Cada 10 de octubre se celebra el Día Mundial de la Salud Mental y este año la Organización Mundial de la Salud (OMS) en conjunto con la organización United for Global Mental Health y la Federación Mundial de Salud Mental, se han propuesto hacer un llamado a la población para invertir en tratamientos que generen bienestar a través de la campaña Acción a favor de la salud mental: invirtamos en ella.
El estrés es uno de los principales causantes de ansiedad y depresión, padecimientos que no distinguen profesiones y que se han disparado debido a la situación actual en la que vivimos; sin embargo, existen tratamientos no invasivos como la crioterapia, que despiertan nuestro cuerpo a través de neurotransmisores que elevan nuestros niveles de endorfinas, serotonina, oxitocina y dopamina, también conocidas como las hormonas de la felicidad, al instante.
Este tratamiento que puedes encontrar en Cryomx, consiste en ingresar a una cabina que emana gas de nitrógeno líquido a -180 grados por 3 minutos, beneficiando desde los tejidos más profundos del cuerpo hasta la superficie de la piel, dando resultados que nos llevan más allá de una cuestión estética.
¿Qué son los neurotransmisores?
Los neurotransmisores son aquellos que se encargan de enviar alertas al cerebro con la intención de prevenir el estrés, regular tu descanso y controlar tu apetito. Y no solo eso, cuando hay una variación brusca de temperatura, evitan que esta descienda muy rápido. Los neurotransmisores, en conjunto con las hormonas (endorfinas, dopamina, serotonina y oxitocina) viajan por la columna vertebral hasta el cerebro y por el torrente sanguíneo a todo el cuerpo, produciendo efectos diferentes en nuestros órganos; entre ellos, la sensación de bienestar y felicidad gracias a que reducen los niveles de cortisol.
La gran mayoría de medicamentos antidepresivos actúan sobre los receptores de serotonina en el cerebro para aumentar su funcionamiento y su presencia en el cuerpo es muy importante ya que se encarga directamente de inhibir la ira y la agresión, así como de regular el humor y el descanso. Cuando tenemos niveles bajos de esta sustancia, fácilmente podemos entrar en un cuadro depresivo. Por eso es importante hacer de la crioterapia un aliado a favor de la salud mental.
En cuanto a la dopamina, se produce directamente en nuestro cerebro y se le conoce como la molécula de recompensa, ya que aparece cuando logramos un objetivo, es la más abundante en nuestro cerebro cuando nos enamoramos.
La ocitoxina es la hormona que nos permite establecer vínculos duraderos. Sirve para sentir una mayor seguridad y socializar mejor. Influye en la empatía y la sociabilidad.
Las endorfinas son conocidas por su efecto analgésico. Se liberan a través de la médula espinal por el torrente sanguíneo y sus efectos pueden ser hasta 20 veces más potentes que los de los analgésicos que se venden en las farmacias.
“La crioterapia es una alternativa para aquellos que buscan bienestar, incluso si tienen depresión crónica, estrés y ansiedad, ya que, al activar el cuerpo de manera natural, le ayudamos al organismo a sanar desde adentro y equilibrarnos a través de la química natural de nuestro cuerpo”, comentó Javier Sors, director de Cryomx.
Además, si el cuerpo tiene dolores crónicos, el activarlos a través de la crioterapia también ayuda a reducirlos de manera considerable desde la primera sesión y en algunos casos hasta desaparecerlos