Ante el caos que en la movilidad de miles de ciudadanos causó el incendio en instalaciones del Sistema de Transporte Colectivo (STC) Metro, taxistas aprovecharon para hacer su agosto, al aplicar arbitrariamente un aumento a la tarifa o cobrar una cuota fija.
Los capitalinos que desde temprana hora resultaron afectados por la situación que se vivió en ese medio de transporte, tuvieron complicación para llegar a su trabajo o algún otro sitio.
También transportistas del servicio concesionado conocido como microbuses, bajo el pretexto de que aumentó la demanda y no se daban abasto, por la suspensión del servicio de las líneas 1, 2, 3, 4, 5 y 6 del Metro, modificaron el cobro fijo que deben hacer.
Se vivió una mañana caótica y resultó insuficiente el apoyo de unidades de la Red de Transporte de Pasajeros (RTP) y de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC), para transportar a las personas que se vieron afectadas por el incendio que se registró en el Puesto Central de Control del STC Metro.
Afuera de las estaciones de ese medio de transporte que estuvieron cerradas y serán reabiertas hasta nuevo aviso, se registraron largas filas de ciudadanos que esperaban abordar los vehículos de la RTP o alguna unidad de la SSC que fueron acondicionadas para la transportación y que, en varias zonas de la metrópoli resultaron insuficientes ante la demanda.
Trabajadores del transporte de alquiler, tras el incendio registrado, comenzaron a situarse en estaciones estratégicas del Metro en las que se suspendió el servicio, a fin de ofrecer el traslado de las personas ya se de manera individual o en grupo hacia un destino determinado, con el cobro de una cuota fija, sin poner el taxímetro.
LA PRENSA constató que taxistas que hicieron fila afuera de diversas estaciones, como las de la Línea 2, ubicadas sobre calzada Tlalpan, ofrecieron sus servicios con un coro elevado, lo que causó inconformidad entre los usuarios.
Desde unos minutos antes de las 6:00 horas, se vivió en la Ciudad de México todo un caos, debido al incendio de la Subestación del STC, ubicada en Delicias número 67, colonia Centro, con miles de personas que no encontraban la manera de trasladarse y se vieron obligadas a caminar para llegar a su destino y algunas, tuvieron que ajustarse a las condiciones de integrantes del transporte de alquiler y concesionado.
De inmediato se aprovechó la situación para que se dieran abusos en el transporte, incluidas las aplicaciones que ofrecen el servicio de traslado, al exagerar en los cobros, ante el pretexto de que se tenía la denominada tarifa dinámica.
Fue insuficiente por horas el apoyo de la Red de Transporte de Pasajeros, a través de sus unidades, al igual que el servicio que dieron vehículos de la SSC, con capitalinos que estaban desesperados al no poder desplazarse a su destino.