Desesperación y violencia en medio de la pandemia

Hombre desesperado lo amenazó con un arma para que llevara a su madre al hospital pues estaba contagiada de Covid

Arianna Alfaro| La Prensa

  · miércoles 3 de febrero de 2021

Foto: Ilustrativa

Un arma de fuego y un ataque de tos, pusieron en peligro la vida de Pablo Chávez Gudiño, conductor de un taxi en la Ciudad de México, cuando un pasajero lo abordó y amenazó con pistola en mano para trasladar a una mujer contagiada de Covid-19, hacia el área de urgencias del Instituto Nacional de Cardiología.

En medio de su jornada laboral, rumbo a cumplir con un servicio agendado, Pablo fue abordado entre Jacaranda y Anillo Periférico, dentro de la alcaldía Iztapalapa, por un hombre que previamente realizó la parada, sin que el chófer detuviera su marcha debido al pasaje que ya lo esperaba en otro punto, por lo que se siguió de largo.

“Me agarró tráfico y me alcanzó, abrió la puerta y me dice, date la vuelta aquí a la derecha, le contesté que no estaba en servicio, me insistió, al negarme, me sacó la pistola y me encañona, me dice, discúlpame que lo haga de esta forma, necesito que lleves a mi mamá, está muy enferma de Covid, a urgencias a cardiología, por favor llévala, disculpa que lo haga de esta forma, pero nadie me va a querer llevar”, narró el conductor para los lectores de La Prensa.

Una vez que el pasajero armado aseguró el viaje al quitarle el teléfono, una mujer se acercó a la unidad “se veía mal, llevaba tanque y mascarilla, se sentó en la parte trasera y el señor a un lado de ella”, contó.

Incomunicado, el temor se apoderó de Chávez, quien no se atrevió a buscar el apoyo de una patrulla, y el miedo creció cuando la mujer convaleciente, “se quitó la mascarilla y comenzó a toser, sin cubrirse, ahí me alarmé, al concluir el servicio y me puse en contacto con el doctor y mi familia, para avisar lo que había acontecido, me saniticé y también el auto, dejé de trabajar, me fui a mi domicilio y me aislé totalmente”.

Cuatro días después, Pablo acudió a realizarse la prueba y resultó positivo de Covid-19, eso lo orilló a quedarse en casa durante más de un mes con tratamiento, oxígeno y medicamentos, contando con el apoyo de sus familiares y amigos taxistas para sobrellevar el gasto familiar. Después de lo ocurrido se vio en la necesidad de colocar una mampara, con la que se siente más seguro, sumado a los protocolos que cumple para cuidar de su salud y la de sus pasajeros.