Ciudad de México.- Colectivos feministas tomaron las instalaciones de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos en la Ciudad de México, pusieron siete condiciones para liberar el edificio.
Integrantes de “Ni Una Menos” comenzaron a lanzar mobiliario a la calle para quemarlo.
Las inconformes, que desde el pasado jueves permanecen en el lugar, piden servicios médicos y acceso a medicamentos; entrega de despensas; programas de empleo; subsidio para la alerta de violencia de género en siete estados; el retiro de la campaña “Cuenta hasta Diez”, y poner fin al discurso de descalificación del movimiento feminista.
A través de un comunicado, la CNDH hizo un llamado al diálogo a los colectivos feministas y los familiares de víctimas que se encuentran en el inmueble.
Fue el 2 de septiembre cuando Rosario Piedra Ibarra, presidenta de la CNDH, recibió a 18 víctimas que permanecían en un plantón afuera de las oficinas de la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas (CEAV), sin embargo, tras el diálogo tres personas decidieron quedarse en las instalaciones e incluso una de ellas, Marcela Alemán, mamá de una menor abusada sexualmente, se amarró en una silla.