/ jueves 14 de noviembre de 2024

Consumo de alcohol detona violencia y conductas antisociales

La Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública, correspondiente al tercer trimestre de 2024, advierte que el consumo de alcohol en las calles fue la conducta antisocial más reportada

El 58.9% de los mexicanos refiere el consumo de alcohol en la calle como la principal conducta antisocial en los alrededores de sus viviendas.

Sin embargo, este porcentaje se dispara al 70 e incluso por arriba del 80% en la mitad de las alcaldías de la Ciudad de México y varios municipios del Estado de México.

Te recomendamos: Padres alcohólicos, un riesgo para los hijos y su crecimiento: UNAM

En el marco del Día Nacional contra el Uso Nocivo de Bebidas Alcohólicas que se conmemora el 15 de noviembre, especialistas advierten que el consumo de alcohol, además de ser un grave problema de salud pública que va en incremento e impacta la salud física y mental de las personas, también se relaciona a situaciones de violencia y conductas antisociales.

La Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública, correspondiente al tercer trimestre de 2024, advierte que el consumo de alcohol en las calles fue la conducta antisocial más reportada a nivel nacional por la población mayor de 18 años.

Durante el tercer trimestre de 2024, los resultados de la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública (Envipe), revelaron que el porcentaje de la población que mencionó haber visto o escuchado conductas delictivas o antisociales en los alrededores de su vivienda se distribuyó de la siguiente manera:

  • consumo de alcohol en las calles obtuvo 58.9
  • seguido por los robos o asaltos, 47.9
  • venta o consumo de drogas, 39.2
  • vandalismo en las viviendas o negocios, 39.2
  • disparos frecuentes con armas, 36.6
  • bandas violentas o pandillerismo, 24.2
  • tomas irregulares de luz (diablitos), 15.4
  • robo o venta ilegal de gasolina o diésel (huachicol), con el 3.4%.

Sin embargo, la Envipe 2024 detalla que el consumo de alcohol en las calles supera la media nacional en la Ciudad de México al ser reportado por la población con porcentajes que superan el 70 y hasta el 80% en la mitad de las alcaldías capitalinas.

Incluso son dos alcaldías de la Ciudad de México y tres municipios del Estado de México los que registran las cifras más altas de esta conducta antisocial en todo el país.

La Encuesta advierte que el 82.1% de la población de 18 años y más que vive en la alcaldía Milpa Alta y el 82% de los habitantes de la alcaldía Iztapalapa de la Ciudad de México atestiguaron, presenciaron o escucharon algún tipo de incivilidad relacionada con el consumo de alcohol en las calles en los alrededores de su vivienda.

Foto Ignacio Huitzil / La Prensa

El consumo de alcohol como conducta antisocial también registra porcentajes elevados y por arriba de la media nacional en:

  • Tláhuac con 78.5%
  • Xochimilco 75.7%
  • Magdalena Contreras 74.7%
  • Gustavo A. Madero 73%
  • Iztacalco 72.9%
  • Tlalpan con 72.8%

En el caso del Estado de México, los municipios que reportan los más altos porcentajes de incivilidades por consumo de alcohol son: Nezahualcóyotl con 80.9%; Chimalhuacán 80.6% y Ecatepec con 79%.

En contraparte, solo la alcaldía Benito Juárez de la Ciudad de México con el 31% se encuentra entre los municipios del país que reportaron los porcentajes más bajos de incivilidades relacionadas con el consumo de alcohol, entre los que se encuentran también:

  • San Nicolás de los Garza, NL (31%)
  • Nuevo Laredo, Tamps (27.7%)
  • Piedras Negras, Coah. 22.4%
  • San Pedro Garza García NL. 19.5%

Otra conducta antisocial identificada en esta Encuesta es la venta o consumo de drogas en los alrededores de las viviendas. La Envipe revela que Ecatepec (61.1%) e Iztapalapa (59.4%), así como Tláhuac, Iztacalco y Cuauhtémoc (58.7%), son los municipios del país que ocupan los cinco primeros lugares con el mayor porcentaje de población mayor de 18 años que durante el tercer trimestre de 2024 presenció o escuchó sobre la venta o consumo de drogas en los alrededores de su vivienda.

