En la Ciudad de México los homicidios (incluido el feminicidio), las lesiones por arma de fuego, las extorsiones, el robo a pasajeros de microbús y taxi, así como a repartidores y a casa habitación, se mantienen al alza, sostuvo Abel Fuentes Rocha, integrante del Concejo de la Alcaldía Cuauhtémoc, quien preside la Comisión de Transparencia.
Pese a los avances para mejorar la de vida de los habitantes de la Alcaldía Cuauhtémoc, los retos aún son muchos ya que aún existen graves rezagos en materia de seguridad ciudadana, desarrollo urbano, movilidad, y particularmente en el reordenamiento del comercio informal, señaló.
Ante la pregunta sobre su relación con el alcalde Néstor Núñez, dijo “no estoy aquí para prestarme a la simulación, al aplauso fácil, ni tampoco a la aprobación de los temas de interés de los vecinos sin discusión y revisión, quiero dejar claro que soy un concejal al servicio de los ciudadanos”.
Se suma a la propuesta de la concejal Ana Villagrán, para que el comercio informal sea ordenado y para que los recursos que son entregados a los líderes sean invertidos en las colonias para mejorar los espacios públicos.
Advirtió que se corre el riesgo de que la Alcaldía Cuauhtémoc se convierta en el “tianguis informal” más grande del país, pues no hay calles, plazas y avenidas que estén ocupadas por este tipo de comercios.
Planteó al Congreso de la Ciudad de México escuchar a vecinos, autoridades, y por supuesto, a los propios vendedores informales para crear un marco jurídico que atienda las demandas de los vecinos y de los vendedores informales.
Lamentó que durante 2018 en la CDMX, ocurrieran mil 843 casos de atropellamientos -entre éstos siete decesos de ciclistas- cifra que nos coloca entre las ciudades más peligrosas.
En el caso específico de la Alcaldía Cuauhtémoc, ésta ocupa el deshonroso primer lugar de accidentes viales. Finalmente, se pronunció por destinar recursos a una campaña de prevención de accidentes.
EGS