Alistan últimas pruebas para nueva Planta de Carbonización Hidrotermal

La Planta de Carbonización Hidrotermal cuenta con infraestructura que transforma la basura orgánica en electricidad y pellets

Yennyfer Mena | La Prensa

  · martes 28 de marzo de 2023

En México se producen 20 millones de toneladas de basura orgánica | Foto: Cortesía Sobse

Luego de una gran planeación del Gobierno de la Ciudad de México, en conjunto con la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), la Secretaría de Energía (SENER) y la Comisión Federal de Electricidad (CFE), se creó la Planta Piloto de Carbonización que se encuentra en pruebas con una inversión de 15 millones de dólares.

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El proyecto que nació en 2018 durante algunas pláticas con la ahora jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, quien es investigadora del Instituto de Ingeniería de la UNAM, se prevé que puede entrar en funcionamiento a mediados de abril.

La Planta de Carbonización Hidrotermal cuenta con infraestructura que transforma la basura orgánica en electricidad y pellets (o carboncitos pequeños, como una cápsula) de carbón vegetal de cero emisiones de gases de efecto invernadero.

Si el modelo y las cosas que se tiene proyectadas son viables, el gobierno capitalino se estará ahorrando 15 millones de pesos por enviar la basura al relleno sanitario cada año.

Foto: Cortesía Sobse

En entrevista para LA PRENSA, el ingeniero Daniel Camarena, del Instituto de Ingeniería de la UNAM, enfatizó que “la planta piloto sirve para una población de 200 mil habitantes, por lo que la visión del proyecto es hacer módulos que se puedan replicar, para que vaya creciendo poco a poco, según las necesidades”.

México gran generador de basura

En México se producen 20 millones de toneladas de basura orgánica (residuos orgánicos sólidos domésticos y mercados), la CDMX produce 4.5 toneladas de basura, de las cuales llegan a la planta de composta de la capital entre mil 250 y mil 400 toneladas todos los días.

La ciudad produce 12 mil toneladas de basura, por lo que a los centros de transferencia llegan 8 mil toneladas de desechos y los primeros que realizan la separación son los pepenadores.

Por una tonelada de basura orgánica que llega con 75% de humedad y tiene un poder calorífico inferior de 1.9 MJ/kg (mega joules por kilogramo), se obtienen 150 kilogramos de carbono seco con un poder calorífico de 23 MJ/kg, por lo que “tengo menos, pero con mucha más energía”, señaló Camarena.

Foto: Cuartoscuro

Para producir una tonelada de hidrocarbón se tendrá que procesar 8.3 toneladas de desechos y 2.3 toneladas de poda, por lo que se evitará que se pudra y genere emisiones.

Otro problema ambiental aparte de la basura es el sargazo, por lo que la solución que se generó por los ingenieros de la UNAM, fue que el sargazo fuera generador de energía, por lo que será conveniente para CFE.

La manera en cómo la ciudadanía podría apoyar a este proyecto principalmente sería separando los desechos generados en el hogar, para que el proceso de separación sea un poco más fácil; la idea es llegar a lo que es basura cero.

Diferentes procesos, con grandes resultados

Con esta planta se ofrecen dos tipos de tecnologías que son la gasificación y la carbonización hidrotermal, lo cual permite que los desechos orgánicos y los árboles secos tengan un mejor uso y no sólo ir al relleno sanitario.

Las tecnologías que ocupan son de vanguardia porque son poco utilizadas, por lo que estos dos tipos de tecnología tienen un gran proceso el cual podría ayudar a toda la CDMX e inclusive a todo el mundo.

Este tipo de proceso ayuda a que la composta se realice en menor tiempo. “Un proceso de composta tarda 3 meses, por lo que en la Planta de Carbonización Hidrotermal en el Bordo Poniente sólo tarda 8 horas”, comentó Camarena.

Foto: Cortesía Sobse

Gasificación

Este proceso se hace solamente con la biomasa de los árboles secos, como los que caen, porque ya tienen varios años y otros más que por siniestros naturales se ven afectados.

El proceso que lleva es más corto a comparación de la carbonización hidrotermal, lo cual permitirá que se genere energía.

“La madera de árboles caídos, por vientos o siniestros naturales, se pica para ingresar al gasificador, lo que produce humo (monóxido, carbono y otras cosas), para comenzar a filtrar y que los gases vayan a la caldera, el resto se enfría y se sigue filtrando, para después ir a los motores generadores para producir electricidad”, explicó.