Respecto al segundo trimestre de 2024, se observa una disminución de 1.4 puntos porcentuales en consumo de alcohol en los alrededores de su vivienda a nivel nacional al pasar de 60.3 a 58.9%.

Sin embargo, en el comparativo del segundo y tercer trimestre de 2024 en lo que respeta a venta o consumo de drogas, no se observa una variación significativa al registrar porcentajes de 39.5 y 39.2%, respectivamente.

Puedes leer: Beber más de cuatro tragos o 'shots' ya es un consumo excesivo de alcohol, afirman especialistas

Consumo problemático de alcohol

De acuerdo con la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (Ensanut) en 2022, el 55 por ciento de personas adultas de 20 años en adelante consumieron alcohol, así como el 20.6 por ciento de adolescentes de 10 a 19 años.

El estudio “El Consumo de Alcohol como un problema de salud pública”, elaborado por la Red de Acción sobre Alcohol (RASA) señala que el consumo excesivo de alcohol, definido como el consumo de cinco o más bebidas por ocasión en hombres, de cuatro o más por ocasión en mujeres y cerca de uno de cada 5 adultos de 20 años o más, el 19%, reportan este tipo de consumo al menos una vez en los últimos 30 días.

Este tipo de consumo es casi tres veces mayor en hombres que en mujeres: 28.8% vs. 10.1%, respectivamente. No se observan diferencias estadísticamente significativas en 2021-2022.

Respecto al consumo de alcohol en adolescentes, señala que alrededor de uno de cada cinco adolescentes mexicanos de entre 10 y 19 años reportan haber consumido al menos una copa de una bebida alcohólica en el último año. A diferencia de los adultos, no se observan diferencias estadísticamente significativas entre hombres y mujeres en este grupo de edad. Tampoco se observan diferencias en el periodo 2020-2022.

Sin embargo, esto sugiere que, respecto al consumo de mujeres adultas, en el caso de las mujeres jóvenes el consumo de alcohol va en aumento.

Foto David Deolarte / La Prensa

En cuanto al consumo excesivo de alcohol, definido como el consumo de cinco o más bebidas alcohólicas por ocasión en hombres o de cuatro o más por ocasión en mujeres, tenemos que 5.2% de los adolescentes de 10 a 19 años reportan este tipo de consumo al menos una vez en los últimos 30 días.

No hay diferencias estadísticamente significativas en el consumo excesivo de hombres con 6.1% y mujeres con 4.2% en este grupo de edad. Tampoco se observan diferencias estadísticamente significativas en 2021-2022.

Daña salud física, mental y social de la población

El alcohol es una sustancia psicoactiva capaz de generar adicción, con impacto en la salud de las personas y su entorno social. Su consumo es un factor de riesgo para más de 200 trastornos de salud, entre los cuales se destacan diversos tipos de cáncer (de esófago, laringe, mama, boca, faringe, colorrectal, entre otros), enfermedades cardiovasculares, enfermedades hepáticas y traumatismos.

Así lo señala el estudio “El Consumo de Alcohol como un problema de salud pública”, elaborado por la Red de Acción sobre Alcohol (RASA), el cual advierte que el alcohol, además, aumenta los riesgos de padecer hechos de violencia, como:

homicidios, suicidios, agresiones sexuales y domésticas; de sufrir lesiones, como siniestros viales, caídas, ahogamientos y quemaduras; de intoxicación por alcohol; de comportamientos sexuales riesgosos; de abortos espontáneos y muerte fetal.

En el largo plazo, puede ocasionar problemas de salud mental, en el aprendizaje y la memoria, depresión y ansiedad, especialmente en personas jóvenes, así como dependencia.

En el 35% de los casos de maltrato infantil, se observó que los padres se encontraban bajo los efectos del alcohol en el momento del incidente.

Foto Ignacio Huitzil / La Prensa

Por otro lado, 1 de cada 3 mujeres que sufrieron agresiones por parte de sus parejas, declaran que éstos estaban bebiendo alcohol. La Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los

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Hogares (ENDIREH, 2016), destaca una conexión directa entre el consumo de alcohol por parte de los agresores y los actos de violencia contra las mujeres.

