En el atrio de la parroquia de los Santos Cosme y Damián, Serapio Rendón 5, de la San Rafael, Alcaldía Cuauhtémoc, se develará la escultura por los desaparecidos “La Patria llora por sus hijos”, el próximo domingo 18 de septiembre a partir de las 13:30 horas.
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El padre José de Jesús adelantó a La Prensa que, al término de la Misa, develarán la escultura, como signo de oración constante y solidaridad con los desaparecidos y sus familias.
Puntualizó que la escultura representa a una mujer de rostro triste que se lleva una mano al pecho mientras que recarga la otra sobre un sostén.
“Está arrodillada en actitud de hacer oración, pero al mismo tiempo, como reflejo de cansancio al estar buscando a alguien bajo tierra”.
El Director de Arte Sacro de la Arquidiócesis de México describió que representa a todas las madres, esposas, hijas, hermanas, familiares o compañeras, pero al mismo tiempo, a la patria que llora por sus hijos desaparecidos y por los hijos de otras naciones que desaparecieron en territorio mexicano.
Platicó que la escultura es en memoria a los más de 100 mil desaparecidos en el país, que a diario son buscados por sus madres, padres, esposos o hijos.
¿Y qué se preguntan qué pasó con alguno o varios de sus seres queridos o compañeros que salieron de casa, de la escuela, del trabajo con un destino cierto al que nunca llegaron y han pasado los años y no saben nada de ellos?
Destacó que, con un corazón destrozado, dolor, incertidumbre e impotencia se preguntan: Si aún viven ¿dónde están? Y si fueron privados de la vida ¿dónde se encuentran sus restos? ¿De qué manera fueron sepultados?.
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“Si la Tierra pudiera hablar podría darles información de sus últimos pasos y de su destino final, pero como es muda permanece en silencio, al igual que los criminales que los desaparecieron o les quitaron la vida, los testigos que supieron de esto y prefieren callar y, algunas autoridades que no saben qué responder o no quieren responder”.
El sacerdote resaltó que como testimonio y denuncia de la tremenda realidad que está viviendo la sociedad mexicana contemporánea, y como deseo esperanzador de que: con la aplicación del estado de derecho, la justicia, el cumplimiento de la ley, la conciencia cívica de las autoridades competentes y todos los ciudadanos, así como la obligación moral de los cristianos, podamos dar fin a estas historias que hacen que nuestra patria llore por sus hijos.
Asimismo, precisó que la escultura está orientada hacia la puerta de la iglesia en representación de tantas oraciones elevadas al cielo para poder encontrar al ser querido, vivo, pero si no fuera el caso, por lo menos, muerto para darle una digna sepultura.
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