Carbonización Hidrotermal

La carbonización se utiliza con la biomasa húmeda, cuyo destino final es generar pequeños carbonos, por lo que la basura que no se puede quemar se aprovecha para generar energía.

“Esto es lo mismo que el carbón que se quema en termoeléctricas, además se obtiene agua en el proceso que es un fertilizante líquido, porque todos los nutrientes de la basura orgánica se quedan en el agua”, enfatizó.

“Llegan los camiones de basura orgánica, se mete a la trituradora, posteriormente se lleva la almacenamiento porque es una planta que opera 24/7; tres camiones pueden llegar al día y se va consumiendo la basura, se pasa una válvula de presión para que cuando esté en alta presión se pueda subir la presión a 100°C sin que se evapore el agua. Después se mete a un intercambiador de entrada, donde se le quita el 50% de agua, para calentarlo posteriormente pasa al reactor, que es dónde se convierte en hidrocarbón, el cual todavía se tiene que dejar secar quitándole el exceso de agua mediante el filtro prensa”, dijo Camarena.

La gasificación es uno de los procesos más limpios para quemar basura, lo que genera CO2; lo que quieren es reducir las emisiones, generando carbón que es lo que ayudará a limpiar la ciudad. “Tenemos que cuidar todas las zonas del Valle de México, que es una cosa que no se dice”, aseguró a LA PRENSA.

Foto: Cortesía Sobse

La energía que consumen no es de combustibles fósiles, sino de plantas, las cuales ya han capturado el óxido de carbono.

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Un proyecto que no puede fallar

Es un proyecto pensado a diferentes escalas. La primera fase inicia con un módulo, es demostrar que la tecnología funciona, todo bien, a diferentes escalas, teniendo un laboratorio de 20 litros, aprendiendo de cómo se escala con instalación.

La fase 2 es agregar 5 módulos, con un total de 6 después, pasar a 18, hasta llegar a 36; el sistema está pensado a ir creciendo según las necesidades.

Lo que se quiere evitar es que la basura se vaya a rellenos sanitarios, buscan reducir las emisiones, por lo que el carbón que producen en la carbonización puede ponerse en el suelo para crear el secuestro de carbono, lo que podría secuestrar 9 mil 500 toneladas y permitiría mejorar el suelo.

La planta costó 15 millones de dólares, que fueron otorgados por la Secretaría de Energía del Fondo para la Transición Energética y el Aprovechamiento Sustentable de la Energía”, recalcó Camarena.

Cuenta con 800 sensores, los cuales monitorean cada proceso y podrá ser operada por 20 personas en la primera etapa.

El proyecto total es de 540 millones de dólares, pero “no sólo debe ser un proyecto bonito sino rentable”, por lo que a partir del mercado de bonos de carbono será rentable.

Foto: Cortesía Sobse

La idea es que a la CDMX no se le cobre nada, para que posteriormente se puede sacar el dinero de inversionistas, el plan a futuro es que después el recurso venga de las Afores, por lo que se debe garantizar realizar el pago de regreso, para que posteriormente conforme vaya ganando la rentabilidad de las Afores vaya siendo más grande hacia el futuro.

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Primera planta a nivel mundial

Es la primera planta a nivel mundial que combina las tecnologías, es la planta que tiene el reactor de carbonización hidrotermal más grande del mundo, por lo que es un proyecto mexicano guiado por empresas mexicanas, donde se están implementando diferentes tecnologías”, enfatizó.

La UNAM y el Gobierno de la Ciudad de México se están atreviendo a hacer la primer receta que nunca nadie la había hecho, con una visión de la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, que normalmente nadie tiene, y que al ser científica, busca las necesidades y soluciones para el tema de la basura, por lo que se animó a implementar el proyecto.

Al margen de las emisiones, la idea es que a la Ciudad de México no se le cobre sino que el modelo de negocios funcione por la venta de carbonos, lo cual se anunciará más adelante.

Cuando estén los 36 módulos será una de las plantas más grandes del mundo en convertir basura orgánica en energía y secuestro de carbono, lo que sería igual a quitar de circulación 120 mil carros o generar electricidad a 150 mil casas y México estaría a la vanguardia a nivel mundial en manejo de residuos.

Esta tecnología hace secuestro de carbono, pero al generar la planta se genera éste, por tal motivo se cuantificó todo lo que se iba a hacer en la planta, por lo que la generación de carbono que se hizo se recupera en los primeros dos meses que se hizo.

Falta mucho por hacer, estamos trabajando en muchas áreas como la aplicación del carbono, secuestro de carbono, la parte social y la inversión del futuro”, concluyó.

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