Hasta ahora la política en contra de la inseguridad ha fracasado, pues no se ha logrado reducir estos índices criminales que todos los días golpean a cientos de familias capitalinas.
Lo anterior fue considerado por el presidente de la Comisión de Transparencia de la alcaldía Cuauhtémoc, concejal Abel Fuentes Rocha, al cuestionar las recientes declaraciones de la titular de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJ-DF), Ernestina Godoy.
Le recordó que no basta reconocer que hay una crisis en materia de seguridad, sino se requieren acciones coordinadas y efectivas para revertir los índices de inseguridad, pues cada 24 horas son asesinados 2.3 personas en la ciudad de México.
Mostró su preocupación al señalar que, de continuar con las actuales tendencias de violencia y homicidios, la capital del país se convertirá en una de las metrópolis más peligrosas del país.
Para el concejal la actuación de los titulares de la PGJDF y de la Secretaría de Seguridad Ciudadana, Ernestina Godoy y Jesús Orta, respectivamente, ha dejado mucho que desear, al evidenciar un total desconocimiento en el manejo de temas tan relevantes como es la procuración de justicia y la seguridad ciudadana.
“Los resultados constituyen son una afrenta para los habitantes de la capital del país”, dijo.
Aseguró que el primer acto de corrupción de un servidor público es aceptar un cargo para el que no se tiene el perfil para ejercer la función encomendada, como lo han demostrado estos funcionarios. “Creo que mientras continúen en esas posiciones dentro del gabinete de la doctora Claudia Sheinbaum continuaremos en esta ola de violencia que azota a la capital del país”.
En los últimos cinco meses, la Ciudad de México ha registrado 380 homicidios por arma de fuego, lo que significa que cada 24 horas, 2.3 personas son víctimas de la violencia, situación que nos coloca como una de las metrópolis con mayores índices de homicidios, por debajo de Tamaulipas o Guerrero, lo cual resulta una situación lamentable, cuando contamos con poco más de 70 mil policías preventivos y cinco mil Policías de Investigación.
La estrategia implementada por la titular de la Jefatura de Gobierno ha sido fallida y de continuar con esta línea de trabajo -particularmente con dichos funcionarios-, tendremos uno de los años más violentos en la capital del país, agregó: “Los ciudadanos debemos exigir a nuestras autoridades que cumplan con su función y garanticen la seguridad de los habitantes de la metrópoli”.
Mencionó que en la alcaldía Cuauhtémoc se han incrementado significativamente el robo a transeúnte, el robo a negocio y la presencia de grupos que se han dedicado a desalojar con violencia a propietario de establecimientos locales en el Centro Histórico, así como personas que se dedican a la extorsión de comercios fijos y ambulantes.
Recordó que, en días pasados, se vivió una situación de terror al ocurrir un enfrentamiento a balazos entre presuntos delincuentes y “guardias privadas” que derivó en el homicidio de tres personas.
Aseguró que este tipo de “personal de seguridad” opera fuera de la ley.Pese a estos hechos, las autoridades solo atinan a reconocer que hay una crisis en materia de violencia y homicidios, concluyó.