SOCCHI, Rusia, 29 de junio.- Fue otro día del ya merito. LaSelección Mexicana ha jugado basura y naufragó en losexperimentos de su técnico, Juan Carlos Osorio, al ser goleados yexhibido por la Selección de Alemania “B” y quedar fuera de lagran final de la Copa Confederaciones. El equipo germano nos hizocomo quiso. En tan sólo dos minutos nos clavó dos goles paraponer quieto a una escuadra tricolor que, no mostró nada. Salvo elgolazo de Marco Fabián, que fue lo más rescatable. Otra vez, un29 junio quedará marcado como otro día maldito ante unaselección incapaz de definir. El futbol mexicano ha recibido otrahumillación en torneo oficial; primero fue Chile con el 7-0 en laCopa América y ahora, cuando se tenía todo para dar el paso,Alemania nos regresó a la realidad.
GORETZKA NOS MATÓ EN DOS MINUTOS El partido nopudo empezar peor para México, con dos aproximaciones de Alemaniaa su área en sólo dos minutos, y dos goles consecutivos, ambos amanos de Goretzka, cuando apenas habían transcurrido siete minutosdel encuentro. En el primero, el centrocampista del Schalke 04,recibió un magnífico pase de Hendrichs frente al área grande delrival y, al primer toque envió el balón a la esquina derecha dela portería defendida por Ochoa. Tan sólo dos minutos después,llegó el segundo, en un mano a mano de Goretzka con el guardametamexicano del que, salió vencedor el alemán y que dejó ensilencio sepulcral a los numerosos aficionados mexicanos, en lasgradas del Olímpico Fisht de Sochi. Pronto se vieron los chicos deJuan Carlos Osorio en la necesidad de remontar, una situación quese ha repetido en todos y cada uno de sus partidos de la fase degrupos, pero agravada esta vez, por el peso de dos goles.Transcurrida la primera media hora del partido, su juego andabadesacertado de cara al gol, pese a sus muchas oportunidades, peroen ningún momento dejaron de creer en su futbol.
LO INTENTÓ, PERO NO LE ALCANZÓ Lo intentóuna y otra vez el tricolor, con peligrosas llegadas y centros alárea de Ter Stegen, pero tampoco los alemanes renunciaron hastacierto momento, al contraataque después de que México se hicieracon la posesión del esférico. Llegado el último cuarto de horadel primer tiempo, México tuvo dos goles en las piernas de susfutbolistas, pero Ter Stegen salvó a los suyos.
La volvió a tener enseguida “Chicharito”, que recibió lapelota a dos metros del portero rival e intentó marcar por encimadel guardameta del Barcelona; no tuvo suerte y el esférico se fuepor encima del larguero. A esas alturas, todo el juego era ya deMéxico, que hizo honor a su fama de no rendirse nunca y a sudemostrado amor por el juego directo, dejando a los pupilos deJoachim Löw en la ingrata labor de defenderse una y otra vez, detodas las embestidas de los mexicanos.
LES DAN UN BAILE Con algo menos de intensidad,el tricolor empezó la segunda parte con toda la intención quemostró, tras encajar los dos goles: en cinco minutos ya habíallegado dos veces a la portería de Ter Stegen, incluido unpeligrosísimo contraataque desaprovechado por Jiménez, que tirómuy flojo a las manos del portero. Y entonces se desperezaron losalemanes, que, tras crear tres ocasiones peligrosas en menos decinco minutos, a la cuarta sentenciaron el partido, poniendo unaventaja en el marcador (3-0) difícil de superar, incluso para untricolor que ha desplegado en esta semifinal uno de sus mejoresjuegos de los últimos tiempos. Werner marcó a portería vacía,tras un pase de Hector desde el borde lateral del área chica, enun contraataque mortal, aunque previsible ante los muchos espacioslibres dejados por México en su apuesta total por el ataque.
GOLAZO DE FABIÁN, LO MEJOR Pero ni con 3-0 serindieron los mexicanos, que volvieron a dominar la pelota yvolvieron a tener varias ocasiones de gol, sin darle descanso alarquero del “bundesteam”, que aún salvó varias oportunidadespeligrosas del rival. Obtuvieron al filo del final del partido supequeña recompensa, su más que merecido gol de honor que, marcóFabián en un disparo, esta vez sí, imparable. Pero como Alemaniaes Alemania, aún no estaba todo dicho: Younes, el último recambiode Löw poco antes del final, puso en el marcador el 4-1definitivo, en otro mano a mano con Ochoa. Es así, como México haquedado fuera para jugar la final y ahora, solo buscará un tercerlugar. Y Osorio seguirá con sus fórmulas que realmente no sirvenpara nada y con ello, no le alcanzará cuando participen en elMundial de Rusia 2018. Por ello, ¡Fuera Osorio!