En un contexto crucial para la agricultura en México, donde el cambio climático y la sequía ejercen una creciente presión sobre los recursos hídricos y elevan la demanda de productos agrícolas, Gruma y el Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo (CIMMYT) establecieron una alianza para capacitar a técnicos agrícolas en prácticas sostenibles.
El Curso de Técnico Certificado en Agricultura Sustentable es un programa integral que busca incorporar prácticas responsables en la producción agrícola nacional, enmarcado dentro del “Proyecto de Sustentabilidad Gruma: Impulsando Sistemas Agroalimentarios Sostenibles en Esquemas de Producción Intensivos”. Este esfuerzo tiene como objetivo transformar la agricultura mexicana hacia modelos más resilientes y ambientalmente responsables.
La segunda sesión del curso se celebró del 15 al 18 de octubre de 2024 en las oficinas globales de CIMMYT en Batán, Texcoco, y se centró en la producción sostenible de maíz en estados clave como Sonora, Estado de México y Sinaloa.
Durante el curso, se introdujeron herramientas de vanguardia como la plataforma e-Agrology, que permite monitorear y ajustar en tiempo real las condiciones de los cultivos, optimizando así la respuesta ante variaciones climáticas. Los técnicos también fueron capacitados en manejo de fertilidad de suelos, control integrado de malezas y estrategias de comunicación para promover el desarrollo rural.
Iván Ortiz, científico del CIMMYT y uno de los instructores del curso, destacó la relevancia de este tipo de capacitación y enfatizó la importancia de la interpretación de análisis de suelos y el uso de sensores agrícolas avanzados. Según Ortiz, estas habilidades no solo son esenciales para reducir el impacto ambiental, sino también para mejorar la competitividad del sector agroalimentario mexicano.
Ortiz, quien ha fomentado durante años la colaboración entre el sector privado y las instituciones en pro de la sostenibilidad agrícola, subrayó en la conferencia “Estrategias del CIMMYT para Enfrentar los Retos de Adaptación en la Agricultura de México” que la agricultura de conservación es indispensable para el futuro del campo mexicano. Este enfoque integra prácticas como el manejo eficiente de nutrientes y la regeneración de suelos, pilares fundamentales para garantizar la sostenibilidad del sector en el largo plazo.
Jacobo Arellano, especialista de la Universidad Autónoma Chapingo, complementó esta visión al señalar en el curso la importancia de la colaboración interinstitucional como un elemento clave para enfrentar los desafíos de la agricultura intensiva y mitigar sus impactos ambientales. Según Arellano, para los técnicos agrícolas, esta capacitación representa más que una actualización profesional: “es una oportunidad para convertirse en agentes de cambio”, comprometidos con el fortalecimiento de la producción agrícola en sus regiones.
La agricultura sustentable es vista como un medio para satisfacer las necesidades actuales sin comprometer los recursos de futuras generaciones, según el gobierno de México. Con un valor de producción mundial superior a los 3 billones de dólares anuales, el sector agrícola representa hasta el 40% del PIB en algunas economías, pero es también responsable de más del 20% de las emisiones de gases de efecto invernadero.
Con esta alianza, Gruma y el CIMMYT avanzan hacia un modelo agrícola que responde a las necesidades actuales y establece un legado de sostenibilidad para futuras generaciones. Basándose en sus pilares de sustentabilidad—Medio Ambiente, Salud y Bienestar, Nuestra Gente, y Comunidad— el programa no solo forma técnicos en prácticas agrícolas sostenibles, sino que también impulsa una transformación que beneficia a las comunidades y fortalece el bienestar social. Este enfoque integral refuerza la resiliencia del sector agrícola frente al cambio climático y asegura una producción alimentaria responsable y competitiva.
Esta colaboración, que se apoya en la innovación y la capacitación, se posiciona como un modelo de cambio hacia una agricultura más sostenible en México y un paso importante en la construcción de un futuro donde la seguridad alimentaria y el cuidado ambiental sean una realidad duradera.