De acuerdo con la Encuesta RESET Alcohol México 2024, realizada por Vital Strategies, el 97% de la población mexicana está preocupada por la violencia contra la mujer atribuible al consumo de alcohol.

La relación entre el consumo de alcohol por parte de las parejas masculinas y la violencia de género en México es un problema complejo y profundamente arraigado que requiere atención inmediata y sostenida. A mayor disponibilidad de alcohol: publicidad, puntos de venta, horarios, promociones y bajo costo, mayor consumo de alcohol.

El Mtro. Juan Arturo Sabines, vocero de la Red de Acción sobre Alcohol (RASA), destacó la importancia de implementar intervenciones comunitarias y especialmente una política pública nacional para el control del alcohol, es posible revertir estas tendencias y construir una sociedad donde la equidad de género y el respeto sean la norma, permitiendo a las mujeres vivir libres de violencia y miedo”.

En México, diversos estudios han demostrado que existe una correlación significativa entre el consumo excesivo de alcohol por parte de hombres y el aumento de la violencia física, emocional y sexual contra sus parejas. Las mujeres que se encuentran en relaciones donde el alcohol desempeña un papel central son más propensas a experimentar episodios de agresión donde los límites del respeto y la seguridad se ven gravemente erosionados.

La doctora Martha Romero, investigadora del Instituto Nacional de Psiquiatría, señala que existe suficiente evidencia científica en torno a la asociación entre el consumo de alcohol y la violencia de género. “Sabemos que la violencia de género es causa de muerte en las mujeres, además es el origen de años de vida saludables perdidos por la discapacidad y disminuye los años de vida útiles en las mujeres...”. Es decir, la carga de enfermedad en las mujeres asociada a la violencia es un tema preponderante.

El estudio destaca que en México, el número de muertes por consumo de alcohol aumentó en términos absolutos. De 31,708 de muertes en el año 2000 a 48,888 en 2019 según la última estimación disponible. La tendencia se acentuó especialmente en los últimos años. En vez de disminuir o mantener la prevalencia como sucede en el tabaco, el consumo de alcohol creció considerablemente sobre todo de 2011 a 2019.

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El 58.9% de los mexicanos refiere el consumo de alcohol en la calle como la principal conducta antisocial en los alrededores de sus viviendas.

Sin embargo, este porcentaje se dispara al 70 e incluso por arriba del 80% en la mitad de las alcaldías de la Ciudad de México y varios municipios del Estado de México.

Te recomendamos: Padres alcohólicos, un riesgo para los hijos y su crecimiento: UNAM

En el marco del Día Nacional contra el Uso Nocivo de Bebidas Alcohólicas que se conmemora el 15 de noviembre, especialistas advierten que el consumo de alcohol, además de ser un grave problema de salud pública que va en incremento e impacta la salud física y mental de las personas, también se relaciona a situaciones de violencia y conductas antisociales.

La Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública, correspondiente al tercer trimestre de 2024, advierte que el consumo de alcohol en las calles fue la conducta antisocial más reportada a nivel nacional por la población mayor de 18 años.

Durante el tercer trimestre de 2024, los resultados de la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública (Envipe), revelaron que el porcentaje de la población que mencionó haber visto o escuchado conductas delictivas o antisociales en los alrededores de su vivienda se distribuyó de la siguiente manera:

  • consumo de alcohol en las calles obtuvo 58.9
  • seguido por los robos o asaltos, 47.9
  • venta o consumo de drogas, 39.2
  • vandalismo en las viviendas o negocios, 39.2
  • disparos frecuentes con armas, 36.6
  • bandas violentas o pandillerismo, 24.2
  • tomas irregulares de luz (diablitos), 15.4
  • robo o venta ilegal de gasolina o diésel (huachicol), con el 3.4%.

Sin embargo, la Envipe 2024 detalla que el consumo de alcohol en las calles supera la media nacional en la Ciudad de México al ser reportado por la población con porcentajes que superan el 70 y hasta el 80% en la mitad de las alcaldías capitalinas.

