La venta de cerveza en tianguis, puestos de la calle o incluso en negocios establecidos, comienza a ser una de las prácticas más realizadas para todas aquellas personas que buscan maneras de generar dinero por medio del comercio. Si bien cuenta con muchos puntos a favor como las buenas ventas que suelen tener, en donde los dueños se quedan con un buen margen de ganancia en cuanto a su inversión, también comienzan a ser un problema para la sociedad debido a la violencia que suele haber en varios de sus establecimientos.
De acuerdo a la ley, la venta de cervezas en puestos no fijos, está totalmente prohibida, pero tal parece que dichas normas con el paso del tiempo han comenzado a verse obsoletas, pues al menos durante las últimas dos décadas, el negocio de las chelerías ha subido como la espuma, convirtiéndose junto a los negocios de comida, en los dos giros más populares entre los emprendedores.
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Grandes tianguis en la CDMX como lo son Tepito, La Lagunilla, La Raza, Las Torres, el de La Portales, el de Santa Cruz Meyehualco y hasta el del Chopo cuentan cada vez con más chelerías que si bien ofrecen una buena opción de diversión para adultos, el tenso ambiente que suele haber cerca de ellos, comienza a ser un problema que tanto población, como autoridades, creen que debe tener una eficaz y rápida acción para al menos, regular su funcionamiento.
De acuerdo a múltiples investigaciones hechas tanto por la Fiscalía General de la Ciudad de México, como por la Secretaría de Seguridad Ciudadana, las chelerías representan un foco rojo para el desarrollo de la violencia.
¿Qué sanción tiene el vender alcohol en vía pública?
El repentino crecimiento de este negocio ha provocado que las autoridades se vean rebasadas pues de acuerdo al artículo 28, fracción V de la Ley de Cultura Cívica, las sanciones van apenas de los 2200, hasta los 3200 pesos, arrestos por hasta 36 horas e incluso trabajo comunitario por 18 horas.
Es por ello que recientes iniciativas de diputados de las principales alcaldías afectadas por este problema, planean proponer sanciones que vayan de los 3 meses de prisión, hasta los 3 años e incluso, de 100 a 500 veces la Unidad de Medida de Actualización vigente a quien venda alcohol en vía pública, en puestos móviles, mercados sobre ruedas o tianguis, a pie de camión, o en inmuebles habitacionales, así como en un radio menor a 2 kilómetros de cualquier centro educativo.
¿Cómo funciona el negocio de las Chelerías?
La venta de alcohol en vía pública nos lleva a pensar en las ganancias que se tienen en relación a como compran las cerveza los puesteros y al precio en que la venden.
En promedio, un cartón de caguamas cuesta 550 pesos, sin embargo, en los expendios, su precio suele bajar hasta los 350 pesos, es decir casi un 25% menos, por lo que cada caguama baja de los 45 pesos en su promedio más alto, hasta los 30 pesos.
Las cervezas en chelerías rondan varios precios dependiendo de su preparación:
- 80 pesos si es cerveza sola en un vaso
- 85 pesos si es con limón y sal y además escarchado en el vaso
- 90 pesos si es con clamato
- 95 pesos si es cubana, es decir, preparada con salsas inglesa, maggy, limón, sal y salsa picante.
- 110 pesos si es preparada con gomas (mejor conocida como Gomichela)
- 120 pesos si es prepada con camarones
Con lo antes mencionado, se tiene una ganancia de al menos 40 pesos por cerveza vendida y en palabras de dueños de chelerías entrevistados por LA PRENSA, en un día flojo (lunes a jueves), se venden al menos 30 micheladas, mientras que en un día movido (viernes, sábado y domingo), se puede llegar a vender hasta 150 cervezas.
Es decir en días en los que no hay tanta venta, se pueden generar hasta 2500 pesos. En días donde hay más clientela, las ventas pueden alcanzar hasta los 12 mil pesos.
Así ve el negocio de las Chelerías un emprendedor del barrio
Como parte de la investigación que se llevó a cabo para la elaboración de esta nota, decidimos entrevistar a personas cercanas al negocio de las chelerías y preguntarles cosas relacionadas al comercio de este tipo.
Cariñosito Boy, como nuestro entrevistado decidió que lo nombráramos gracias a su apodo en el Barrio Bravo, comenzó en el negocio de la venta de alcohol en tianguis hace aproximadamente 7 años, cuando después de haber sido despedido de su empleo estable, decidió que emprender era la mejor solución para hacer rendir el dinero de su liquidación.
Con sólo 24 años de edad, proveniente de una familia de comerciantes de Tepito, decidió incursionar en el negocio de las micheladas, disfrutando ganancias semanales de en promedio 8 mil y 10 pesos, es decir, hasta 40 mil pesos al mes.
"Comencé a chingarle primero los domingos en La Lagu, pues de venir cada domingo a empedar con mis valedores, me di cuenta como la chela dejaba a madres de lana y por eso de la nada le dije a mi jefa y mi familia en general que iba a ver qué onda con un puestito, chiquito pa probarle un mes si convenía. Primero la neta vendía a lo mucho 10 chelas al día, pero pues tampoco esperaba mucho, pero semana a semana, las ventas iban aumentando, de 'putazo' subieron a 20, 30 y hasta 50 o 60 nada más los domingos de 10 a 6pm y sólo pagando 400 o 500 pesos al líder del tianguis".
Las ventajas y desventajas de las chelerías de acuerdo a un vendedor
"Lo malo siempre fue el lidiar con los 'malacopa'. Ya sabes carnal, siempre hay banda que no sabe como tomar y de putazo se chingan 4,5 miches y pues cuando menos la sienten ya están de 'agraviosos' con otros clientes. Eso y que luego hay otros que se quieren ir sin pagar, pues si cansa lidiar con la banda, además, nunca falta la persona de la alcaldía que llegue, te quiere apantallar y te pide mordida para no cerrar tu puestito, de ahí en fuera, no hay broncas con el puesto.
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