Con la bandera a media asta, en señal de duelo nacional, la alcaldía de Iztapalapa conmemoró los 51 años de la matanza en la plaza de las Tres Cultura en Tlatelolco.
Durante el acto se reconoció la importancia del Movimiento Estudiantil de 1968 como detonante de grandes cambios políticos en el país.
En la ceremonia, realizada junto a la Bandera Monumental ubicada en Periférico y Ermita Iztapalapa, el ex integrante del Movimiento Estudiantil de 1968, Federico Rosas, sostuvo que es de vital importancia mantener viva la exigencia de justicia por la masacre de estudiantes en Tlatelolco hasta alcanzar el país de leyes que la mayoría de la población mexicana desea.
Ese país, “sabremos que habrá llegado cuando a los tiranos muertos, el juicio de la historia los condene públicamente, y a los tiranos vivos los tribunales les dicten sentencia”, aseguró.
Rosas aseveró que “si el reclamo por la verdad y la enmienda de lo ocurrido después de 51 años sigue vigente, no es sino porque las atrocidades, abusos y crímenes de los gobiernos sucesivos no sólo se mantienen, sino somos testigos de su incremento imparable”.
Hemos atestiguado que “a las habituales prácticas terribles de violencia y represión en los últimos 12 años de los gobiernos conservadores, se sumaron las desapariciones forzadas y las inhumaciones clandestinas".
Dijo que: “A los jóvenes del 68 se les debe un buen gobierno, un profundo compromiso democrático y una voluntad inquebrantable para cambiar las cosas".
Y bundo: "Los autoritarios apuestan a la desmemoria colectiva y a que siempre habrá un crimen mayor que permita ahogar los reclamos de justicia, pero éstos estarán presentes hasta que esas exigencias se cumplan”, concluyó Rosas.
Por último, se depositó una ofrenda floral y se refrendó el compromiso de luchar hasta que se haga justicia por esos hechos.