Incluso son dos alcaldías de la Ciudad de México y tres municipios del Estado de México los que registran las cifras más altas de esta conducta antisocial en todo el país.

La Encuesta advierte que el 82.1% de la población de 18 años y más que vive en la alcaldía Milpa Alta y el 82% de los habitantes de la alcaldía Iztapalapa de la Ciudad de México atestiguaron, presenciaron o escucharon algún tipo de incivilidad relacionada con el consumo de alcohol en las calles en los alrededores de su vivienda.

Foto Ignacio Huitzil / La Prensa

El consumo de alcohol como conducta antisocial también registra porcentajes elevados y por arriba de la media nacional en:

  • Tláhuac con 78.5%
  • Xochimilco 75.7%
  • Magdalena Contreras 74.7%
  • Gustavo A. Madero 73%
  • Iztacalco 72.9%
  • Tlalpan con 72.8%

En el caso del Estado de México, los municipios que reportan los más altos porcentajes de incivilidades por consumo de alcohol son: Nezahualcóyotl con 80.9%; Chimalhuacán 80.6% y Ecatepec con 79%.

En contraparte, solo la alcaldía Benito Juárez de la Ciudad de México con el 31% se encuentra entre los municipios del país que reportaron los porcentajes más bajos de incivilidades relacionadas con el consumo de alcohol, entre los que se encuentran también:

  • San Nicolás de los Garza, NL (31%)
  • Nuevo Laredo, Tamps (27.7%)
  • Piedras Negras, Coah. 22.4%
  • San Pedro Garza García NL. 19.5%

Otra conducta antisocial identificada en esta Encuesta es la venta o consumo de drogas en los alrededores de las viviendas. La Envipe revela que Ecatepec (61.1%) e Iztapalapa (59.4%), así como Tláhuac, Iztacalco y Cuauhtémoc (58.7%), son los municipios del país que ocupan los cinco primeros lugares con el mayor porcentaje de población mayor de 18 años que durante el tercer trimestre de 2024 presenció o escuchó sobre la venta o consumo de drogas en los alrededores de su vivienda.

Respecto al segundo trimestre de 2024, se observa una disminución de 1.4 puntos porcentuales en consumo de alcohol en los alrededores de su vivienda a nivel nacional al pasar de 60.3 a 58.9%.

Sin embargo, en el comparativo del segundo y tercer trimestre de 2024 en lo que respeta a venta o consumo de drogas, no se observa una variación significativa al registrar porcentajes de 39.5 y 39.2%, respectivamente.

Puedes leer: Beber más de cuatro tragos o 'shots' ya es un consumo excesivo de alcohol, afirman especialistas

Consumo problemático de alcohol

De acuerdo con la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (Ensanut) en 2022, el 55 por ciento de personas adultas de 20 años en adelante consumieron alcohol, así como el 20.6 por ciento de adolescentes de 10 a 19 años.

El estudio “El Consumo de Alcohol como un problema de salud pública”, elaborado por la Red de Acción sobre Alcohol (RASA) señala que el consumo excesivo de alcohol, definido como el consumo de cinco o más bebidas por ocasión en hombres, de cuatro o más por ocasión en mujeres y cerca de uno de cada 5 adultos de 20 años o más, el 19%, reportan este tipo de consumo al menos una vez en los últimos 30 días.

Este tipo de consumo es casi tres veces mayor en hombres que en mujeres: 28.8% vs. 10.1%, respectivamente. No se observan diferencias estadísticamente significativas en 2021-2022.

Respecto al consumo de alcohol en adolescentes, señala que alrededor de uno de cada cinco adolescentes mexicanos de entre 10 y 19 años reportan haber consumido al menos una copa de una bebida alcohólica en el último año. A diferencia de los adultos, no se observan diferencias estadísticamente significativas entre hombres y mujeres en este grupo de edad. Tampoco se observan diferencias en el periodo 2020-2022.

Sin embargo, esto sugiere que, respecto al consumo de mujeres adultas, en el caso de las mujeres jóvenes el consumo de alcohol va en aumento.

