Tras varios meses de estar fuera de los reflectores, el actor Rafael Amaya rompió el silencio y por primera vez el protagonista de la serie “El Señor de los Cielos” habló del terrible infierno que vivió tras caer en el mundo de las drogas.
En una entrevista exclusiva para la revista People, Amaya narró la experiencia de estar en un centro de rehabilitación, además de que contó que no estaba bien ni físico ni mentalmente.
“Perdí mi paz interior, el amor que le tenía a mi familia, a mi trabajo. Poco a poco me fui sumergiendo en el fango oscuro del alcohol y las drogas, viviendo todos los excesos posibles habidos y por haber”.
El actor que se había colocado en el gusto del público por su papel de capo, reveló que tocó fondo por lo que pidió ayuda a uno de sus amigos, el cantante Roberto Tapia, quien en compañía de su mánager Karem Guedimin y la hermana de Rafael, Fátima, lo sacaron adelante.
Tras ir dejando poco a poco el mundo de las adicciones, el histrión se dejó ver en diferentes ocasiones, pero fue esta semana cuando él confirmó que estuvo en una clínica de rehabilitación.
“Soy un ser humano, no soy un robot. Me dejé llevar por el alcohol, las banalidades. Estaba cegado por el manto oscuro de la drogadicción”, comentó para la revista.
El mismo cantante de regional mexicano, Roberto Tapia, confirmó que Amaya se dejó influenciar por su papel como capo, incluso dijo “que se creía “El Señor de los Cielos”.
“Es una persona que nunca está pensando en hacerle un daño a nadie, lo que sí es que se perdió en el personaje y eso fue lo que terminó afectándole su carrera en ese momento”, contó Tapia a People en Español.
El cantante confesó que recibió una llamada del mismo actor y sin pensarlo dos veces lo ayudó a ingresar a un centro de rehabilitación del exboxeador Julio César Chávez, quien confirmó que Amaya llegó un poco psicótico.
Gracias a la ayuda que recibió, el actor ha ido mejorando a pesar de que en febrero de 2019 circulaban versiones sobre el estado del famoso.
Con información de Infobae