/ miércoles 6 de enero de 2021

Confiesa Sheinbaum que son de risa declaraciones de Collins

Hay dos órdenes de aprehensión contra ex jefe de la policía y de INVI

Luego de que el ex funcionario de la administración capitalina pasada, Raymundo Collins Flores reapareció al acceder a una entrevista, la jefa de gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum Pardo, calificó de risa lo que declaró el que estuvo a cargo del Instituto de la Vivienda (Invi), a quien dijo que como delegada de Tlalpan fue a ver en una ocasión, no para pedir un favor sino gestionar una denuncia contra un desarrollo inmobiliario en Valle Escondido y remató: “el señor está acusado por corrupción y tiene dos órdenes de aprehensión”.

Aclaró que el caso del que también fuera responsable de la policía de la metrópoli, no es político ni personal, sino que se trata de una orden de aprehensión que otorga un juez, luego de ser elaboradas las carpetas de investigación.

La responsable de la administración capitalina, arremetió contra funcionarios del gobierno pasado al decir que “eran delincuentes, no eran servidores públicos” y, demandó que Collins devuelva todo lo que se robó.

Cuestionada en conferencia de prensa sobre las declaraciones de Collins, de una persecución y que teme por su seguridad, Sheinbaum se rió y justificó: “es que me da risa, la verdad”, ello en relación a que el ex funcionario comentó que ella lo fue a ver.

“Lo que le solicité es que se revisara un proyecto donde había muchísima oposición vecinal que es Rubí 38, yo me había comprometido con los vecinos a revisarlo, es un desarrollo que inclusive todavía ahora se está disminuyendo en una parte muy importante el número de viviendas que estaban programadas ahí en Valle Escondido en la alcaldía de Tlalpan”, explicó.

Tras comentar que le llamó mucho la atención la manera en la que estaba adornada la oficina del entonces responsable del Invi, “totalmente fuera de lo que normalmente se encuentra uno, con tapetes persa”, expuso que Raymundo Collins está acusado de corrupción y tiene dos órdenes de aprehensión.

Una tiene que ver con un predio en la alcaldía Álvaro Obregón que se adquirió por una empresa social para financiar vivienda popular, sin que más de 40 millones de pesos pasaran por alguna normatividad del propio instituto para construir departamentos de más de 70 metros cuadrados cuando deberían ser de 50, de acuerdo a lo estipulado, sin padrón de beneficiarios. La otra orden es por un caso similar en Iztapalapa.

La jefa de gobierno detalló: “es una orden de aprehensión, que no se les olvide, otorga un juez, no es ni siquiera la propia Fiscalía General, entonces se construyen las carpetas de investigación, como es el caso de otros servidores públicos del anterior gobierno que están hoy en reclusión”.

Aprovechó para sentenciar que “cuando se es corrupto se es delincuente y eso se acabó en este gobierno, es lo que ellos no alcanzan a entender; que devuelva el dinero el señor que se robó”.

Dijo que su administración está contra la corrupción, que es algo que debe quedar bien claro y, opinó que realmente los que integraron el gobierno anterior no eran servidores públicos sino delincuentes.



Luego de que el ex funcionario de la administración capitalina pasada, Raymundo Collins Flores reapareció al acceder a una entrevista, la jefa de gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum Pardo, calificó de risa lo que declaró el que estuvo a cargo del Instituto de la Vivienda (Invi), a quien dijo que como delegada de Tlalpan fue a ver en una ocasión, no para pedir un favor sino gestionar una denuncia contra un desarrollo inmobiliario en Valle Escondido y remató: “el señor está acusado por corrupción y tiene dos órdenes de aprehensión”.

Aclaró que el caso del que también fuera responsable de la policía de la metrópoli, no es político ni personal, sino que se trata de una orden de aprehensión que otorga un juez, luego de ser elaboradas las carpetas de investigación.

La responsable de la administración capitalina, arremetió contra funcionarios del gobierno pasado al decir que “eran delincuentes, no eran servidores públicos” y, demandó que Collins devuelva todo lo que se robó.

Cuestionada en conferencia de prensa sobre las declaraciones de Collins, de una persecución y que teme por su seguridad, Sheinbaum se rió y justificó: “es que me da risa, la verdad”, ello en relación a que el ex funcionario comentó que ella lo fue a ver.

“Lo que le solicité es que se revisara un proyecto donde había muchísima oposición vecinal que es Rubí 38, yo me había comprometido con los vecinos a revisarlo, es un desarrollo que inclusive todavía ahora se está disminuyendo en una parte muy importante el número de viviendas que estaban programadas ahí en Valle Escondido en la alcaldía de Tlalpan”, explicó.

Tras comentar que le llamó mucho la atención la manera en la que estaba adornada la oficina del entonces responsable del Invi, “totalmente fuera de lo que normalmente se encuentra uno, con tapetes persa”, expuso que Raymundo Collins está acusado de corrupción y tiene dos órdenes de aprehensión.

Una tiene que ver con un predio en la alcaldía Álvaro Obregón que se adquirió por una empresa social para financiar vivienda popular, sin que más de 40 millones de pesos pasaran por alguna normatividad del propio instituto para construir departamentos de más de 70 metros cuadrados cuando deberían ser de 50, de acuerdo a lo estipulado, sin padrón de beneficiarios. La otra orden es por un caso similar en Iztapalapa.

La jefa de gobierno detalló: “es una orden de aprehensión, que no se les olvide, otorga un juez, no es ni siquiera la propia Fiscalía General, entonces se construyen las carpetas de investigación, como es el caso de otros servidores públicos del anterior gobierno que están hoy en reclusión”.

Aprovechó para sentenciar que “cuando se es corrupto se es delincuente y eso se acabó en este gobierno, es lo que ellos no alcanzan a entender; que devuelva el dinero el señor que se robó”.

Dijo que su administración está contra la corrupción, que es algo que debe quedar bien claro y, opinó que realmente los que integraron el gobierno anterior no eran servidores públicos sino delincuentes.