La separación de Florencia Serranía Soto, como directora general del Sistema de Transporte Colectivo (STC) Metro fue tardía y, el que ocurriera no implica que se aplique el tradicional “borrón y cuenta nueva”, porque se debe profundizar en las investigaciones del accidente fatal de la Línea 12 ocurrida el 3 de mayo y deslindar responsabilidades, dejó en claro el coordinador del grupo parlamentario del PAN en el Congreso de la Ciudad de México, Christian von Roehrich de la Isla.
Una vez que considerara que tanto el gobierno capitalino como el partido Morena quieren ocultar la verdad de lo acontecido en la denominada Línea Dorada, a fin de proteger a Florencia Serranía y el desaseo en ese medio de transportación, dijo que es de celebrar la salida de esa persona, pero se requiere una investigación firme en su contra por negligencia y omisiones durante su gestión.
El diputado panista consideró que la designación de Guillermo Calderón al frente del STC Metro, tiene la misión de garantizar la seguridad a los usuarios y no vuelva a ocurrir una tragedia similar a la de la Línea12, “destinando los recursos necesarios para darle mantenimiento al medio de transporte y asumir su responsabilidad”.
Von Roehrich solicitó un encuentro con carácter de urgente entre el funcionario y el Congreso local, a fin de establecer mesas de trabajo hacia un esquema que pueda dar cauce a un mejor desempeño en el servicio.
Al insistir que la separación del cargo fue tardía y que Serranía Soto no puede irse por la “puerta trasera”, expuso que, mucho menos, el gobierno debe apostarle al olvido de la tragedia ni fallas del Metro por atención, mantenimiento y rehabilitación de toda la red.
Dijo que tan sólo en dos años en la gestión de la ahora ex funcionaria, hubo “trenes que chocaron, incendios, explosiones y vagones que se caen, entre otros acontecimientos; ahora tiene que comparecer ante el Congreso y la Fiscalía General de Justicia (FGJ) interrogarla para someterla a una línea de investigación por su probable responsabilidad administrativa y penal”.
Entre los hechos que marcaron el expediente negro para Serranía, está la muerte de una mujer en la estación Tacubaya hace dos años, a la que se le atribuyó negligencia por parte del jefe de estación. “Y cómo olvidar el incendio en la subestación de Delicias, que tuvo como saldo otro muerto y seis líneas del Sistema detenidas bajo el argumento de ser un corto circuito, pero nunca se dijo quién lo provocó”, acotó.
Pugnó porque continúen las investigaciones por el choque de trenes en Tacubaya, donde lamentablemente falleció una persona y hubo por lo menos 50 heridos tras un supuesto error humano.
Abundó que no se deben hacer a un lado las fallas en el suministro eléctrico de la Línea A, que han derivado en cortes de movilidad con afectación a los usuarios del oriente en épocas de lluvia.
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Precisó que a casi dos meses del desplome mortal de la Línea 12, en el cual murieron 26 personas y más de 70 heridos, es necesario que se investigue y sancione a quienes estuvieron a cargo del mantenimiento bajo el liderazgo de Serranía Soto, incluyéndola a ella.
“Morena y el gobierno se niegan sistemáticamente a una crear una Comisión Investigadora para que los funcionarios del Metro responsables del desplome comparezcan, pero esa actitud fomenta corrupción y detiene la verdad alrededor de lo sucedido en Tláhuac”, declaró.
Estableció que fue tan malo y vergonzante el trabajo de la hoy ex directora del Metro, que ni para dar la cara por las muertes y los heridos tras el desplome de vagones en la estación Olivos de Tláhuac.
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