucede, porque los especialistas indican que culturalmente se enseña a un hombre a resolver solo sus problemas, además de que nunca se les permite externar sus emociones, así que un hombre que padece depresión, se ve acorralado y de forma súbita decide terminar con su vida.
El suicidio es la segunda causa de muerte entre los adolescentes; la primera causa son los accidentes.
No olvides seguirnos en Google Noticias para mantenerte informado
Suicidiometro o las etapas del suicidio:
- Ideas de muerte (me quiero morir).
- Deseo suicida (los demás van a estar mejor sin mí).
- Ideas suicidas (la única solución es matarme).
- Expresión suicida (ya no puedo estar con este dolor).
- Amenaza suicida (si todo sigue igual, me mato).
- Plan suicida (dónde, cuándo y cómo hacerlo).
- Gesto suicida (autolesiones con intención suicida o intento fallido de quitarte la vida).
- Suicidio (la persona muere).
Factores de riesgo
No todas las personas llegan a esta situación. Sin embargo, los factores de riesgo son:
- Violencia familiar.
- Abuso sexual.
- Depresión.
- Ansiedad.
- Consumo/abuso de sustancias psicoactivas.
- Acoso escolar.
- Duelo.
- Enfermedades terminales.
- Series de televisión en las que aparecen suicidios ficticios/retos en internet.
- Familiares con antecedentes de suicidio.
- Cambios de conducta en el estado de ánimo.
- Lanzar indirectas o amenazas directas por suicidarse.
- Se queja de ser mala persona o de sentirse insoportable.
- Tiene un bajo nivel de autoestima: rechazo a los elogios o los premios.
- Entrega las pertenencias más preciadas a otros.
- Presenta inquietud persistente por buscar, tener y compartir música, reflexiones personas, imágenes o comunidades virtuales alusivas a la muerte o a la idea del suicidio.
- Presencia de notas suicidas de agradecimiento, despedida, disculpas y enojo.
- Cómo ayudar a una persona en riesgo:
- Tomar en serio lo que está diciendo.
- Escuchar con genuino interés y tratar con respeto.
- Explicar que hay alternativas disponibles.
- No prometer confidencialidad. Buscar ayuda entre familiares y personas allegadas o significativas.
- Adoptar medidas prácticas: retire o controle todos los elementos que pueden suponer un riesgo.
- Procurar que la persona afectada permanezca acompañada.
- Acercarse con un profesional en psicología o un especialista en el tema.
- La prevención más eficaz es la identificación y tratamientos tempranos.
- Las emociones y los sentimientos nos envían señales constantes que no siempre escuchamos.
En resumen, los especialistas recomiendan poner atención a los distintos factores y síntomas que pueden detonar un cuadro de depresión, porque si no es tratado, muchas veces terminará con el suicidio de quien lo padece.
Recibe las noticias más importantes a través de nuestro canal de Whatsapp
En la actualidad, el Gobierno de la Ciudad de México cuenta con la Línea de la Vida, un número telefónico al que las personas pueden llamar y serán atendidas por especialistas, y muchas veces, hasta canalizadas a alguna institución de salud.
En Locatel también puede pedirse ayuda, ahí lo canalizarán para ser atendido: teléfono: 56 58 11 11.
La Facultad de Psicología también cuenta con una línea telefónica donde ofrece atención de 8 a 18 horas de lunes a viernes, el número es: 55-5025-0855.
Síguenos en Facebook: La Prensa Oficial y en Twitter: @laprensaoem