El ingreso al segundo concierto del cantante puertorriqueño Bad Bunny se vio más organizado, luego del caos vivido en el primer día de su presentación en el Estadio Azteca.
Los problemas de la primera noche por la falsificación y clonación de boletos que incluso fueron adquiridos de manera legítima, en este segundo concierto ya no se vieron como ayer.
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El arribo de los seguidores del intérprete del éxito “Titi me preguntó” fue más rápido comparado con lo ocurrido ayer sobre calzada Tlalpan, donde el caos vial fue incontrolable, ya que la fluidez de los vehículos permitió que el acceso a la zona del estadio fuera sin tantos problemas.
Además, para quienes llegaron en transporte público también la llegada y el ingreso al Coloso de Santa Úrsula fue sin tantos contratiempos.
Sin embargo, pese al operativo de efectivos de la Secretaría de Seguridad Pública capitalina contra la reventa y a la detención de 14 revendedores, estos sujetos continuaron con la venta ilegal de boletos en los alrededores del estadio.
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Esta vez el ambiente afuera del coloso entre los fanáticos del “Conejo Malo” fue distinto a lo vivido ayer, ya que en locales y puestos alrededor del estadio se podían escuchar los éxitos del intérprete de “Andrea” e incluso algunos se atrevieron a vender bebidas alcohólicas de manera clandestina.
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En las calles aledañas al estadio sede de dos mundiales de futbol, con orden, la afluencia de vehículos fue aumentando, pero esta vez el desorden vivido ayer no se repitió.
En estos momentos sólo se espera la salida al escenario del cantante puertorriqueño para que sus miles de seguidores hagan realidad su sueño, incluso muchos de los que ayer no pudieron ingresar, esta noche lo intentaron de nuevo para ahora sí poder disfrutar el cierre de la gira de Bad Bunny.
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