Tras volverse viral el caso de un peludo que se encontraba abandonado en un canal de aguas negras en Teoloyucan, autoridades de este municipio realizaron su rescate, luego de pasar varios días varado en un pedazo de roca esperando que alguien acudiera a salvarlo.
El caso se volvió viral luego de que un grupo de adolescentes jugaban en las inmediaciones del canal de aguas negras, cuando notaron que un peludo se encontraba atrapado en la parte baja del canal, refugiado en un pedazo de piedra sin poder encontrar una salida, se cree que el perro fue arrojado por una persona, pues difícilmente pudo haber escalado los muros que delimitan el canal.
Los jóvenes pidieron ayuda a la organización Mundo Patitas, que se encarga de rescatar perros abandonados o que son maltratados y que difunde información o solicita ayuda para los caninos, a través de sus cuentas de redes sociales.
Fue así como integrantes de Mundo Patitas comenzaron una transmisión en vivo solicitando ayuda para rescatar al peludo, llamado que fue escuchado por autoridades de dicha localidad y que fue atendido por personal de protección civil.
Al final, con el apoyo de los adolescentes, Mundo Patitas y las autoridades de Teoloyucan, lograron rescatar con vida al canino, que se encontraba hambriento y temeroso después de varios días que pasó en el abandono.
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A través de redes sociales, circula un video en el que se denuncia un caso más de maltrato animal, esta vez ocasionado por su insensible dueño, que no conforme de maltratarlo realizó una transmisión en una cuenta de redes sociales, mostrando su lado insensible y poco humano.
Aunque se desconoce el país en el que fue grabado, el video muestra a un joven que habla en inglés mientras transmite a través de su cuenta de Instagram, el sujeto se acerca a una lavadora la cual hace funcionar mientras un cachorro se encuentra en su interior.
El sujeto ríe y bromea mientras el peludo gira dentro de la lavadora, sin sentir ningún remordimiento y disfrutando del maltrato al que es sometido la inocente mascota. Tras algunos segundos de su reproblable acto, opta por detener el sufrimiento y abre la puerta de la lavadora, donde el cachorro sale despavorido buscando alejarse de la insensibilidad de su dueño.
JLP