San Judas escuchó de Jesús: "Padre, no solo te pido por mis discípulos, sino también por los que van a creer en mi por la palabra de ellos. Para que todos sean uno , como tú, Padre, en mí y yo en ti somos uno ....". Con estas palabras no solo se sintió cerca de Jesús, sino también animado a entregar su palabra a quienes la aceptaran, llevándolos a la unidad con Cristo, a la unidad con los discípulos de Cristo. Por eso San Judas se siente unido a Cristo, se siente unido a Dios, se siente unido a todos. Y en esa unidad está pronto para ayudar a quién lo necesite. Comunica las enseñanzas de Cristo en sus corazones; ilumina, acompaña y fortalece en sus problemas. Que seamos unos con Cristo, unos con San Judas, unos con aquellos con quienes convivimos.
Sentirse uno con otra persona, es buscar realizar la difícil tarea de respetar al otro como otro y por lo mismo aceptar sus diferencias, pero comprometiéndose en ayudarle, en compartir la vida con interés y esfuerzo semejante que tenemos por nosotros. San Judas ayuda, nosotros ayudamos, porque en Cristo somos uno.