/ jueves 10 de noviembre de 2022

Buscan que el maguey, pulque y pulquerías sean patrimonio intangible y biocultural de la CDMX

Se trata de valorar al pulque, que en muchos casos han dicho que es una bebida sucia, y quitar la idea que sólo lo beben personas de bajos recursos.

Un grupo de activistas, integrantes de pueblos originarios, artesanos, tlachiqueros, comercializadores, promueven que se declare al Maguey, al pulque y las pulquerías, Patrimonio Intangible y Biocultural de la Ciudad de México, como una forma de redignificar y valorar esa bebida tradicional, así como a los lugares donde se vende: las pulquerías.

Por ello se agruparon en Mappul; cuyo promovente es Emilio Manuel Valdovinos Nava, quien junto con el resto de los integrantes realizaron un Plan de Salvaguardia para lograr la declaratoria de esos bienes como Patrimonio Intangible y Biocultural, de parte de la Secretaría de Cultura de la Ciudad de México, la Secretaría de Pueblos, Barrios y Comunidades Residentes Local.

En una entrevista con LA PRENSA, el sociólogo Emilio Valdovinos, adelantó que el próximo 15 de noviembre a las 12 horas, entregarán el documento al director general de patrimonio histórico, artístico y cultural de la Secretaría de Cultura local, Francisco Javier Martínez.

La organización Mappul (Plan de Salvaguardia, integrada por 50 personas) citó el profesor, busca que se reconozca al pulque, pulquerías y al maguey la importancia que tienen. “El pulque sólo hay en México, es una bebida que el país aportó al mundo y es un alimento muy nutritivo”.

Narró que desde el 2018 se dio a la tarea de comenzar a buscar la declaratoria, “me pidieron que se constituyeran como grupo; me pidieron firmas del pueblo en general para tomarlo como solicitud y ahí se justificó la importancia de esa bebida ancestral que ha sido elemento indispensable en ceremonias, alimentación, historia, ecológica, antropológico, nutricional y gastronómico.

Adelantó que en la entrega de documentos en la Secretaría de Cultura, el próximo 15 de noviembre van a ir acompañados de danzantes y la imagen de Mayahuel, (diosa del Pulque) en procesión, como un acto simbólico a la entrega. El grupo permanecerá en el Parque de la Bombilla, mientras se realiza la recepción.

Aunque antes, el 14 de noviembre van a visitar a los diputados locales, en la sede de Plaza de la Constitución, resaltó.

El maestro universitario, activista y artesano describió que el 15 próximo entregará el Plan de Salvaguardia, para dar el primer paso a nivel local; posteriormente buscarán que esa declaratoria sea a nivel nacional. Porque se tiene una deuda histórica con el maguey, el pulque y las pulquerías.

Dijo que al aceptar dicha declaratoria, se entregaría una carta de parte de las citadas secretarías, y luego se publicaría en la Gaceta de la CDMX, y el Consejo Consultivo es para darle seguimiento y que no quede sólo en un papel

Asimismo, agregó se trata de valorar al pulque, que en muchos casos han dicho que es una bebida sucia, y quitar la idea que sólo lo beben personas de bajos recursos.

Se trata de valorar al maguey, en la elaboración de fibras textiles, bebidas alcohólicas, plantas ornamentales, gastronomía, sus valores nutritivos, medicinales y comestibles y buscar medidas para conservarlo, y quitarle la imagen que el pulque es un líquido embriagante, ya que es un néctar muy nutritivo, y evitar se le hostigue legamente y se le reconozca como una bebida histórica, aseveró.

El promovente insistió que el pulque es la planta milenaria del maguey ha sufrido discriminaciones y no se le ha dado su valor cultural.

Informó que junto con Mariana Elizabeth Rosales Izquierdo, cocinera tradicional pulquera, escribió el libro “Cocina Pulquera y Magueyera”.

Valdovinos Nava remarcó que si la Secretaría de Cultura hace esa declaratoria sería un gran reconocimiento a la cultura capitalina, para que los ciudadanos conozcan a fondo las propiedades del maguey.

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Platicó que también se han unido con tlachiqueros, comercializadores de pulque, dueños de pulquerías, integrantes del Museo del Pulque, cocineras tradicionales, productores de la bebida, artistas plásticos, músicos, la gente que trabaja el ixtle (fibra del maguey), consumidores, danzantes prehispánicos y hasta extranjeros que les gusta el pulque

Los nombres del pulque

De acuerdo con algunas pulquerías se le conoce como la baba de oso, “la cara blanca”, “elixir de dioses”, “el beso del tlachiquero”, “el pulmón”, “el babín”; entre sus propiedades se encuentran: quita la angustia, extingue la culpa, hace olvidar, afloja el calcetín, arregla corazones rotos, acerca amigos, causa tranquilidad, elimina la timidez, hace compadres, liga comadres, mejora la digestión y mata lombrices.

