A campo abierto sobre un camellón dentro de la alcaldía Iztapalapa se abre el paraíso chopper, un lugar donde los motociclistas son recibidos para vender, comprar, promover, pero sobre todo para convivir en un ambiente entre los amantes de los caballos de acero, dentro de la colonia Santa María Astahuacán.
Sin el propósito de que se convirtiera en un espacio para motocicletas marca Harley, es el destino el que la reúne domingo a domingo en mayor cantidad, sin importar la cilindrada o el estilo, también se dan cita los bikers de otros modelos y estilo para mirar las novedades, conseguir piezas o simplemente reunirse con los amigos.
“Todas las motos son bienvenidas, pero se ha inclinado las choppers, a tomar el bazar como su casa, pero aquí recibimos a todos”, comenta Karim, líder del tianguis quien, desde las 10 de la mañana, comienza a generar las condiciones para se coloquen los puestos que recibirán a los motociclistas.
Mientras Karim platica en entrevista para La Prensa, las motos no dejan de rugir a su llegada, donde el ambiente es de camaradería y hasta familiar, debido a las pocas atracciones infantiles, como un trampolín, colocado en una zona del verdoso camellón, entre los puestos y el área de “escuela de manejo”.
Un año tres meses es el tiempo que lleva el bazar, después de la desaparición del gran tianguis de Santa Cruz Meyehualco, de donde Karim ideó la forma de solo congregar a los “compradores de refacciones y artículos de motos y los traje aquí a esta zona, es como se formó el espacio y así se ha hecho grande, con los permisos de la alcaldía para que eso funcione de manera regular”, comentó.
A pesar de no ser motociclista, Karim ha sabido entender la necesidad de los riders que buscan un punto de reunión, que les ofrezca la posibilidad de congregarse, hacer eventos ya la vez, encontrar productos propios de un sector que cada vez muestra su crecimiento en las calles y carreteras.
Un gran motoclub
Alrededor de 300 motocicletas se reúnen en dicho bazar con sede sobre avenida de Las Torres, en la colonia Santa María Astahuacan, donde durante todo el día se ve desfilar a los bikiers que llegan a convivir o vender, entre particulares, diversos artículos, incluso motocicletas.
“Esto también reactiva la economía y el comercio, es hora de retomar, y estos proyectos ayudan a la gente y a la economía de todos, por lo que va levantando poco a poco, con más visitantes cada fin de semana”, dijo.
Para Karim, el bazar Santa Moto, se ha convertido en “un motoclub grande donde se reúnen varios de ellos, aquí llevan a cabo su convivencia, se juntan, vienen independientes y motoclubes de la Ciudad de México o del Estado de México, así como de otros países. Nos han visitado de Perú, Costa Rica, Estados Unidos, es la casa de la hermandad”.
El de Santa Moto, nos cuenta el líder, se debe a que inicialmente se ubicaban en Santa Cruz Meyehualco y llegaron a Santa María Astahuacan, por lo que le asignaron ese distintivo con el que cada vez más riders conocen el lugar.
A decir de Karim, el ambiente que se forma también es propicio para las familias, ya que muchos de los pilotos llegan en compañía de sus parejas e hijos, lo mismo que entre amigos que llegan a planear sus rodadas o la preparación de los aniversarios de sus motoclubes.
Asimismo, dentro de este espacio, cuentan con personal que ofrece cursos de manejo para los principiantes donde, con todas las medidas de seguridad, les instruyen para aprender a pilotar los potros de acero, sin que esta actividad represente una molestia para locales cercanos o los visitantes.
Para la seguridad y tranquilidad de los comerciantes y visitantes que frecuentan Santa Moto, Karim comentó que el espacio es sanitizado desde temprano, así como todos los locales que se montan, además de contar con gel en cada puesto pero, aunque “les exigimos el cubrebocas, la gente no le da la importancia y es imposible andar detrás de cada uno, todos nos debemos cuidar”, dijo.
El líder del tianguis asegura que este espacio ha crecido y seguirá creciendo ya que ha resultado atractivo para los motociclistas, además de que cuenta con cupo para quienes quieran comercializar sus productos o servicios.