Ciudad de México.- La contingencia del Covid-19 también ha modificado los hábitos de la delincuencia en la ciudad en ilícitos como el derecho de piso, que da señales de haber encontrado nuevas víctimas ante los miles de negocios cerrados, que llega hasta el 65% en todo el territorio nacional, advirtió Alejandro Desfassiaux, experto en temas de seguridad en el país.
Detalló que profesionistas, servidores públicos, asociaciones y otros sectores sociales que antes no estaban dentro de su radar, hoy empiezan a ser blanco de extorsiones.
Otro indicador de la violencia es el de los homicidios que no vienen a la baja, ni se redujeron en el primer trimestre del año con 7,313 víctimas.
Dicha cifra no es una reducción sino al revés: equivale a un incremento del 3.6% en comparación con el primer trimestre de 2019, cuando se registraron 7,056 casos.
Desfassiaux, también presidente de Grupo Multisistemas de Seguridad Industrial y presidente Fundador del Consejo Nacional de Seguridad Privada, evidenció que diversos grupos de narcomenudistas están burlando a las autoridades para seguir operando haciéndose pasar por repartidores de comida a domicilio de las principales apps de este tipo.
Otros grupos de la delincuencia organizada están haciendo uso de vehículos como ambulancias, camiones de CFE o de marcas reconocidas de alimentos, todos relacionados a actividades esenciales, para vaciar instalaciones y cometer ilícitos.
La situación se está tornando muy compleja y los cuerpos policiales no están ayudando a mitigar la problemática, al contrario. En Ecatepec, por ejemplo, algunos malos policías han mostrado su indiferencia ante la pandemia y están cometiendo una serie de abusos y robos a los ciudadanos, cuando su función es la de protegerlos, afirmó.
Ante este escenario que se replica en muchas otras localidades del país y aprovechando que Morena tiene mayoría en el Congreso, es urgente desaparecer a todas a las policías estatales y municipales, que son corruptas e ineficientes, para que sea sólo la Guardia Nacional quien opere en todo el territorio nacional, sugirió.
Adelantó que México afronta las próximas fases de la contingencia con un potencial incremento de estallidos sociales que se verán reflejados en más casos de vandalismo, saqueos, robos, asaltos y disturbios de toda índole.
Considero que la estrategia implementada por la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana es la correcta para resguardar 84 unidades médicas del IMSS y desplegar 1,800 elementos de la Guardia Nacional para que operen en calles de la CDMX.
Sin embargo, considera que las labores de patrullaje durante las próximas fases deberán intensificarse en todas las alcaldías y municipios, en el aeropuerto, en complejos industriales y comerciales, en las casetas de las principales autopistas y en las terminales de autobuses del país.