En el mundo del box es uno de los deportes mejores pagados, pero de los más riesgosos, pues la integridad física de los jugadores está expuesta en todo momento; un mal golpe podrá ser mortal.

Un claro ejemplo de ello es el exboxeador Prichard Colón, de origen puertorriqueño, el cual nunca imaginó que el cuadrilátero se convertiría en el inicio y final de sus sueños.

El 17 de octubre de 2015 tras una pelea en la que se enfrentó contra Terrel Williams, la vida de Colón daría un cambio radical; luego de una serie de golpes que recibió el puertorriqueño, este cayó a la lona.

De emergencia fue trasladado a un hospital, en donde le dijeron que el campeón se había roto un vaso sanguíneo del cerebro, ocasionando que quedara en estado vegetal.

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Tras la noticia su madre y su familia jamás se dieron por vencidos y apoyaron en todo momento a Prichard Colón, esto generó que poco a poco la recuperación del exboxeador fuera de notoria.

Esta semana fue intervenido de manera exitosa en un hospital de Atlanta, donde le realizaron un implantamiento de placas en el área de la izquierda su cráneo, así lo dio a conocer su madre por medio de las redes sociales.

Lo cual será un beneficio para mejorar su área motriz, una de las más afectadas por los golpes.

No cabe duda que las ganas de vivir y el apoyo incondicional de la familia son la base para afrontar cualquier circunstancia, así sea la más difícil.

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