Hoy en día, leer la etiqueta de la ropa que vamos a comprar tiene una doble importancia. Por una parte, saber que de preferencia esté hecha de 100 por ciento algodón, por un tema de comodidad y frescura, y por otra conocer qué tan amable será nuestra prenda con el medio ambiente.
Se sabe por un estudio que realizó Cotton Incorporated, que las prendas de algodón son las favoritas de las personas, no sólo en México sino a nivel mundial. Y eso se debe a que esta fibra es natural, lo que coloca al algodón en una de las fibras más versátiles en la industria de la moda.
De ahí la importancia de revisar la etiqueta de las prendas con el mismo interés que lo hacen a la hora de mirar, por ejemplo, el celular, la Tablet o un manual o instructivo de una pantalla o un aparato de sonido.
El que una prenda esté hecha con 100 por ciento algodón garantiza, sobre todo en esta época de calor, que será cómoda, suave y fresca. Además, si se usa para hacer ejercicio no guarda olores después de cada lava y, en el caso de los pantalones de mezclilla, entre más se usen más “personalizados” se vuelve la prenda.
Por lo que respecta a la parte del cuidado del medio ambiente, está comprobado que el algodón, por ser natural, es bio degradable. Esto significa dos cosas: que cuando se tira una prenda hecha con 100 por ciento algodón, al poco tiempo se vuelve a integrar a la tierra.
La segunda cosa importante es que, a diferencia de la ropa hecha con fibras sintéticas, en cada lavada no suelta micro partículas que se van a los ríos y mares, afectando a las especies marinas. Lo anterior, es común que suceda con telas plásticas cuyos residuos son tan pequeños que no se ven cuando las lavadoras realizan el ciclo de enjuague y centrifugado.
