El primer cuarto arrancó con unos Vikings que con intensidad y máxima concentración, buscaron a como de lugar intimidar a los contrarios con jugadas de grande yardaje para establecer ofensivas largas que les permitieran dejar a la explosiva ofensiva de los 49ers fuera del terreno de juego el mayor tiempo posible.
Fue así como al 4;48 del primer episodio que Kirk Cousins conectó un buen pase con Jordan Addison para poner el primer touchdown gracias al envío de 20 yardas.
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Para el segundo cuarto ambas ofensivas pudieron brillar. Primero fue la de los Vikings quienes lograron anotar tres puntos para irse al frente 10-0 al 7;33 del periodo, pero los Niners no se iban a quedar de brazos cruzados y fue así como Christian McCaffrey por fin pudo aparecer para anotar los primeros puntos de la visita y colocar el marcador 10-7.
Cuando parecía que quedaba poco tiempo en el periodo, los Vikings demostraron que su planteamiento ofensivo contra la gran retaguardia de los visitantes seguía funcionando y lograron anotar gracias a un pase de TD de Cousins de nueva cuenta para Jordan Addison bueno por 60 yardas, lo que selló el marcador parcial de 16-7 al descanso luego de errar el punto extra.
La segunda mitad vio el resurgir de los 49ers a pesar de la buena actuación que la defensiva púrpura continuaba en gran nivel. Con una certera ofensiva de casi 6 minutos, los Niners se acercaron 14-19 y pusieron a temblar a los locales, quienes de a poco se veía como iban decayendo ofensivamente.
Cuando parecía que los visitantes venían de atrás para poder dominar el encuentro y el marcador, Brock Purdy lanzó un par de intercepciones que terminaron por liquidar a su equipo y así, sumar la segunda derrota seguida del equipo.
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