/ martes 28 de julio de 2020

El Covid-19 no detiene la fe en este día de San Judas

Los fieles escucharon misa desde fuera y luego los conminaron a marcharse

Como cada 28 de mes, los fieles a San Judas Tadeo no perdieron la oportunidad de acudir a dar gracias o pedir algún favor al apóstol de los casos difíciles, como esta pandemia sin cura que ya ha cobrado decenas de miles de víctimas.

Para evitar aglomeraciones y que se respete la sana distancia personal de la SSC cuidaron la zona.Con sus imágenes o esculturas del apóstol, cargadas de collares, pulseras y milagros, que significan cada favor que se le ha pedido, algunos con veladoras y flores llegaron hasta la esquina de Paseo de la Reforma e Hidalgo, pero se encontraron con que la iglesia estaba cerrada.

Ante este panorama, derivado de los llamados al confinamiento y sana distancia para evitar mas contagios de Covid-19, los fieles esperaron a las afueras y desde ahí escucharon la misa, para luego marcharse.

Este 28 de julio no fue como otros, cuando los alrededores de la Iglesia de San Hipólito se convierte en una fiesta, donde se escucha música, hay vendimia de comida, antojitos, figuras del santo.

Incluso los agradecidos que llegan a regalar comida, bebidas o pulseras escasearon este día, únicamente se presentaron de la taquería “El Gato”, ellos llevaron tacos de canasta para regalarlos a quienes se formaran, lo que generó una larga fila, principalmente de adultos mayores.

Los pocos comerciantes que si colocaron sus puestos fueron los que tienen un espacio en la acera de avenida Hidalgo, pero ni esto atrajo clientes, los seguidores de este Santo de la flamita en la cabeza llegaron se santiguaron y se marcharon, incluso los que iban en familia presentaron sus respetos, luego dejaron el espacio a otros que llegaban, también a postrarse ante el santo que les ha salvado la vida, el trabajo o los mantiene unidos como familia.

Aquí te dejo una galería del ambiente que se vivió este 28 de julio en la Iglesia de San Hipólito

Como cada 28 de mes, los fieles a San Judas Tadeo no perdieron la oportunidad de acudir a dar gracias o pedir algún favor al apóstol de los casos difíciles, como esta pandemia sin cura que ya ha cobrado decenas de miles de víctimas.

Para evitar aglomeraciones y que se respete la sana distancia personal de la SSC cuidaron la zona.Con sus imágenes o esculturas del apóstol, cargadas de collares, pulseras y milagros, que significan cada favor que se le ha pedido, algunos con veladoras y flores llegaron hasta la esquina de Paseo de la Reforma e Hidalgo, pero se encontraron con que la iglesia estaba cerrada.

Ante este panorama, derivado de los llamados al confinamiento y sana distancia para evitar mas contagios de Covid-19, los fieles esperaron a las afueras y desde ahí escucharon la misa, para luego marcharse.

Este 28 de julio no fue como otros, cuando los alrededores de la Iglesia de San Hipólito se convierte en una fiesta, donde se escucha música, hay vendimia de comida, antojitos, figuras del santo.

Incluso los agradecidos que llegan a regalar comida, bebidas o pulseras escasearon este día, únicamente se presentaron de la taquería “El Gato”, ellos llevaron tacos de canasta para regalarlos a quienes se formaran, lo que generó una larga fila, principalmente de adultos mayores.

Los pocos comerciantes que si colocaron sus puestos fueron los que tienen un espacio en la acera de avenida Hidalgo, pero ni esto atrajo clientes, los seguidores de este Santo de la flamita en la cabeza llegaron se santiguaron y se marcharon, incluso los que iban en familia presentaron sus respetos, luego dejaron el espacio a otros que llegaban, también a postrarse ante el santo que les ha salvado la vida, el trabajo o los mantiene unidos como familia.

Aquí te dejo una galería del ambiente que se vivió este 28 de julio en la Iglesia de San Hipólito

Policiaca

¡Vinculado el agresor de Tacubaya! lo internan en centro de atención psicosocial donde deberá tomar terapia

Se logró descubrir que, al momento de agredir a las 4 personas en la estación, se encontraba bajo los efectos de alguna droga, pero que sí sabía que podía hacer daño a las personas