El pulque se produce desde hace más de 2 mil años. En los estados, Hidalgo, Puebla, Tlaxcala. Veracruz, Estado de México y Ciudad de México.

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Un grupo de activistas, integrantes de pueblos originarios, artesanos, tlachiqueros, comercializadores, promueven que se declare al Maguey, al pulque y las pulquerías, Patrimonio Intangible y Biocultural de la Ciudad de México, como una forma de redignificar y valorar esa bebida tradicional, así como a los lugares donde se vende: las pulquerías.

Por ello se agruparon en Mappul; cuyo promovente es Emilio Manuel Valdovinos Nava, quien junto con el resto de los integrantes realizaron un Plan de Salvaguardia para lograr la declaratoria de esos bienes como Patrimonio Intangible y Biocultural, de parte de la Secretaría de Cultura de la Ciudad de México, la Secretaría de Pueblos, Barrios y Comunidades Residentes Local.

En una entrevista con LA PRENSA, el sociólogo Emilio Valdovinos, adelantó que el próximo 15 de noviembre a las 12 horas, entregarán el documento al director general de patrimonio histórico, artístico y cultural de la Secretaría de Cultura local, Francisco Javier Martínez.

La organización Mappul (Plan de Salvaguardia, integrada por 50 personas) citó el profesor, busca que se reconozca al pulque, pulquerías y al maguey la importancia que tienen. “El pulque sólo hay en México, es una bebida que el país aportó al mundo y es un alimento muy nutritivo”.

Narró que desde el 2018 se dio a la tarea de comenzar a buscar la declaratoria, “me pidieron que se constituyeran como grupo; me pidieron firmas del pueblo en general para tomarlo como solicitud y ahí se justificó la importancia de esa bebida ancestral que ha sido elemento indispensable en ceremonias, alimentación, historia, ecológica, antropológico, nutricional y gastronómico.

Adelantó que en la entrega de documentos en la Secretaría de Cultura, el próximo 15 de noviembre van a ir acompañados de danzantes y la imagen de Mayahuel, (diosa del Pulque) en procesión, como un acto simbólico a la entrega. El grupo permanecerá en el Parque de la Bombilla, mientras se realiza la recepción.

Aunque antes, el 14 de noviembre van a visitar a los diputados locales, en la sede de Plaza de la Constitución, resaltó.

El maestro universitario, activista y artesano describió que el 15 próximo entregará el Plan de Salvaguardia, para dar el primer paso a nivel local; posteriormente buscarán que esa declaratoria sea a nivel nacional. Porque se tiene una deuda histórica con el maguey, el pulque y las pulquerías.

Dijo que al aceptar dicha declaratoria, se entregaría una carta de parte de las citadas secretarías, y luego se publicaría en la Gaceta de la CDMX, y el Consejo Consultivo es para darle seguimiento y que no quede sólo en un papel

Asimismo, agregó se trata de valorar al pulque, que en muchos casos han dicho que es una bebida sucia, y quitar la idea que sólo lo beben personas de bajos recursos.

Se trata de valorar al maguey, en la elaboración de fibras textiles, bebidas alcohólicas, plantas ornamentales, gastronomía, sus valores nutritivos, medicinales y comestibles y buscar medidas para conservarlo, y quitarle la imagen que el pulque es un líquido embriagante, ya que es un néctar muy nutritivo, y evitar se le hostigue legamente y se le reconozca como una bebida histórica, aseveró.

El promovente insistió que el pulque es la planta milenaria del maguey ha sufrido discriminaciones y no se le ha dado su valor cultural.

Informó que junto con Mariana Elizabeth Rosales Izquierdo, cocinera tradicional pulquera, escribió el libro “Cocina Pulquera y Magueyera”.

Valdovinos Nava remarcó que si la Secretaría de Cultura hace esa declaratoria sería un gran reconocimiento a la cultura capitalina, para que los ciudadanos conozcan a fondo las propiedades del maguey.

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Platicó que también se han unido con tlachiqueros, comercializadores de pulque, dueños de pulquerías, integrantes del Museo del Pulque, cocineras tradicionales, productores de la bebida, artistas plásticos, músicos, la gente que trabaja el ixtle (fibra del maguey), consumidores, danzantes prehispánicos y hasta extranjeros que les gusta el pulque

Los nombres del pulque

De acuerdo con algunas pulquerías se le conoce como la baba de oso, “la cara blanca”, “elixir de dioses”, “el beso del tlachiquero”, “el pulmón”, “el babín”; entre sus propiedades se encuentran: quita la angustia, extingue la culpa, hace olvidar, afloja el calcetín, arregla corazones rotos, acerca amigos, causa tranquilidad, elimina la timidez, hace compadres, liga comadres, mejora la digestión y mata lombrices.

El pulque se produce desde hace más de 2 mil años. En los estados, Hidalgo, Puebla, Tlaxcala. Veracruz, Estado de México y Ciudad de México.

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