En 2010 una estudiante de preparatoria llamada Constance McMillen se preparaba para asistir a su baile de graduación acompañada de su novia. Sus planes se vieron truncados luego de que la escuela le prohibió acudir por el hecho de ser lesbiana, algo que ella y un grupo de compañeros consideraron un acto de discriminación hacia ambas.
El conflicto escaló a instancias legales, y la institución optó por cancelar el evento, ante la gran cantidad de atención que recibieron por parte de la prensa y algunas celebridades (como la presentadora Ellen DeGeneres, la comediante Wanda Sykes y el bloguero Perez Hilton).
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Pese a los reclamos de la gente, un grupo de padres de familia se mantuvo firme con la postura de la escuela, y organizó otra fiesta privada donde se prohibió nuevamente a Constance acudir. En su lugar, ella y su pareja festejaron en una celebración pequeña de tan sólo cinco estudiantes más.
Pero su historia no quedó en el olvido y en 2016 sirvió como inspiración para crear el musical The prom, que se estrenó con gran éxito en Broadway dos años más tarde, alcanzando siete nominaciones a los Premios Tony en 2019, y convirtiéndose en la base para la cinta homónima protagonizada por Meryl Streep y Nicole Kidman en 2020.
El próximo 1 de octubre esta puesta en escena llega al Centro Cultural II de la Ciudad de México de la mano de los productores Marte Calderón y Chema Verduzco, con la cual buscan crear conciencia y entablar un diálogo con la audiencia sobre la igualdad.
“Estamos seguros que vamos a conseguir una madurez en la sociedad mexicana, donde nos quitemos etiquetas, prejuicios y veamos las grandes verdades universales que se tratan en la obra como el amor, la traición, la inquietud juvenil por descubrirse, enamorarse y ser felices. Eso es lo que queremos vincular con la gente”, señaló Marte en entrevista.
El también empresario reconoció el legado de los grandes musicales (como El fantasma de la ópera), que han marcado un parteaguas en el teatro mexicano, e indicó que este título es también una oportunidad de ofrecer a las personas una propuesta diferente que demuestre la versatilidad que hay en el país.
“No queríamos replicar obras por el simple hecho de que fueron muy exitosas en México hace muchos años. El público mexicano está ávido de cosas más interesantes, sobre todo la temática que toca la obra es bien compleja, porque es una crítica social muy fuerte, y estamos seguros de que lo van a aceptar con los brazos abiertos”.
Sin revelar ningún nombre, adelantó que el elenco es para ellos el “dream team” del teatro, ya que está conformado por grandes personalidades que nunca antes se habían reunido en una obra, y le brindaron a su proyecto una energía muy especial.