Apenas Omar García Harfuch llegue al Senado habrá dos iniciativas de ley que se pondrán a consideración por parte de Morena: La creación de un Sistema Nacional de Inteligencia y la segunda iniciativa es más y mejor policía, crear academias estatales que preparen mejores elementos y convertir esta actividad en una opción digna con mejores ingresos, capacitación y elementos de combate al crimen.
Omar García Harfuch, candidato a senador por la CDMX por la coalición oficialista de Morena, PT y PVEM, explica en una charla con LA PRENSA que la coordinación entre las autoridades federales y las entidades federativas es muy importante, con un sistema nacional se podrán tener protocolos eficientes de actuación en todos los estados.
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“Hay que homologar a los policías, homologar unidades, por ejemplo, el combate a la extorsión no se puede atender de una manera en un estado, de una manera en otro, y luego el gobierno federal atenderlo de otra manera. Algo que ya funcionó es el combate al secuestro. ¿Por qué bajó tanto el delito de secuestro?, porque se logró homologar en las fiscalías de las 32 entidades federativas que las policías locales fueran un espejo de lo que era el gobierno federal”, dice.
García Harfuch dice que la reforma judicial es un tema al que no se le debe temer y que los jueces de la Suprema Corte de Justicia deberían ser elegidos en un proceso abierto.
“Yo sí creo que no hay que tenerle miedo al voto popular. No sé cuál es el escándalo de lo que propone el señor presidente de que los jueces sean elegidos por votación popular”, dijo.
Actualmente, explicó, el 80% de los delitos que ocurren son del fuero común, y es un tema que no se puede combatir desde el gobierno federal, forzosamente se requiere la participación de los policías estatales y las fiscalías locales.
“Un Sistema Nacional de Inteligencia es ordenar protocolos para que todas las instituciones abracen un mismo fin: disminuir la violencia, mejor coordinación, y esa ley, lo que nos permite es una mayor coordinación de las policías estatales con las federales y las fiscalías locales para que todos vayan enfocados en el mismo fin”, señala.
“Esto no significa que el gobierno federal se debe de lavar las manos, pero sí necesitamos la coordinación estrecha entre las fiscalías locales, eso no se resuelve desde el gobierno federal sin los estados”, explica.
Se necesitan homologar protocolos en todos los delitos, por ejemplo “en la violencia contra la mujer tienen que tener unidades especializadas para la atención no solo de parte de la policía, sino en las propias fiscalías. ¿Sabes cuántas denuncias se inhiben para que no lleguen a denunciar? Porque una violencia que parezca menor, si no se atiende de manera adecuada, pues deriva en feminicidio”.
“El otro gran tema que se va a impulsar desde el senado es tener academias estatales, porque no sólo se trata de un número, sino de tener mejores policías y eso lo logras dignificando policías, no en el discurso, pero sí en los hechos. Se hizo en la CDMX con la Universidad de la Policía, que duplicó la capacitación y la cantidad de elementos trabajando.
Se necesita una capacitación real para que le sirvan mejor a la gente, la inseguridad no respeta ni clases sociales, ni territorios en el país, se necesita darles certeza jurídica y mejores ingresos, de hecho, en la CDMX se le aumentó 54% los ingresos de la policía.
El financiamiento de las academias o universidades de la policía provendrá, por ejemplo, del Secretariado Ejecutivo que le da recursos a los estados.
“Hay cualquier cantidad de recursos, el Secretariado Ejecutivo, o sea el gobierno federal, otorga recursos a los estados. ¿Qué es lo que hay que hacer? Trabajar con las entidades federativas, no me refiero a condicionar a los estados, porque cada entidad tiene necesidades diferentes y las de Yucatán son muy diferentes a las de Baja California, Tijuana y Mérida tienen necesidades diferentes”, señaló.
García Harfuch señala que hay 50 municipios con una alta violencia y el 40% de los homicidios dolosos se concentran en 10 estados que es en donde se concentran los delitos de alto impacto “en esos hay que concentrarnos”.
Omar García Harfuch persiste gracias a su equipo de trabajo
Omar García Harfuch parece estar más allá de lo que sucede a su alrededor. Su llegada causa revuelo, ya sea en un acto de campaña o no. Él, inmutable, y las más de las veces con una sonrisa, en la charla con LA PRENSA alaba los logros de su equipo –que es el que, dice, lo sostiene– , elogia el trabajo de sus compañeros en la policía, habla de su amor por los animales, de las enseñanzas de sus padres, de lo que hará al llegar al senado, de lo que ha aprendido en sus recorridos por las 16 alcaldías, proporciona datos y cifras… sólo se distrae, y no, para reacomodarse en el asiento.
Explica que después de noviembre no sabía si iba al Senado, sin embargo, eso le dio “mucho gusto”, porque le permitió continuar con los recorridos en la ciudad “y no sólo a mí, al equipo, nos preocupó que eso se fuera a terminar y tuviéramos que esperar hasta integrarnos a la candidatura de la campaña de la Doctora Claudia Sheinbaum (candidata a la presidencia de la República y ex jefa de gobierno), y eso justamente lo aprendimos más con la doctora. En mi trabajo, en seguridad, por años había sido siempre de servicio a mi país, siempre de servicio a la ciudadanía, pero no con el contacto con la ciudadanía… y con la doctora como jefa de gobierno (…) ahí aprendimos que las políticas de seguridad y estrategias de seguridad que implementamos desde la policía, pues daban mucho mejores resultados si las rebotábamos permanentemente con vecinas, vecinos, con todas las reuniones que teníamos en la ciudad”.
