Integrantes de la fracción parlamentaria de Morena en el Congreso de la Ciudad de México se sumaron a la demanda de vecinos de la alcaldía Coyoacán, de realizar una consulta en torno al proyecto Conjunto Estadio Azteca porque generará el encarecimiento de los servicios en la zona y ello podría desplazarlos de sus hogares.

El presidente de la Mesa Directiva del órgano deliberativo, Héctor Díaz Polanco, en apoyo a quienes viven en las inmediaciones del lugar donde se pretende consolidar la obra del Estadio Azteca en la colonia Pueblo Santa Úrsula Coapa, Coyoacán, promovió un punto de acuerdo para exhortar a las secretarías de Gobierno y del Medio Ambiente, así como a la Consejería Jurídica de la administración local, implementen una consulta o el mecanismo jurídico idóneo, para conocer de manera efectiva, amplia, equitativa, democrática y accesible, el parecer de la población que pueda ser afectada por el este proyecto.

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Vecinos del sur de la capital del país demandaron una consulta previa sobre la construcción del Proyecto Conjunto Estadio Azteca, por las afectaciones que generará en la zona de los Pedregales y Santa Úrsula Coapa, a lo cual los morenistas le dieron su respaldo a través del diputado presidente.

Díaz Polanco presentó el punto de acuerdo en el que expone: “Sin negar la importancia del proyecto, se debe siempre consultar a la población afectada por el mismo, informarles y establecer mecanismos para que se puedan manifestar al respecto”.

Comentó que en octubre de 2021 se anunció la intención de construir el proyecto, a lo que habitantes de la zona mostraron preocupación ante las probables afectaciones de una obra de tales magnitudes, que causaría desplazamiento.

A decir de colonos, la obra provocará el encarecimiento de los servicios, lo que podría, eventualmente, desplazarlos de sus hogares, aunado a que implicaría un considerable impacto de índole ambiental, además de que alteraría sustancialmente el ordenamiento territorial, con repercusiones en el acceso a los servicios hídricos y de movilidad.

Los desarrolladores de este proyecto han dado detalles, al exponer que además de la obra principal, edificarán nuevas vías de movilidad, en adición a la implementación de tecnologías verdes para reducir la contaminación y aprovechar los recursos naturales en la zona, así como otros trabajos de remediación y mejora, tanto en vialidades como de equipamiento urbano, que en su momento serán presentadas para su aprobación por parte del gobierno de la Ciudad de México.

Habitantes de Coyoacán que se hicieron escuchar en las instalaciones del Congreso, en su sede de Donceles y Allende, expusieron que la obra generará graves afectaciones a los residentes de la zona, en temas como del agua, problemas en la materia que de por sí ya los padecen.

“No estamos en contra del mundial de fútbol como se ha pretendido decir. No estamos en contra de la remodelación de su propio estadio, tampoco estamos en contra del progreso. Queremos que haya progreso con sentido humano, que se garantice que la modernidad esté acompañada de mejores condiciones de vida”, declaró Marcos Fuentes, vecino residentes de colonia Santa Úrsula.

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Los inconformes indicaron que no sólo es la remodelación del estadio, pues también habrá hoteles, centros comerciales y se extenderá una zona habitacional, por lo que se complicarán más los problemas que ya existen, como agua, movilidad, estacionamiento, áreas verdes e inseguridad.

Vecinos de las colonias afectadas temen que en el proceso de consulta ciudadana que buscan realizar mediante la recolección de firmas, las autoridades tomen en cuenta sólo un kilómetro cuadrado a la redonda del complejo, tal como ya lo hizo la Secretaría del Medio Ambiente local cuando definió la zona que tendría un impacto directo por la obra.