/ martes 27 de febrero de 2024

Responderá México con represalias a EU si impone aranceles al acero

La secretaria Buenrostro Sánchez afirmó que en caso de que Estados Unidos imponga aranceles en la industria del acero, México tendría que responder de la misma manera

La titular de la Secretaría de Economía (SE), Raquel Buenrostro, afirmó que en caso de que Estados Unidos imponga aranceles en la industria nacional de acero, México tendría que responder de la misma manera, lo que eventualmente afectará a las empresas y sus cadenas de valor.

“Jurídicamente también nos corresponde poner aranceles para ellos en ciertos productos para que tengan el mismo impacto, por eso les digo que no nos conviene, porque a una aplicación así nos corresponde actuar en reciprocidad”, expuso en conferencia.

La funcionaria sostuvo que las acusaciones de una supuesta triangulación para la venta de acero por parte de México hacia Estados Unidos obedecen solamente a una presión política en víspera de las elecciones presidenciales.

“Es una presión de los congresistas (estadounidenses) por el proceso electoral y en la medida que se acerque noviembre, las presiones aumentarán. Ni a México y Estados Unidos les conviene imponer aranceles”, aseguró.

A mediados de febrero, la Oficina del Representante Comercial de los Estados Unidos (USTR, por sus siglas en inglés) acusó una falta de transparencia por parte de México para la comercialización de acero desde terceros países hacia territorio estadounidense.

En un comunicado emitido el 16 de febrero, la dependencia encabezada por Katherine Tai recordó que debido a una declaración conjunta realizada desde 2019, Estados Unidos tiene la posibilidad de volver a imponer aranceles en productos acereros.

“Aunque políticamente a ellos les convenga poner un arancel, duraría igual que la vez pasada, unos cuantos meses. En las pláticas que hemos tenido la preocupación en ciertas fracciones arancelarias, pero no hay empresas grandes en Estados Unidos que trabajen esa rama”, subrayó Buenrostro.

La funcionaria descartó que exista falta de información o transparencia por parte de México, ya que para la importación y eventual comercialización de productos a base de acero se incluyen datos sobre su país de fundido o colado. Según la Cámara Nacional de la Industria del Hierro y del Acero (Canacero), en 2023 México tuvo una participación de mercado de 2.5 por ciento en la industria acerera de Estados Unidos.

Por su parte, Estados Unidos concentró cerca del 14 por ciento en la industria de acero mexicana.

“Muchas de las empresas juegan delos dos lados, es decir, están en México y Estados Unidos junto a sus cadenas de valor. No parece tener sentido el reclamo; si todos estamos más informados, es más difícil para los congresistas levantar polvaredas”, puntualizó la funcionaria federal.

Revisan 600 productos

La titular de la SE informó que México analiza la imposición de aranceles en aproximadamente 600 productos de origen asiático por dumping, que es cuando una empresa extranjera introduce un producto a un país por debajo del precio de mercado nacional.

Al menos 205 de estas fracciones corresponden a la industria de acero y aluminio, el resto son textiles, calzado, plásticos y vidrios, entre otras.

Según Buenrostro, no es un trabajo fácil porque muchas de las supuestas empresas afectadas son pymes y no toda su producción está en el mercado formal, lo que imposibilita la capacidad de medir sus afectaciones totales.

La titular de la Secretaría de Economía (SE), Raquel Buenrostro, afirmó que en caso de que Estados Unidos imponga aranceles en la industria nacional de acero, México tendría que responder de la misma manera, lo que eventualmente afectará a las empresas y sus cadenas de valor.

“Jurídicamente también nos corresponde poner aranceles para ellos en ciertos productos para que tengan el mismo impacto, por eso les digo que no nos conviene, porque a una aplicación así nos corresponde actuar en reciprocidad”, expuso en conferencia.

La funcionaria sostuvo que las acusaciones de una supuesta triangulación para la venta de acero por parte de México hacia Estados Unidos obedecen solamente a una presión política en víspera de las elecciones presidenciales.

“Es una presión de los congresistas (estadounidenses) por el proceso electoral y en la medida que se acerque noviembre, las presiones aumentarán. Ni a México y Estados Unidos les conviene imponer aranceles”, aseguró.

A mediados de febrero, la Oficina del Representante Comercial de los Estados Unidos (USTR, por sus siglas en inglés) acusó una falta de transparencia por parte de México para la comercialización de acero desde terceros países hacia territorio estadounidense.

En un comunicado emitido el 16 de febrero, la dependencia encabezada por Katherine Tai recordó que debido a una declaración conjunta realizada desde 2019, Estados Unidos tiene la posibilidad de volver a imponer aranceles en productos acereros.

“Aunque políticamente a ellos les convenga poner un arancel, duraría igual que la vez pasada, unos cuantos meses. En las pláticas que hemos tenido la preocupación en ciertas fracciones arancelarias, pero no hay empresas grandes en Estados Unidos que trabajen esa rama”, subrayó Buenrostro.

La funcionaria descartó que exista falta de información o transparencia por parte de México, ya que para la importación y eventual comercialización de productos a base de acero se incluyen datos sobre su país de fundido o colado. Según la Cámara Nacional de la Industria del Hierro y del Acero (Canacero), en 2023 México tuvo una participación de mercado de 2.5 por ciento en la industria acerera de Estados Unidos.

Por su parte, Estados Unidos concentró cerca del 14 por ciento en la industria de acero mexicana.

“Muchas de las empresas juegan delos dos lados, es decir, están en México y Estados Unidos junto a sus cadenas de valor. No parece tener sentido el reclamo; si todos estamos más informados, es más difícil para los congresistas levantar polvaredas”, puntualizó la funcionaria federal.

Revisan 600 productos

La titular de la SE informó que México analiza la imposición de aranceles en aproximadamente 600 productos de origen asiático por dumping, que es cuando una empresa extranjera introduce un producto a un país por debajo del precio de mercado nacional.

Al menos 205 de estas fracciones corresponden a la industria de acero y aluminio, el resto son textiles, calzado, plásticos y vidrios, entre otras.

Según Buenrostro, no es un trabajo fácil porque muchas de las supuestas empresas afectadas son pymes y no toda su producción está en el mercado formal, lo que imposibilita la capacidad de medir sus afectaciones totales.

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