LONDRES, Inglaterra, 11 de agosto.- Ryan Atkin, primer árbitroinglés del futbol profesional, abiertamente gay, espera que ladecisión de hacer pública su condición ayude a combatir lahomofobia en el deporte rey. Atkin rompió un tabú ayer jueves alhablar públicamente de su sexualidad y de la manera en la que elmundo del deporte reacciona ante la homosexualidad. “Ser gay notiene ninguna importancia cuando se trata de arbitrar un partido defutbol”, declaró en una entrevista con Sky Sports. “Pero sihablo de igualdad y de diversidad, voy a mencionar que soy gayporque es lo pertinente”, añadió. “La homofobia siempre es unproblema. Aunque las cosas mejoran cada día. Podemos cambiar eljuego y la cultura si cambiamos las mentes”, continuó. Atkin, de32 años, comenzó a arbitrar en 1999 y apoya la campaña CordonesArcoíris, lanzada por Stonewall, una asociación de defensa de losgay, lesbianas y transexuales, apoyada por la Federación Inglesa(FA) y la Premier League. Esta campaña busca sensibilizar alpúblico con un lenguaje contrario a la homofobia en el juego y loscomportamientos discriminatorios. Atkin espera que revelar suorientación sexual muestre al resto la vía a seguir en elbalompié. “Claramente es un salto a lo desconocido. En el futbolprofesional inglés sabemos muy bien que no hay ningún homosexualdeclarado y que nunca ha habido uno entre los árbitros”,destacó. “La gente que se siente cómoda en su piel es máseficaz. Lo mismo ocurre en el deporte profesional”,finalizó.
LONDRES, Inglaterra, 11 de agosto.- Ryan Atkin, primer árbitroinglés del futbol profesional, abiertamente gay, espera que ladecisión de hacer pública su condición ayude a combatir lahomofobia en el deporte rey. Atkin rompió un tabú ayer jueves alhablar públicamente de su sexualidad y de la manera en la que elmundo del deporte reacciona ante la homosexualidad. “Ser gay notiene ninguna importancia cuando se trata de arbitrar un partido defutbol”, declaró en una entrevista con Sky Sports. “Pero sihablo de igualdad y de diversidad, voy a mencionar que soy gayporque es lo pertinente”, añadió. “La homofobia siempre es unproblema. Aunque las cosas mejoran cada día. Podemos cambiar eljuego y la cultura si cambiamos las mentes”, continuó. Atkin, de32 años, comenzó a arbitrar en 1999 y apoya la campaña CordonesArcoíris, lanzada por Stonewall, una asociación de defensa de losgay, lesbianas y transexuales, apoyada por la Federación Inglesa(FA) y la Premier League. Esta campaña busca sensibilizar alpúblico con un lenguaje contrario a la homofobia en el juego y loscomportamientos discriminatorios. Atkin espera que revelar suorientación sexual muestre al resto la vía a seguir en elbalompié. “Claramente es un salto a lo desconocido. En el futbolprofesional inglés sabemos muy bien que no hay ningún homosexualdeclarado y que nunca ha habido uno entre los árbitros”,destacó. “La gente que se siente cómoda en su piel es máseficaz. Lo mismo ocurre en el deporte profesional”,finalizó.