“El senado, lo que nos permite, yo voy a ser senador por la Ciudad de México, pues nos permite continuar cerca de todos los sectores que hemos conocido ya en estos cinco años (…) Sobre todo, algo que me gustaba mucho de las reuniones vecinales era que nosotros, sin importar la alcaldía o la colonia, les presentábamos la estrategia que íbamos a implementar en sus áreas, en sus colonias o en sus alcaldías, pero ‘(decían) oiga, si mejor se pasan de esta zona a acá’; construías sobre lo que los vecinos te decían”.
Estar cercano a la gente, reconoce, “te da una sensibilidad distinta, que difícilmente en una oficina obtienes, por más que quieras ser cercano (...) es diferente, escuchas las necesidades de primera mano y no sólo en seguridad. El tiempo que fui jefe de la policía te enterabas de otros temas, pues nada más para canalizar, pero todo se centraba en materia de seguridad, ahorita en campaña al Senado me dicen de todo (...) eso es lo que más me llevo”.
Con sencillez, asegura que la formación que tuvo como policía es algo que agradecerá de por vida, porque “la policía te enseña a resolver, la policía, te enseña sin importar qué situación, tienes que resolver (...) vemos a miles de hombres y mujeres policías que están en la calle, mujeres y hombres policías que están… que resuelven, y la formación que tenemos, no solo yo, sino el equipo que me acompaña –muchos también policías–, pues, estamos seguros de que cualquier tarea que se nos encomiende la vamos a sacar bien y la vamos a resolver, porque eso es lo que sabemos hacer, resolver y dar resultados”.
Al hablar sobre los fracasos dice que “me han enseñado a perseverar, a persistir, a esforzarte más; lo más fácil cuando pierdes en algo, o cuando fracasas en algo, es ¡ay, ya no salió!, irte a tu casa a deprimirte; no, en nuestro equipo no sucede eso, nosotros estamos… no acostumbrados, estamos formados para, sin importar lo que tengamos que hacer, volver a levantarnos, persistir esforzarnos más que los demás y obtener un buen resultado; eso no tenemos duda alguna qué nos da, pues eso nos da muchas enseñanzas, también te enseñan a no cometer los mismos errores, pero hay veces que también fallas aunque no hayas cometido algún error, y es importante no desanimarte y continuar adelante, eso aquí no solo yo, más bien eso lo tiene también mi equipo, que es lo que a mí me sostiene para continuar”.
Sonríe complacido cuando se le señala las muestras de cariño que recibe de la gente allá donde lleve sus actos de campaña, pero reconoce que ese cariño “se traduce en que están confiando en ti, y con esa confianza, pues viene responsabilidad, porque sí, obviamente adultos mayores, mujeres, hombres, adolescentes, niños, nos abrazamos, y con mucho gusto, pero también están esperando qué vas a hacer y que las necesidades que te dieron, o los papelitos (...) que les contestes, que atiendas, no sólo que ya anotaste cualquier cantidad de cosas y nadie les habla y no hay un seguimiento, en eso se basa la confianza”.
En un spot publicitario asegura que de sus perros ha aprendido, lealtad, cariño y confianza. Para él, es “increíble” el cariño que transmiten los perros, y las mascotas en general, “perdón que se oiga tan absurdo y tan lógico, pero es más fácil… no necesitas decir nada, porque por la pura actitud de un animalito te transmite todo y eso es lo que me gusta mucho de los animales”. Se considera, dice, una persona leal y confiable.
En el trabajo en equipo debe haber, considera, una “lealtad mutua, muchas veces entiendes la lealtad, como decimos en la policía, de un mando superior hacia la gente que está contigo, pero no, la lealtad es en dos vías, y no, yo creo que el mando tiene que ser más leal a su equipo que… bueno, no más, igual, tiene que ser en dos vías”.
Cuando se le pregunta qué le aconsejó su mamá, la actriz mexicana María Sorté, cuando empezó su actual campaña, ríe y, pícaramente, confiesa, “la verdad no le dije”, aunque ya después lo platicaron.
Y al hablar de su mamá y su papá, el político Javier García Paniagua, revela que ellos de tuvo “enseñanzas muy claras, primero, yo nunca oí ni a mi papá ni a mi mamá hablar mal de nadie, nunca, y eso parece una cosa menor, pero no lo es, siempre aprendí de ellos: ‘Tú dedicate a lo tuyo, enfócate en avanzar, en trabajar, en ayudar a la gente, en hacer lo que tienes que hacer’, en lugar de estar… es mejor proponer que descalificar, es mejor construir que estar nada más descalificando, y es mejor sumar que dividir o restar”.
Se dice listo para su trabajo en el Senado y, por supuesto, apoyar las propuestas de Claudia Sheinbaum, de quien asegura será la próxima presidenta. “Para mí sería un honor servirle de cerca a la próxima presidente en la materia que ella considere, que también por mis antecedentes, no creo que vaya a ser algo diferente a lo que sé hacer”.
Omar García Harfuch nunca olvidará el ser policía
Y lo que sabe hacer es ser policía, algo que nunca olvidará esté en el puesto en que esté, pues “la formación no la puedes olvidar, sea cual sea tu formación inicial, porque son las bases de cómo te vas a conducir; yo me siento muy orgulloso de mi origen, muy orgulloso de mi origen laboral”.
En 2023 García Harfuch escribió un texto para LA PRENSA en el que hablaba de su misión y “la idea de no serle útil a mi país”, ahora que ha entrado en la política asegura que esa misión no ha cambiado “porque tengo muy claro, hace muchos años, que yo quiero servir a mi país, como muchos de cientos de miles de mujeres y hombres que quieren servir a su país, servir al país como servidor público, pero puedes servir a tu país de cualquier manera, hay gente que sirve a su país dando clases en un aula, gente que sirve a su país como médico, a mí me gusta el servicio público y eso es lo que quiero seguir haciendo, no ha cambiado tanto…”
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