Foto David Deolarte / La Prensa

En cuanto al consumo excesivo de alcohol, definido como el consumo de cinco o más bebidas alcohólicas por ocasión en hombres o de cuatro o más por ocasión en mujeres, tenemos que 5.2% de los adolescentes de 10 a 19 años reportan este tipo de consumo al menos una vez en los últimos 30 días.

No hay diferencias estadísticamente significativas en el consumo excesivo de hombres con 6.1% y mujeres con 4.2% en este grupo de edad. Tampoco se observan diferencias estadísticamente significativas en 2021-2022.

Daña salud física, mental y social de la población

El alcohol es una sustancia psicoactiva capaz de generar adicción, con impacto en la salud de las personas y su entorno social. Su consumo es un factor de riesgo para más de 200 trastornos de salud, entre los cuales se destacan diversos tipos de cáncer (de esófago, laringe, mama, boca, faringe, colorrectal, entre otros), enfermedades cardiovasculares, enfermedades hepáticas y traumatismos.

Así lo señala el estudio “El Consumo de Alcohol como un problema de salud pública”, elaborado por la Red de Acción sobre Alcohol (RASA), el cual advierte que el alcohol, además, aumenta los riesgos de padecer hechos de violencia, como:

homicidios, suicidios, agresiones sexuales y domésticas; de sufrir lesiones, como siniestros viales, caídas, ahogamientos y quemaduras; de intoxicación por alcohol; de comportamientos sexuales riesgosos; de abortos espontáneos y muerte fetal.

En el largo plazo, puede ocasionar problemas de salud mental, en el aprendizaje y la memoria, depresión y ansiedad, especialmente en personas jóvenes, así como dependencia.

En el 35% de los casos de maltrato infantil, se observó que los padres se encontraban bajo los efectos del alcohol en el momento del incidente.

Foto Ignacio Huitzil / La Prensa

Por otro lado, 1 de cada 3 mujeres que sufrieron agresiones por parte de sus parejas, declaran que éstos estaban bebiendo alcohol. La Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los

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Hogares (ENDIREH, 2016), destaca una conexión directa entre el consumo de alcohol por parte de los agresores y los actos de violencia contra las mujeres.

De acuerdo con la Encuesta RESET Alcohol México 2024, realizada por Vital Strategies, el 97% de la población mexicana está preocupada por la violencia contra la mujer atribuible al consumo de alcohol.

La relación entre el consumo de alcohol por parte de las parejas masculinas y la violencia de género en México es un problema complejo y profundamente arraigado que requiere atención inmediata y sostenida. A mayor disponibilidad de alcohol: publicidad, puntos de venta, horarios, promociones y bajo costo, mayor consumo de alcohol.

El Mtro. Juan Arturo Sabines, vocero de la Red de Acción sobre Alcohol (RASA), destacó la importancia de implementar intervenciones comunitarias y especialmente una política pública nacional para el control del alcohol, es posible revertir estas tendencias y construir una sociedad donde la equidad de género y el respeto sean la norma, permitiendo a las mujeres vivir libres de violencia y miedo”.

En México, diversos estudios han demostrado que existe una correlación significativa entre el consumo excesivo de alcohol por parte de hombres y el aumento de la violencia física, emocional y sexual contra sus parejas. Las mujeres que se encuentran en relaciones donde el alcohol desempeña un papel central son más propensas a experimentar episodios de agresión donde los límites del respeto y la seguridad se ven gravemente erosionados.

La doctora Martha Romero, investigadora del Instituto Nacional de Psiquiatría, señala que existe suficiente evidencia científica en torno a la asociación entre el consumo de alcohol y la violencia de género. “Sabemos que la violencia de género es causa de muerte en las mujeres, además es el origen de años de vida saludables perdidos por la discapacidad y disminuye los años de vida útiles en las mujeres...”. Es decir, la carga de enfermedad en las mujeres asociada a la violencia es un tema preponderante.

El estudio destaca que en México, el número de muertes por consumo de alcohol aumentó en términos absolutos. De 31,708 de muertes en el año 2000 a 48,888 en 2019 según la última estimación disponible. La tendencia se acentuó especialmente en los últimos años. En vez de disminuir o mantener la prevalencia como sucede en el tabaco, el consumo de alcohol creció considerablemente sobre todo de 2011 a 2019.

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